25 DE ABRIL 2024
Rodolfo Santangelo explicó cuáles son las dos principales variables que dejará el Gobierno como “pesada herencia”
Lunes 31 de
Julio 2023
El economista detalló que las últimas tres gestiones hicieron “más o menos lo mismo” y provocaron las reservas negativas del Banco Central y el alto nivel de inflación
El economista Rodolfo Santangelo explicó cuáles son para él las dos principales variables que dejará el gobierno de Alberto Fernández como “pesada herencia” para la siguiente administración y advirtió sobre las dificultades que atravesará el país en los primeros meses de la nueva gestión. Sin embargo, dijo que los últimos tres presidentes hicieron lo mismo “endeudando el país y agotando las reservas”, pero aseguró: “Hay luz al final del camino”.
“La patria es la patria, lo que pasa que cuando se cuentan medias verdades nos complicamos. Estamos ante la tercera administración consecutiva que hace lo mismo”, analizó Santangelo en diálogo con José Del Rio en el programa Comunidad de Negocios de LN+. “La segunda de Cristina Kirchner se patinó las reservas. Teníamos US$40.000 millones y entregó el poder con negativas. Además se estatizó y se gastó los fondos de las Afjps”.
“El de Mauricio Macri cometió el endeudamiento con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que dejó esta pesada herencia. Y este gobierno hizo lo mismo porque se endeudó con los chinos y con los proveedores de importaciones, además de tener reservas negativas”.
En ese sentido, diagnosticó: “Cuando sumamos el swap, que no es más swap sino deuda con los chinos, salvataje de los chinos, la deuda con los proveedores, más la caída de reservas, pega en el palo para sumar los US$40.000 millones de Macri... Los tres hicieron más o menos lo mismo ante el desplante de su economía”.
Tras ello, se enfocó en dos mediciones. “La tasa de inflación instalada en tres dígitos y las reservas en territorio negativo, con el salvataje, son las dos variables que reflejan los grandes desequilibrios macroeconómicos, tanto en el sector externo y como en el interno”.
Así, profundizó en sus dichos y explicó: “El embudo que tenemos en el fisco y en el Banco Central desemboca en una tasa de inflación, mientras que el embudo en la balanza comercial del sector externo desemboca en las reservas negativas”.
Después reflexionó sobre el mal desempeño y la mala organización del Gobierno cuando hubo récord de exportaciones. “Veníamos mal y nos golpeó la sequía, que fue un golpe mortal. Pero el Fondo puede decir que si el año pasado que tuvimos récord de importaciones, vivimos de fiesta, gastamos, no bajamos el agujero fiscal y no acumulamos reservas, cómo querés que te perdone este año que tenés sequía... Si ese año [por el 2022] hubiéramos hecho los deberes como corresponde, este año hubiéramos tenido una ayuda o un perdón”.
“Más allá del Fondo, que es el mensajero, es la realidad la que se impone, son los argentinos los que dicen que no quieren tener pesos”, consideró y agregó: “El nivel de actividad todavía se la banca, pero la tasa de inflación y la reserva negativa son los dos puntos de partida de herencia que le va a dejar este Gobierno al próximo”.
Acto seguido, se refirió a la incertidumbre generada por las elecciones y cómo repercute en el ámbito económico. ”La política complica porque se mezcla la situación económica con la incertidumbre política de las primarias de agosto y el cambio recién en diciembre, cuatro meses que son una eternidad”.
“Falta mucho y la Argentina va a tener que aprender que los gobiernos cuando empiezan tienen que poner toda la carne en el asador... Hacer las cosas que son costosas y dolorosas, aunque compliquen. Sembrar para cosechar después”, analizó.
Por último, dejó una clara advertencia sobre las complicaciones y dificultades que se atravesarán en los primeros meses y años del nuevo gobierno. “Hay que contarle a la población que va a ser duro y difícil, pero que hay luz al final del túnel... Lo que se necesita primero es ver la decisión de la sociedad, la elección del presidente y la formación de un gabinete homogéneo, no con 20 que no conoce nadie, sino de capacidad.
