Los científicos creen que los extraterrestres podrían contactarnos en 2029
Viernes 28 de
Abril 2023
Científicos de la Universidad de California determinan que en 2029 podría llegar a la Tierra la potencial respuesta de los extraterrestres a una señal enviada por la NASA en 2002.
Muchas personas creen que extraterrestres anteriormente ya han tenido contacto directo con el planeta Tierra. Algunos hasta tienen “pruebas” como fotos o videos que muestran el posible avistamiento de naves espaciales de otros mundos. Un estudio llevado a cabo por científicos en la Universidad de California ha puesto fecha al primer posible contacto con extraterrestres.
Seres de otro planeta podrían responder a las señales emitidas por las sondas espaciales Voyager 1 y 2 en la fecha que marcan los expertos. Los científicos autores del estudio creen que las señales emitidas por la NASA podrían haber sido recibidas por civilizaciones extraterrestres y, si hubiera habido respuesta por su parte, ésta llegaría a la Tierra a finales de esta misma década.
La fecha publicada en el estudio llamado “Publications of the Astronomical Society” sería en 2029 cuando llegaría la respuesta extraterrestre estableciéndose así el primer contacto con esta civilización, algo que supondría un cambio histórico al confirmar la existencia de vida extraterrestre, algo que si bien parece evidente, aún no se ha testado.
Por tanto, si los extraterrestres recibieron la señal enviada por la NASA en 2002 y respondieron a ella, esta llegaría en 2029 ya que las señales viajarían 7.500 millones de millas. Esto es lo que concluye el estudio dirigido por Howard Isaacson, de la Universidad de California.
El astrónomo y coautor de la Universidad de California, Howard Isaacson, explicó que la idea de enviar esta onda de radio surgió al ver una famosa película estrenada en la década de los 90. "Esta es una idea famosa de Carl Sagan, quien la usó como tema de trama en la película Contact".
La sonda enviada desde el Planeta Tierra, cuenta con hasta 5 ondas de radio diferentes, Voyager 1, Voyager 2, Pioneer 10, Pioneer 11 y New Horizons; y se espera que viaje por varios siglos en el espacio para encontrar centenares de estrellas a millones de años luz de la vida láctea.
"Estas naves espaciales se han comunicado con las antenas de radio de la Red de Estaciones Profundas (DSN) para descargar datos científicos y datos de telemetría. Las transmisiones hacia el exterior desde la DSN viajan con la nave espacial y se encuentran más allá al espacio interestelar. Estas transmisiones han encontrado y encontrarán otras estrellas, arrojándonos la posibilidad de que la vida inteligente en otros sistemas solares se encuentre con nuestras transmisiones terrestres", explica un resumen del estudio.
"Calculamos las fechas de estos encuentros para determinar la hora y el lugar para albergar posible vida extraterrestre inteligente, así como su posibilidad para encontrar las transmisiones terrestres", remarcan. Eso sí, algunos escépticos piensan que las probabilidades de una señal de retorno son escasas o nulas, y que la hipótesis de estos expertos es muy endeble.
Sin ir más lejos, el radioastrónomo de la Universidad de California en Los Ángeles, Jean-Luc Margot, ha explicado a medios como Popular Science que "es poco probable que nuestras transmisiones, insignificantes, desemboquen con una detección de la humanidad por parte de extraterrestres", concluía, destacando que es poco probable que haya civilizaciones en nuestra burbuja en la Vía Láctea.
Seres de otro planeta podrían responder a las señales emitidas por las sondas espaciales Voyager 1 y 2 en la fecha que marcan los expertos. Los científicos autores del estudio creen que las señales emitidas por la NASA podrían haber sido recibidas por civilizaciones extraterrestres y, si hubiera habido respuesta por su parte, ésta llegaría a la Tierra a finales de esta misma década.
La fecha publicada en el estudio llamado “Publications of the Astronomical Society” sería en 2029 cuando llegaría la respuesta extraterrestre estableciéndose así el primer contacto con esta civilización, algo que supondría un cambio histórico al confirmar la existencia de vida extraterrestre, algo que si bien parece evidente, aún no se ha testado.
Por tanto, si los extraterrestres recibieron la señal enviada por la NASA en 2002 y respondieron a ella, esta llegaría en 2029 ya que las señales viajarían 7.500 millones de millas. Esto es lo que concluye el estudio dirigido por Howard Isaacson, de la Universidad de California.
El astrónomo y coautor de la Universidad de California, Howard Isaacson, explicó que la idea de enviar esta onda de radio surgió al ver una famosa película estrenada en la década de los 90. "Esta es una idea famosa de Carl Sagan, quien la usó como tema de trama en la película Contact".
La sonda enviada desde el Planeta Tierra, cuenta con hasta 5 ondas de radio diferentes, Voyager 1, Voyager 2, Pioneer 10, Pioneer 11 y New Horizons; y se espera que viaje por varios siglos en el espacio para encontrar centenares de estrellas a millones de años luz de la vida láctea.
"Estas naves espaciales se han comunicado con las antenas de radio de la Red de Estaciones Profundas (DSN) para descargar datos científicos y datos de telemetría. Las transmisiones hacia el exterior desde la DSN viajan con la nave espacial y se encuentran más allá al espacio interestelar. Estas transmisiones han encontrado y encontrarán otras estrellas, arrojándonos la posibilidad de que la vida inteligente en otros sistemas solares se encuentre con nuestras transmisiones terrestres", explica un resumen del estudio.
"Calculamos las fechas de estos encuentros para determinar la hora y el lugar para albergar posible vida extraterrestre inteligente, así como su posibilidad para encontrar las transmisiones terrestres", remarcan. Eso sí, algunos escépticos piensan que las probabilidades de una señal de retorno son escasas o nulas, y que la hipótesis de estos expertos es muy endeble.
Sin ir más lejos, el radioastrónomo de la Universidad de California en Los Ángeles, Jean-Luc Margot, ha explicado a medios como Popular Science que "es poco probable que nuestras transmisiones, insignificantes, desemboquen con una detección de la humanidad por parte de extraterrestres", concluía, destacando que es poco probable que haya civilizaciones en nuestra burbuja en la Vía Láctea.
