Francisco: "El catequismo no es como enseñar fórmulas de matemática"
Viernes 17 de
Septiembre 2021
El papa Francisco afirmó hoy que la catequesis "no es una comunicación abstracta de conocimientos teóricos que memorizar como si fueran fórmulas de matemáticas o química".
El pontífice habló ante catequistas europeos que participaron en un evento del Pontificio Consejo para la Nueva Evangelización. Allí dijo que los catequistas sobre todo deben "encontrar a los hermanos donde viven y operan, porque ellos mismos han encontrado a Cristo, que los ha llamado a ser discípulos misioneros".
"Debemos insistir para indicar el corazón de la catequesis: Jesucristo resucitado te ama y no te abandona nunca. Este primer anuncio nunca puede hallarnos cansados ni repetitivos en las varias fases del camino catequístico", subrayó.
"Por eso instituí el ministerio de catequista. Estamos preparando el ritual para la creación de los catequistas", anunció Francisco.
En otro tramo de su discurso, confió recuerdos personales: "Recuerdo con amor a las dos catequistas que me prepararon para la Primera Comunión y seguí la relación con ellas", incluso tras convertirse en sacerdote y luego en obispo.
"Hay un vínculo muy importante con los catequistas", agregó, refiriendo que acompañó con su presencia a la hermana catequista en el momento de su muerte.
Los grandes santos evangelizadores "fueron creativos, con la creatividad del Espíritu Santo. Abrieron nuevos caminos, inventaron nuevos lenguajes, nuevos 'alfabetos' para transmitir el Evangelio, para la inculturación de la fe. Esto pide saber escuchar a la gente, a los pueblos a los que se anuncia: escuchar su cultura, su historia, escuchar no superficialmente, pensando ya en respuestas prefabricadas que tenemos en la valijita".
"Se trata de escuchar de verdad, de confrontar aquellas culturas, aquellos lenguajes, también y sobre todo lo no dicho, lo no expresado, con la palabra de Dios, con Jesucristo viviente", observó Francisco.
"Tengo miedo -subrayó el papa- de los catequistas con el corazón, la actitud, la cara prefabricada. El catequista o es libre o no es catequista", concluyó, subrayando que deben tener "una gran creatividad".
Hablando de la Iglesia en Europa, Francisco también observó que "la gran tradición cristiana del continente no debe convertirse en una pieza histórica, en caso contrario no es más tradición. La tradición o es viva, o no es".
"Y la catequesis es tradición, pero viva, de corazón a corazón, de mente a mente, de vida a vida. Por lo tanto: apasionados y creativos, con el empuje del Espíritu Santo", concluyó el papa.
"Debemos insistir para indicar el corazón de la catequesis: Jesucristo resucitado te ama y no te abandona nunca. Este primer anuncio nunca puede hallarnos cansados ni repetitivos en las varias fases del camino catequístico", subrayó.
"Por eso instituí el ministerio de catequista. Estamos preparando el ritual para la creación de los catequistas", anunció Francisco.
En otro tramo de su discurso, confió recuerdos personales: "Recuerdo con amor a las dos catequistas que me prepararon para la Primera Comunión y seguí la relación con ellas", incluso tras convertirse en sacerdote y luego en obispo.
"Hay un vínculo muy importante con los catequistas", agregó, refiriendo que acompañó con su presencia a la hermana catequista en el momento de su muerte.
Los grandes santos evangelizadores "fueron creativos, con la creatividad del Espíritu Santo. Abrieron nuevos caminos, inventaron nuevos lenguajes, nuevos 'alfabetos' para transmitir el Evangelio, para la inculturación de la fe. Esto pide saber escuchar a la gente, a los pueblos a los que se anuncia: escuchar su cultura, su historia, escuchar no superficialmente, pensando ya en respuestas prefabricadas que tenemos en la valijita".
"Se trata de escuchar de verdad, de confrontar aquellas culturas, aquellos lenguajes, también y sobre todo lo no dicho, lo no expresado, con la palabra de Dios, con Jesucristo viviente", observó Francisco.
"Tengo miedo -subrayó el papa- de los catequistas con el corazón, la actitud, la cara prefabricada. El catequista o es libre o no es catequista", concluyó, subrayando que deben tener "una gran creatividad".
Hablando de la Iglesia en Europa, Francisco también observó que "la gran tradición cristiana del continente no debe convertirse en una pieza histórica, en caso contrario no es más tradición. La tradición o es viva, o no es".
"Y la catequesis es tradición, pero viva, de corazón a corazón, de mente a mente, de vida a vida. Por lo tanto: apasionados y creativos, con el empuje del Espíritu Santo", concluyó el papa.
Con información de
Ámbito