El Castañeda en su 30° aniversario
Martes 18 de
Diciembre 2018
El Castañeda en su 30° aniversario
VER >>> El Castañeda en su 30° aniversario
El Instituto Superior “Fray Francisco de Paula Castañeda” celebró el miércoles 17 de octubre su 30° aniversario, con una misa en la Catedral Metropolitana.
Ese mismo día se realizó también el acto académico y la colación de grados en la Asociación del Magisterio Católico.
Teniendo en cuenta también la semana patronal por el recuerdo de la insigne carmelita Santa Teresa de Ávila, se llevaron a cabo distintas actividades en la Institución, como parte de los festejos.
Se destacaron la participación de la Agrupación Coral del Instituto y el trabajo del Grupo de Teatro Leído “Alta Voz” de la carrera de Letras, dirigido por el profesor Ricardo Tonini.
Origen y actualidad
"Una silla, una mesa y una máquina de escribir”. Estos fueron los instrumentos con los que contaba el Instituto en sus comienzos, en 1988, según rememora María Luisa Germain. Ella, junto a Silvina Ereira y Alejandra Martínez, son las tres personas que aún se encuentran trabajando en “el Castañeda”.
Con orígenes humildes, estos 30 años encuentran al Instituto unido en una propuesta educativa integral, con un establecimiento diversificado, encontrando su dedicación principal en la formación inicial de docentes.
“Estamos muy contentos y felices, aunque no podemos relajarnos por la gran cantidad de actividades que nos quedan hasta fin de año”, dijo el director del establecimiento, José Antonio Medei, en diálogo con El Litoral.
Es que hoy, el Instituto tiene una variada oferta académica con seis carreras de Profesorado: Educación Primaria, para la Educación Secundaria en Historia, para la Educación Secundaria en Lengua y Literatura, para la Educación Secundaria en Filosofía, para la Educación Secundaria en Biología, en Ciencias Sagradas, la Licenciatura en Filosofía y la Licenciatura en Letras en articulación con la Ucsf.
De igual forma, a través de su Extensión Áulica, el Ispi 4031 dicta desde 2017 la carrera Profesorado de Educación Primaria en la localidad de Alto Verde, facilitando la asistencia de los estudiantes del lugar y sus zonas aledañas.
Por otro lado, se ofrece formación continua con cursos y capacitaciones. Este año se han dictado cursos sobre docencia en primaria, prácticas de laboratorios, rol del preceptor y educación en la afectividad.
Asimismo, sus directivos resaltan las propuestas académicas de cursos con “capacitación situada” que parte de la necesidad de cada escuela partiendo de las líneas de acción que este año se ubicaron en torno al proyecto educativo institucional y la inclusión.
El legado
El establecimiento le debe su nombre al religioso Castañeda, aquel franciscano que fuera maestro y periodista. Y que sufriera el exilio más de cinco veces por parte del gobierno de Buenos Aires. Motivo por el cual hizo que, ante la adversidad, el padre se reinventara en cada pueblo que lo veía llegar, editando numerosos diarios y fundando escuelas.
Así, el Instituto de tres decenios que lleva su nombre se desarrolló con el espíritu misionero y de personalización que caracterizó la tradición del Fraile.
En este sentido, Medei recordó el trabajo sostenido que llevan desde la casa de estudios en los 28 años que lleva en funciones: pasando por los inicios en el colegio primario San José, donde se dictaba sólo la carrera de profesorado de nivel primario, la carrera de formación de directivos que se mantuvo durante doce años y el anexo que funcionó en Gálvez en el Instituto del Calvario de esa ciudad, donde se dictaron las carreras de Filosofía, Historia y Literatura para todos los estudiantes de la zona.
“Fueron todas experiencias muy lindas. Vimos y formamos a un montón de personas, muchos de ellos se perfeccionaron y gran cantidad son hoy en día son grandes referentes de las distintas instituciones educativas de la provincia”
Por su parte, la regente del Instituto, Verónica Sejas aludió “al matiz distintivo en el que nos esforzamos durante estos 30 años en mantenerlo”. “Con la cercanía y la familiaridad buscamos que nos conozcamos entre todos, saber el nombre y la historia detrás de cada uno de los integrantes de la comunidad. Es una mirada integral que nuestros alumnos destacan positivamente y nos distingue”, expresó.
Incertidumbre
Aunque la mayor parte de la atención está puesta en los festejos y el cierre de las actividades académicas ante el final de año, sus directivos se mostraron preocupados por las indefiniciones políticas actuales en el ámbito educativo.
“Si bien son problemas con los que siempre lidiamos, estamos con bastante incertidumbre ya que no está claro cuál es el futuro político para los Institutos de Formación Docente a nivel nacional”, comentó Medei.
“Todas las actividades que realizamos se hacen con un sustento económico que hoy escasea cada vez más. Si bien recibimos el aporte estatal básico, necesitamos algunos ingresos extra para solventar por ejemplo las becas o medias becas para algunos estudiantes”, completó el directo.
De todas maneras, la regente amplió esta intranquilidad argumentando que “los contextos nunca fueron auspiciosos por lo que la confianza en el futuro es parte de nuestra identidad”. “Haciendo memoria sobre estos treinta años y teniendo en cuenta la adversidad del momento creo que predomina un sentimiento de gratitud hacia quienes pusieron la piedra fundacional del instituto. En los inicios seguramente nadie pensó que podíamos llegar a ser lo que hoy somos”, finalizó.
