La venta de Yeimar
Jueves 19 de
Marzo 2020
Desde hace varias semanas esta Agrupación requiere información a la Comisión Directiva, a través de diferentes notas oportunamente presentadas, sobre las operaciones de ventas e incorporaciones de jugadores del plantel profesional sin recibir, como ya es tristemente habitual, ninguna respuesta.
Pero no se trata sólo de la ausencia de respuestas, sino de algo aún más preocupante: hemos advertido que, de manera recurrente, el presidente de la institución, Luis Spahn, manifiesta en sus expresiones públicas un inocultable malestar por nuestro interés en tomar conocimiento de los actos de gobierno, que impactan directamente en la estabilidad financiera y deportiva de Unión.
No somos un organismo de fiscalización, ni tomamos atribuciones ajenas a nuestra condición de socios profundamente comprometidos con nuestro querido club. Y como tales tenemos el legítimo derecho de conocer, en detalle, ese tipo de operaciones. La decisión de la CD, de no responder, hace que esas negociaciones queden envueltas en una nebulosa de dudas y confusiones perjudicial para cualquier institución que, como sus estatutos los indican, pertenece a los socios.
El 22 de enero del corriente año, la cuenta oficial de twitter del Club Atlético Unión (@clubaunion) anunció que el club Seattle Sander FC ejecutaría la cláusula de salida de Yeimar Pastor Gómez Andrade, lo cual no es cierto: la cláusula de salida sólo puede ejecutarla el jugador. El presidente dijo que se trató de “un error de comunicación”.
La salida del defensor fue presentada de esa manera para alivianar la responsabilidad de la comisión directiva en su salida, en un momento en el que, en apenas 48 horas, Unión había perdido a tres jugadores titulares, a días del reinicio de la Superliga. Lo real es que a Gómez Andrade se lo vendió, y por un monto sustancialmente inferior al estipulado en la famosa “cláusula de rescisión”, lo que significó un perjuicio patrimonial para la institución. En síntesis: creemos que Sphan mintió y se perdió mucha plata. Esa es la verdadera razón por la que no se nos brinda la información solicitada.
No somos un organismo de fiscalización, ni tomamos atribuciones ajenas a nuestra condición de socios profundamente comprometidos con nuestro querido club. Y como tales tenemos el legítimo derecho de conocer, en detalle, ese tipo de operaciones. La decisión de la CD, de no responder, hace que esas negociaciones queden envueltas en una nebulosa de dudas y confusiones perjudicial para cualquier institución que, como sus estatutos los indican, pertenece a los socios.
El 22 de enero del corriente año, la cuenta oficial de twitter del Club Atlético Unión (@clubaunion) anunció que el club Seattle Sander FC ejecutaría la cláusula de salida de Yeimar Pastor Gómez Andrade, lo cual no es cierto: la cláusula de salida sólo puede ejecutarla el jugador. El presidente dijo que se trató de “un error de comunicación”.
La salida del defensor fue presentada de esa manera para alivianar la responsabilidad de la comisión directiva en su salida, en un momento en el que, en apenas 48 horas, Unión había perdido a tres jugadores titulares, a días del reinicio de la Superliga. Lo real es que a Gómez Andrade se lo vendió, y por un monto sustancialmente inferior al estipulado en la famosa “cláusula de rescisión”, lo que significó un perjuicio patrimonial para la institución. En síntesis: creemos que Sphan mintió y se perdió mucha plata. Esa es la verdadera razón por la que no se nos brinda la información solicitada.