ENTRE RÍOS
Una llamada anónima descubrió el camión con 605 kilos de droga
Jueves 18 de
Agosto 2016
En el juicio por el cargamento de marihuana secuestrado en Paraná se ventilaron los pormenores del operativo. Hoy, los alegatos
Una llamada anónima a las 2.45 del 26 de febrero de 2015 a la sede de la Policía Federal, en Paraná, fue la que advirtió sobre la presencia de un camión cargado con estupefacientes en calle Urquiza, antes de llegar a avenida Ramírez. El dato fue tan preciso que a las 8.40 de ese jueves, tras una sigilosa tarea de investigación durante la noche, los federales encontraron el cargamento de marihuana más grande secuestrado en Paraná: 605 kilos. Además detuvieron a cuatro personas: Luis Menelio Ayala, Miguel Ángel Ramírez, Cristian Ismael Godoy y Félix Jesús Gómez. Todos están detenidos y hoy conocerán cuánto tiempo pasarán en la cárcel, ya que las pruebas son tan contundentes que es casi imposible que logren evitar la prisión.
En la primera jornada los dos ocupantes del camión, los correntinos Godoy y Gómez declararon. Mientras que los paranaenses Ayala y Ramírez, que llegaron al lugar donde estaba estacionada la unidad con droga junto a los correntinos en un auto, se llamaron a silencio.
El fiscal federal José Candioti hizo emitir ayer los registros fílmicos que tomaron los policías federales mientras realizaban las tareas de vigilancia. En unas de las imágenes se observa a los cuatro procesados bajar de un Corsa en avenida Ramírez y saludarse amistosamente. Es más, Gómez ayer reconoció el cargamento que llevaba en el camión, en tanto que Godoy dijo que él venía a Paraná a comprar repuestos para comprar equipos viejos de acondicionadores de aire para reparar y revender en Corriente.
La droga incautada estaba dividida en 937 ladrillos. Con los 605 kilos se podían hacer aproximadamente 4.275.000 cigarrillos de marihuana.
El recorrido
Sin revelar dónde cargó la marihuana, que estaba escondida en la parte trasera del vehículo en un doble fondo, Gómez contó que bajó desde Chaco pasó por Corrientes y Entre Ríos hasta llegar a Paraná. Llegó el 25 de febrero a la capital entrerriana. Paró cerca del Mate en calle Laurencena y ahí bajó a Godoy y él siguió solo hasta Cayastá, en Santa Fe. Ahí tenía que entregar el camión, pero en la vecina provincia no apareció quien tenía que hacerse cargo del cargamento, entonces decidió volver a Paraná y dejar el transporte en calle Urquiza e irse a dormir.
Con su relato, Gómez, de 53 años, trató de desligar a los otros procesados, pero no pudo.
El 26, cuando iban a buscar el camión, fueron arrestados por los federales que ya tenían rodeado el rodado.
En el lugar además de la droga se secuestraron tres celulares, unos 10.000 pesos, tickets de peajes, una balanza y las llaves para sacar los tornillos que ajustaban la estructura trasera del camión, donde estaba oculta la droga.
Lamentablemente no se pudo conocer el destino de la droga ni tampoco detectar quién llamó, ya que la Policía Federal en Paraná no cuenta con identificador de llamadas. Entre las hipótesis surgió que la marihuana iba hacia Santa Fe, pero otros dicen que el lugar de descarga era Paraná.
Hoy a las 10 el tribunal integrado por Roberto López Arango, Lilia Carnero y Noemí Berro escucharán los alegatos de las partes.
Dos hombres reincidentes
Walter Ramírez ha estado muy poco tiempo en libertad. En 2006 fue condenado en Paraná a nueve años de cárcel por matar a un joven. En diciembre de 2014 terminó de cumplir la condena, y en febrero de 2015 volvió a la cárcel por este caso. Luis Ayala también conoce lo que es estar preso. Este misionero, dueño del Corsa, radicado en Paraná tiene una condena por narcotráfico a cuatro años y seis meses de prisión sin terminar de cumplir, ya que lo arrestaron cuando estaba purgando prisión condicional.
Con información de
unoentrerios