El Instituto Superior “Fray Francisco de Paula Castañeda” celebró el miércoles 17 de octubre su 30° aniversario, con una misa en la Catedral Metropolitana.
Ese mismo día se realizó también el acto académico y la colación de grados en la Asociación del Magisterio Católico.
Teniendo en cuenta también la semana patronal por el recuerdo de la insigne carmelita Santa Teresa de Ávila, se llevaron a cabo distintas actividades en la Institución, como parte de los festejos.
Se destacaron la participación de la Agrupación Coral del Instituto y el trabajo del Grupo de Teatro Leído “Alta Voz” de la carrera de Letras, dirigido por el profesor Ricardo Tonini.
Origen y actualidad
"Una silla, una mesa y una máquina de escribir”. Estos fueron los instrumentos con los que contaba el Instituto en sus comienzos, en 1988, según rememora María Luisa Germain. Ella, junto a Silvina Ereira y Alejandra Martínez, son las tres personas que aún se encuentran trabajando en “el Castañeda”.
Con orígenes humildes, estos 30 años encuentran al Instituto unido en una propuesta educativa integral, con un establecimiento diversificado, encontrando su dedicación principal en la formación inicial de docentes.
“Estamos muy contentos y felices, aunque no podemos relajarnos por la gran cantidad de actividades que nos quedan hasta fin de año”, dijo el director del establecimiento, José Antonio Medei, en diálogo con El Litoral.
Es que hoy, el Instituto tiene una variada oferta académica con seis carreras de Profesorado: Educación Primaria, para la Educación Secundaria en Historia, para la Educación Secundaria en Lengua y Literatura, para la Educación Secundaria en Filosofía, para la Educación Secundaria en Biología, en Ciencias Sagradas, la Licenciatura en Filosofía y la Licenciatura en Letras en articulación con la Ucsf.
De igual forma, a través de su Extensión Áulica, el Ispi 4031 dicta desde 2017 la carrera Profesorado de Educación Primaria en la localidad de Alto Verde, facilitando la asistencia de los estudiantes del lugar y sus zonas aledañas.
Por otro lado, se ofrece formación continua con cursos y capacitaciones. Este año se han dictado cursos sobre docencia en primaria, prácticas de laboratorios, rol del preceptor y educación en la afectividad.
Asimismo, sus directivos resaltan las propuestas académicas de cursos con “capacitación situada” que parte de la necesidad de cada escuela partiendo de las líneas de acción que este año se ubicaron en torno al proyecto educativo institucional y la inclusión.
El legado
El establecimiento le debe su nombre al religioso Castañeda, aquel franciscano que fuera maestro y periodista. Y que sufriera el exilio más de cinco veces por parte del gobierno de Buenos Aires. Motivo por el cual hizo que, ante la adversidad, el padre se reinventara en cada pueblo que lo veía llegar, editando numerosos diarios y fundando escuelas.
Así, el Instituto de tres decenios que lleva su nombre se desarrolló con el espíritu misionero y de personalización que caracterizó la tradición del Fraile.
En este sentido, Medei recordó el trabajo sostenido que llevan desde la casa de estudios en los 28 años que lleva en funciones: pasando por los inicios en el colegio primario San José, donde se dictaba sólo la carrera de profesorado de nivel primario, la carrera de formación de directivos que se mantuvo durante doce años y el anexo que funcionó en Gálvez en el Instituto del Calvario de esa ciudad, donde se dictaron las carreras de Filosofía, Historia y Literatura para todos los estudiantes de la zona.
“Fueron todas experiencias muy lindas. Vimos y formamos a un montón de personas, muchos de ellos se perfeccionaron y gran cantidad son hoy en día son grandes referentes de las distintas instituciones educativas de la provincia”
Por su parte, la regente del Instituto, Verónica Sejas aludió “al matiz distintivo en el que nos esforzamos durante estos 30 años en mantenerlo”. “Con la cercanía y la familiaridad buscamos que nos conozcamos entre todos, saber el nombre y la historia detrás de cada uno de los integrantes de la comunidad. Es una mirada integral que nuestros alumnos destacan positivamente y nos distingue”, expresó.
Incertidumbre
Aunque la mayor parte de la atención está puesta en los festejos y el cierre de las actividades académicas ante el final de año, sus directivos se mostraron preocupados por las indefiniciones políticas actuales en el ámbito educativo.
“Si bien son problemas con los que siempre lidiamos, estamos con bastante incertidumbre ya que no está claro cuál es el futuro político para los Institutos de Formación Docente a nivel nacional”, comentó Medei.
“Todas las actividades que realizamos se hacen con un sustento económico que hoy escasea cada vez más. Si bien recibimos el aporte estatal básico, necesitamos algunos ingresos extra para solventar por ejemplo las becas o medias becas para algunos estudiantes”, completó el directo.
De todas maneras, la regente amplió esta intranquilidad argumentando que “los contextos nunca fueron auspiciosos por lo que la confianza en el futuro es parte de nuestra identidad”. “Haciendo memoria sobre estos treinta años y teniendo en cuenta la adversidad del momento creo que predomina un sentimiento de gratitud hacia quienes pusieron la piedra fundacional del instituto. En los inicios seguramente nadie pensó que podíamos llegar a ser lo que hoy somos”, finalizó.