Además, se requiere de “una política económica consistente y ordenada, manejada como un director de orquesta; después de eso, si se instrumentó el programa económico integral, que tenga en cuenta el equilibrio general, después de un periodo inicial complicado, no tengo duda que hay luz al final del túnel”.
“La patria es la patria, lo que pasa que cuando se cuentan medias verdades nos complicamos. Estamos ante la tercera administración consecutiva que hace lo mismo”, analizó Santangelo en diálogo con José Del Rio en el programa Comunidad de Negocios de LN+. “La segunda de Cristina Kirchner se patinó las reservas. Teníamos US$40.000 millones y entregó el poder con negativas. Además se estatizó y se gastó los fondos de las Afjps”.
“El de Mauricio Macri cometió el endeudamiento con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que dejó esta pesada herencia. Y este gobierno hizo lo mismo porque se endeudó con los chinos y con los proveedores de importaciones, además de tener reservas negativas”.
En ese sentido, diagnosticó: “Cuando sumamos el swap, que no es más swap sino deuda con los chinos, salvataje de los chinos, la deuda con los proveedores, más la caída de reservas, pega en el palo para sumar los US$40.000 millones de Macri... Los tres hicieron más o menos lo mismo ante el desplante de su economía”.
Tras ello, se enfocó en dos mediciones. “La tasa de inflación instalada en tres dígitos y las reservas en territorio negativo, con el salvataje, son las dos variables que reflejan los grandes desequilibrios macroeconómicos, tanto en el sector externo y como en el interno”.
Así, profundizó en sus dichos y explicó: “El embudo que tenemos en el fisco y en el Banco Central desemboca en una tasa de inflación, mientras que el embudo en la balanza comercial del sector externo desemboca en las reservas negativas”.
Después reflexionó sobre el mal desempeño y la mala organización del Gobierno cuando hubo récord de exportaciones. “Veníamos mal y nos golpeó la sequía, que fue un golpe mortal. Pero el Fondo puede decir que si el año pasado que tuvimos récord de importaciones, vivimos de fiesta, gastamos, no bajamos el agujero fiscal y no acumulamos reservas, cómo querés que te perdone este año que tenés sequía... Si ese año [por el 2022] hubiéramos hecho los deberes como corresponde, este año hubiéramos tenido una ayuda o un perdón”.
“Más allá del Fondo, que es el mensajero, es la realidad la que se impone, son los argentinos los que dicen que no quieren tener pesos”, consideró y agregó: “El nivel de actividad todavía se la banca, pero la tasa de inflación y la reserva negativa son los dos puntos de partida de herencia que le va a dejar este Gobierno al próximo”.
Acto seguido, se refirió a la incertidumbre generada por las elecciones y cómo repercute en el ámbito económico. ”La política complica porque se mezcla la situación económica con la incertidumbre política de las primarias de agosto y el cambio recién en diciembre, cuatro meses que son una eternidad”.
“Falta mucho y la Argentina va a tener que aprender que los gobiernos cuando empiezan tienen que poner toda la carne en el asador... Hacer las cosas que son costosas y dolorosas, aunque compliquen. Sembrar para cosechar después”, analizó.
Por último, dejó una clara advertencia sobre las complicaciones y dificultades que se atravesarán en los primeros meses y años del nuevo gobierno. “Hay que contarle a la población que va a ser duro y difícil, pero que hay luz al final del túnel... Lo que se necesita primero es ver la decisión de la sociedad, la elección del presidente y la formación de un gabinete homogéneo, no con 20 que no conoce nadie, sino de capacidad.
Además, se requiere de “una política económica consistente y ordenada, manejada como un director de orquesta; después de eso, si se instrumentó el programa económico integral, que tenga en cuenta el equilibrio general, después de un periodo inicial complicado, no tengo duda que hay luz al final del túnel”.
Con información de
La Nación
