La Cámpora, en silencio ante la caída de uno de sus referentes comunicacionales
Martes 07 de
Noviembre 2023
Fabián “Conu” Rodríguez, cercano a Cristina y a Máximo Kirchner, siempre estuvo entre los principales voceros de la organización kirchnerista; trabajó en el área de Prensa de Kicillof y con Castagneto en la AFIP
La Cámpora tiene como línea de conducta casi inquebrantable un fuerte hermetismo en materia de comunicación, una tendencia que usualmente no se altera y que se mantiene más vigente aún ante la caída de uno de sus máximos responsables en materia de prensa, Fabián “Conu” Rodríguez, involucrado en una trama de presunto espionaje ilegal.
En la organización que lidera Máximo Kirchner las respuestas escasean por estas horas y solo se profundiza el silencio. Rodríguez, investigado por encargar tareas de espionaje a un expolicía detenido al que también financiaría con fondos públicos, tuvo bajo su control la agencia de noticias Télam cuando Cristina Kirchner era presidenta, fue uno de los protagonistas de la comunicación del gobierno bonaerense de Axel Kicillof y se corrió de ese lugar para dedicarse a la difusión de la información oficial de la AFIP, aunque sin abandonar el protagonismo en los temas comunicacionales del camporismo.
Las fuentes camporistas están en silencio. Las pocas voces que orbitan cerca de la organización kirchnerista que, en estricta reserva, sueltan alguna impresión sobre el caso indican que el caso “afecta mucho la comunicación” del grupo, una preocupación central para sus referentes, cuidadosos al extremo en esos temas.
Rodríguez es una figura central del organigrama camporista en la pata comunicacional. Muy cercano a Cristina Kirchner y a Máximo Kirchner, también extendió su influencia más allá de las fronteras de “la orga”, como se conoce a La Cámpora entre sus militantes. Así, con Kicillof en el poder de la provincia de Buenos Aires, fue uno de los responsables de su comunicación en la primera mitad del mandato. El gobernador no pertenece a La Cámpora y tiene una relación con Máximo Kirchner que registra algunos vaivenes, pero reporta directamente a la expresidenta.
El dirigente camporista investigado era uno de los principales encargados de la difusión de los comunicados oficiales del gobierno de Kicillof, pero, a mediados de 2022, cambió su función para abocarse al trabajo en el área de prensa de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), cuando Carlos Castagneto se hizo cargo de la agencia de recaudación en reemplazo de Mercedes Marcó del Pont.
Más allá de sus funciones en el gobierno de Kicillof o en la AFIP, Rodríguez mantuvo siempre su centralidad en temas específicos de La Cámpora. Siempre al tanto de todas las disputas de poder que protagonizaba la organización en territorios del conurbano y fuera de él, su radio de acción central es la provincia de Buenos Aires, donde conoce cada candidato y referente de la organización.
La cercanía con Cristina Kirchner lo llevó a un puesto de máxima responsabilidad en la agencia oficial Télam durante el kirchnerismo, con un estricto control de los cables informativos que son el principal insumo periodístico que produce la agencia. Fue presidente de Télam Sociedad del Estado por solo medio año, en 2015. Había reemplazado a otro dirigente de La Cámpora, Santiago “Patucho” Álvarez.
El apodo “Conu” que acompaña a Rodríguez es una apelación al conurbano bonaerense, territorio que es objeto de un particular interés del vocero camporista investigado por sus vínculos con el policía detenido Ariel Zanchetta en una causa a cargo del juez Marcelo Martínez de Giorgi. Expuso ese interés territorial en un su blog llamado “Conurbanos”.
En la causa judicial consta que un objetivo que Zanchetta habría trabajado para Rodríguez fue la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz, sobre la que envió informes. Según la investigación, el sitio Enclave, que manejaba Zanchetta, se financiaba con pauta publicitaria del gobierno bonaerense.
Oriundo de Villa Dominico, en Avellaneda, Rodríguez se inició en la política en un centro cultural que lo llevó a conocer al padre Luis Farinello, sacerdote también nacido en esa localidad y que centraba su trabajo social en el distrito de Quilmes. Según él mismo contó en un capítulo de “Conurbano”, un documental por entregas del Canal Encuentro, se alejó de esa estructura que trabajaba en la villa IAPI por la simpatía que sus compañeros mostraban por la Alianza, una tendencia que él no compartía.
