Brasil: Otra vez el insuperable Jair Bolsonaro se supera
Lunes 08 de
Noviembre 2021
Cada vez más queda comprobado que en términos de estupidez, actitudes que oscilan entre lo patético y lo bizarro, generosas muestras de inepcia e irresponsabilidad criminal, solo existe una persona capaz de superar al ultraderechista presidente Jair Bolsonaro: Jair Bolsonaro.
Hace un tiempito, admitió que jamás leyó a Kafta, pero que sentía que lo amenazaba una situación kaftiana. Ahora, en su viaje a Italia, dijo que le encantó haber estado en la Torre de Pizza.
Pero a veces su estupidez provoca situaciones graves. Es lo que ocurrió en los últimos tres días.
Por una ley de 1993, el presidente en ejercicio recibe todas las condecoraciones que son otorgadas, las que él mismo entrega y las demás.
Autocondecorado
El pasado miércoles fue divulgada la lista de los que recibirán la condecoración del Orden Nacional al Mérito Científico.
Quedaba subentendido que, por ley, la condecoración también le tocaría a Bolsonaro. Pero el decreto presidencial nombraba, por primera vez en dieciocho años, al mismo otorgante.
Ninguno de sus cinco antecesores cometió semejante estupidez.
Los nombres de los galardonados son seleccionados por organizaciones científicas y de investigación. La lista es sometida a los ministerios de Relaciones Exteriores, Educación y Ciencia y Tecnología, que la aprueban por mera formalidad. Algunas veces incluyen otros nombres, como ocurrió ahora, cuando fueron incluidos funcionarios del gobierno y militares retirados. Al presidente le toca exclusivamente aprobarlos y firmar el correspondiente decreto.
Exclusión
Así fue ahora, pero a los dos días el mismo Diario Oficial publicaba otro decreto presidencial determinando la exclusión de dos de los galardonados, el doctor Marcus Vinicius de Lacerda y la doctora Adele Benzaken.
Lacerda fue de los pioneros, y no solo en Brasil, en determinar que el medicamento cloroquina no tiene ninguna eficacia contra Covid-19 y puede provocar efectos colaterales serios. Bolsonaro es un ardoroso defensor del “tratamiento precoz”, con la incisiva recomendación de cloroquina.
La doctora Benzaken fue directora del Departamento de SIDA del ministerio de Salud. La alejaron ya bajo la presidencia de Bolsonaro. La razón de su cese abrupto: una cartilla destinada a prestar orientaciones a transexuales. Bolsonaro es enemigo acérrimo de lo que no sea el macho muy macho y la hembra muy hembra.
Y si nunca antes un presidente se había autonombrado para recibir la condecoración, nunca antes nombres elegidos por las organizaciones científicas habían sido excluidos por el gobierno.
Renuncias
Resultado: los otros 21 médicos y científicos nombrados para la máxima distinción del sector la rechazaron.
La carta abierta firmada por los renunciantes contiene críticas especialmente duras hacia Bolsonaro. Denuncia las actitudes puramente negacionistas del ultraderechista frente a la pandemia, las mentiras y manipulaciones relacionadas a sus efectos, dejando claro, aunque sin mención específica, la demora en adquirir inmunizantes, el desmanejo de los tests y pruebas destinadas a detectar casos de Covid-19 (ahora mismo otro millón y doscientos mil tests van a parar no a puestos de salud, sino a la basura, porque las autoridades dejaron vencer el plazo de vida útil), además de la persecución padecida por médicos e investigadores de parte del gobierno.
Recortes
Otro punto especialmente contundente de la carta de renuncia de los galardonados es tá relacionado a los brutales recortes del presupuesto nacional destinado a ciencia y tecnología.
En este 2021, de las partidas del presupuesto del ministerio de Ciencia y Tecnología solo el 38 por ciento fueron liberadas. Y para el año que viene se determinó, por parte del gobierno, un recorte de 53 por ciento de lo que fue propuesto originalmente.
En uno de los tramos más duros de la carta de renuncia, dicen los firmantes: “nuestros nombres fueron honrosamente indicados por esa comisión”, para luego afirmar que sin embargo “el homenaje ofrecido por un gobierno que no solo ignora la ciencia, sino que también boicotea activamente las recomendaciones de la epidemiologia y de la salud colectiva no es coherente con nuestras trayectorias científicas.”
