Cambiemos no es una alternativa al Frente Progresista
“No se puede decir tan livianos de cuerpo que ya no importan las ideas o que el rechazo a ciertas políticas neoliberales son prejuicios. Nosotros venimos diciendo desde antes de Gualeguaychú y con más fuerza después, que el acuerdo con el PRO significó un retroceso grave en la identidad del radicalismo, que hoy aparece como parte de una gestión que, hasta este momento, sólo ha tomado medidas que perjudican a los pequeños empresarios, a los trabajadores y a los sectores más postergados”
Para el Diputado provincial, “CAMBIEMOS no es una alternativa al Frente Progresista. Y mucho menos se puede decir que si existe uno no existirá el otro”.
“Si de verdad están convencidos de semejante dislate, que asuman la responsabilidad de elegir en qué lugar están. Nosotros ya sabemos: en el Frente Progresista, y acompañando los intereses de la Provincia de Santa Fe, no haciendo de justificadores de las políticas de ajuste y profundización de las desigualdades”.
“Si yo pertenecería a un grupo interno del radicalismo que creería que el futuro es Cambiemos, renunciaría a los cargos en la Provincia. Porque estaríamos ocupando cargos en un gobierno en el que no creemos”.
“Lo dijimos antes de las elecciones provinciales: El Pro representa los valores que gobernaron los 90 en el país, y los hechos lo fueron confirmando. Resulta insólito que se le reclamen obras para algunas ciudades a la gestión provincial, cuando los propios dirigentes que ellos representan y reciben con honores en Santa Fe llamase Frigerio o Marcos Peña, se niegan a cumplir con sus obligaciones con la provincia”.
“Es lamentable ver radicales justificando las demoras en la ayuda por la Emergencia, el intento de vaciamiento de Sancor, o la falta de respuestas del gobierno de MACRI al cumplimiento de la sentencia por los fondos de la coparticipación, y al mismo tiempo demandando a la gestión del Frente Progresista, como si Santa Fe no necesitara esos recursos. Se callan la boca con el ajuste eléctrico nacional, con el gas; pero no pierden oportunidad de cuestionar a la gestión de Lifschitz/Fascendini”.
“Queremos una UCR del lado de los intereses de los santafesinos, peleando por sus empresas, por sus fuentes laborales, por una política tributaria más justa, y no levantando la mano a los blanqueos de la evasión de los ricos, vetando las leyes que defienden las fuentes laborales, o impidiendo el desarrollo de nuestras empresas”.
“La UCR es un partido político, y debe hacer política. No asociarse a Grupos de CEOS que creen que el estado es una empresa. Los radicales que no somos empresarios de la política ya sabemos donde estamos y donde estaremos ahora y el año que viene: en el Frente Progresista” concluyó el legislador.