“Siempre era el que escribía los comunicados y hacía la revista”, contó Rodríguez en ese documental cuando comentó sus inicios en la comunicación. Es profesor en Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales, carrera que estudió en el Instituto Superior del Profesorado Joaquín V. González.
En la organización que lidera Máximo Kirchner las respuestas escasean por estas horas y solo se profundiza el silencio. Rodríguez, investigado por encargar tareas de espionaje a un expolicía detenido al que también financiaría con fondos públicos, tuvo bajo su control la agencia de noticias Télam cuando Cristina Kirchner era presidenta, fue uno de los protagonistas de la comunicación del gobierno bonaerense de Axel Kicillof y se corrió de ese lugar para dedicarse a la difusión de la información oficial de la AFIP, aunque sin abandonar el protagonismo en los temas comunicacionales del camporismo.
Las fuentes camporistas están en silencio. Las pocas voces que orbitan cerca de la organización kirchnerista que, en estricta reserva, sueltan alguna impresión sobre el caso indican que el caso “afecta mucho la comunicación” del grupo, una preocupación central para sus referentes, cuidadosos al extremo en esos temas.
Rodríguez es una figura central del organigrama camporista en la pata comunicacional. Muy cercano a Cristina Kirchner y a Máximo Kirchner, también extendió su influencia más allá de las fronteras de “la orga”, como se conoce a La Cámpora entre sus militantes. Así, con Kicillof en el poder de la provincia de Buenos Aires, fue uno de los responsables de su comunicación en la primera mitad del mandato. El gobernador no pertenece a La Cámpora y tiene una relación con Máximo Kirchner que registra algunos vaivenes, pero reporta directamente a la expresidenta.
El dirigente camporista investigado era uno de los principales encargados de la difusión de los comunicados oficiales del gobierno de Kicillof, pero, a mediados de 2022, cambió su función para abocarse al trabajo en el área de prensa de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), cuando Carlos Castagneto se hizo cargo de la agencia de recaudación en reemplazo de Mercedes Marcó del Pont.
Más allá de sus funciones en el gobierno de Kicillof o en la AFIP, Rodríguez mantuvo siempre su centralidad en temas específicos de La Cámpora. Siempre al tanto de todas las disputas de poder que protagonizaba la organización en territorios del conurbano y fuera de él, su radio de acción central es la provincia de Buenos Aires, donde conoce cada candidato y referente de la organización.
La cercanía con Cristina Kirchner lo llevó a un puesto de máxima responsabilidad en la agencia oficial Télam durante el kirchnerismo, con un estricto control de los cables informativos que son el principal insumo periodístico que produce la agencia. Fue presidente de Télam Sociedad del Estado por solo medio año, en 2015. Había reemplazado a otro dirigente de La Cámpora, Santiago “Patucho” Álvarez.
El apodo “Conu” que acompaña a Rodríguez es una apelación al conurbano bonaerense, territorio que es objeto de un particular interés del vocero camporista investigado por sus vínculos con el policía detenido Ariel Zanchetta en una causa a cargo del juez Marcelo Martínez de Giorgi. Expuso ese interés territorial en un su blog llamado “Conurbanos”.
En la causa judicial consta que un objetivo que Zanchetta habría trabajado para Rodríguez fue la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz, sobre la que envió informes. Según la investigación, el sitio Enclave, que manejaba Zanchetta, se financiaba con pauta publicitaria del gobierno bonaerense.
Oriundo de Villa Dominico, en Avellaneda, Rodríguez se inició en la política en un centro cultural que lo llevó a conocer al padre Luis Farinello, sacerdote también nacido en esa localidad y que centraba su trabajo social en el distrito de Quilmes. Según él mismo contó en un capítulo de “Conurbano”, un documental por entregas del Canal Encuentro, se alejó de esa estructura que trabajaba en la villa IAPI por la simpatía que sus compañeros mostraban por la Alianza, una tendencia que él no compartía.
“Siempre era el que escribía los comunicados y hacía la revista”, contó Rodríguez en ese documental cuando comentó sus inicios en la comunicación. Es profesor en Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales, carrera que estudió en el Instituto Superior del Profesorado Joaquín V. González.
Con información de
La Nación
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— 𝗠𝗮𝘅𝗶 𝗥𝗼𝗺𝗲𝗿𝗼 (@MaxiRomero22) May 7, 2024
Es la “declaración jurada” individual impuesta de modo anterior a una medida colectiva (paro) lo que la censura previa a la libertad de expresión.
Fíjese Gobierno:
Si se dice “designa toda acción u omisión dirigida a dificultar o imposibilitar, en forma…