Ética
Y sigue: “En solidaridad con los colegas que fueron sumariamente excluidos de la lista de galardonados, y de acuerdo con nuestra postura ética, renunciamos colectivamente a tal distinción”.
Como quien dice: tratándose de quien se trata, el mejor homenaje es ser excluido de cualquier homenaje.
Pero a veces su estupidez provoca situaciones graves. Es lo que ocurrió en los últimos tres días.
Por una ley de 1993, el presidente en ejercicio recibe todas las condecoraciones que son otorgadas, las que él mismo entrega y las demás.
Autocondecorado
El pasado miércoles fue divulgada la lista de los que recibirán la condecoración del Orden Nacional al Mérito Científico.
Quedaba subentendido que, por ley, la condecoración también le tocaría a Bolsonaro. Pero el decreto presidencial nombraba, por primera vez en dieciocho años, al mismo otorgante.
Ninguno de sus cinco antecesores cometió semejante estupidez.
Los nombres de los galardonados son seleccionados por organizaciones científicas y de investigación. La lista es sometida a los ministerios de Relaciones Exteriores, Educación y Ciencia y Tecnología, que la aprueban por mera formalidad. Algunas veces incluyen otros nombres, como ocurrió ahora, cuando fueron incluidos funcionarios del gobierno y militares retirados. Al presidente le toca exclusivamente aprobarlos y firmar el correspondiente decreto.
Exclusión
Así fue ahora, pero a los dos días el mismo Diario Oficial publicaba otro decreto presidencial determinando la exclusión de dos de los galardonados, el doctor Marcus Vinicius de Lacerda y la doctora Adele Benzaken.
Lacerda fue de los pioneros, y no solo en Brasil, en determinar que el medicamento cloroquina no tiene ninguna eficacia contra Covid-19 y puede provocar efectos colaterales serios. Bolsonaro es un ardoroso defensor del “tratamiento precoz”, con la incisiva recomendación de cloroquina.
La doctora Benzaken fue directora del Departamento de SIDA del ministerio de Salud. La alejaron ya bajo la presidencia de Bolsonaro. La razón de su cese abrupto: una cartilla destinada a prestar orientaciones a transexuales. Bolsonaro es enemigo acérrimo de lo que no sea el macho muy macho y la hembra muy hembra.
Y si nunca antes un presidente se había autonombrado para recibir la condecoración, nunca antes nombres elegidos por las organizaciones científicas habían sido excluidos por el gobierno.
Renuncias
Resultado: los otros 21 médicos y científicos nombrados para la máxima distinción del sector la rechazaron.
La carta abierta firmada por los renunciantes contiene críticas especialmente duras hacia Bolsonaro. Denuncia las actitudes puramente negacionistas del ultraderechista frente a la pandemia, las mentiras y manipulaciones relacionadas a sus efectos, dejando claro, aunque sin mención específica, la demora en adquirir inmunizantes, el desmanejo de los tests y pruebas destinadas a detectar casos de Covid-19 (ahora mismo otro millón y doscientos mil tests van a parar no a puestos de salud, sino a la basura, porque las autoridades dejaron vencer el plazo de vida útil), además de la persecución padecida por médicos e investigadores de parte del gobierno.
Recortes
Otro punto especialmente contundente de la carta de renuncia de los galardonados es tá relacionado a los brutales recortes del presupuesto nacional destinado a ciencia y tecnología.
En este 2021, de las partidas del presupuesto del ministerio de Ciencia y Tecnología solo el 38 por ciento fueron liberadas. Y para el año que viene se determinó, por parte del gobierno, un recorte de 53 por ciento de lo que fue propuesto originalmente.
En uno de los tramos más duros de la carta de renuncia, dicen los firmantes: “nuestros nombres fueron honrosamente indicados por esa comisión”, para luego afirmar que sin embargo “el homenaje ofrecido por un gobierno que no solo ignora la ciencia, sino que también boicotea activamente las recomendaciones de la epidemiologia y de la salud colectiva no es coherente con nuestras trayectorias científicas.”
Ética
Y sigue: “En solidaridad con los colegas que fueron sumariamente excluidos de la lista de galardonados, y de acuerdo con nuestra postura ética, renunciamos colectivamente a tal distinción”.
Como quien dice: tratándose de quien se trata, el mejor homenaje es ser excluido de cualquier homenaje.
Con información de
Página12
