LA BOMBA DEL ZAR, EL ARMA NUCLEAR CON LA QUE LOS RUSOS AMENAZARON AL MUNDO EN 1961
Sábado 05 de
Marzo 2022
LA FUERZA DE LA BOMBA DEL ZAR ERA MÁS GRANDE QUE LA DE HIROSHIMA Y NAGASAKI JUNTAS, Y AÚN ASÍ NO ERA TAN POTENTE COMO PODRÍA HABER SIDO.
La idea era simple: fabricar una bomba nuclear con miras a situar a la Unión Soviética por delante de los Estados Unidos en la carrera armamentista nuclear.
El objetivo era asustar al resto del mundo para que se sometiera, para que temieran el poder de la Unión Soviética. Pero la realidad de la Bomba del Zar fue mucho más devastadora de lo que nadie imaginaba.
La Bomba del Zar, bomba Emperador o El Emperador de las bombas (en ruso: Царь-бомба, Tsar Bomba) tenía más de 7 metros de largo y pesaba casi 30 toneladas. Tenía una forma similar a las bombas ‘Little Boy‘ y ‘Fat Man‘ que los Estados Unidos habían usado para devastar Hiroshima y Nagasaki quince años antes, pero hasta ahí llegaban las similitudes.
Era demasiado grande para caber incluso dentro del avión soviético más grande y tendría que montarse especialmente en uno para llevarlo a su lugar de lanzamiento.
El Tupolev Tu-95, un gran avión militar diseñado para transportar explosivos, fue el bombardero seleccionado para llevar la Bomba del Zar a su destino: el archipiélago escasamente poblado de Nueva Zembla, en el Mar de Barents, al norte de Escandinavia y al noroeste de la Unión Soviética.
Un bombardero Tu-16 modificado volaría al lado del Tupolev, listo para monitorear muestras de aire y filmar la explosión. Para dar a los aviones la oportunidad de sobrevivir, la Bomba del Zar se lanzaría desde un paracaídas, que descendería hasta una altura predeterminada antes de detonar.
El objetivo era asustar al resto del mundo para que se sometiera, para que temieran el poder de la Unión Soviética. Pero la realidad de la Bomba del Zar fue mucho más devastadora de lo que nadie imaginaba.
La Bomba del Zar, bomba Emperador o El Emperador de las bombas (en ruso: Царь-бомба, Tsar Bomba) tenía más de 7 metros de largo y pesaba casi 30 toneladas. Tenía una forma similar a las bombas ‘Little Boy‘ y ‘Fat Man‘ que los Estados Unidos habían usado para devastar Hiroshima y Nagasaki quince años antes, pero hasta ahí llegaban las similitudes.
Era demasiado grande para caber incluso dentro del avión soviético más grande y tendría que montarse especialmente en uno para llevarlo a su lugar de lanzamiento.
El Tupolev Tu-95, un gran avión militar diseñado para transportar explosivos, fue el bombardero seleccionado para llevar la Bomba del Zar a su destino: el archipiélago escasamente poblado de Nueva Zembla, en el Mar de Barents, al norte de Escandinavia y al noroeste de la Unión Soviética.
Un bombardero Tu-16 modificado volaría al lado del Tupolev, listo para monitorear muestras de aire y filmar la explosión. Para dar a los aviones la oportunidad de sobrevivir, la Bomba del Zar se lanzaría desde un paracaídas, que descendería hasta una altura predeterminada antes de detonar.