SANTO TOMÉ
Un niño de 9 años murió tras el incendio en una vivienda
Por:
Danilo Chiapello
Domingo 23 de
Septiembre 2018
A su vez, dos de sus hermanos permanecen internados en estado muy grave en el Hospital de Niños.
Un niño de 9 años perdió su vida como consecuencia de las graves lesiones que sufrió al incendiarse su vivienda, en un penoso hecho ocurrido la mañana de este domingo en Santo Tomé.
A su vez otros dos menores (una adolescente de 13 años y otro chiquito de 7), hermanos del fallecido, permanecen internados en condición crítica en el Hospital de Niños Orlando Alassia.
Del hecho, se tuvo noticias poco antes de las 8 cuando varios llamados telefónicos al 911 dieron cuenta de un siniestro con fuego en una vivienda ubicada en Victoria Ocampo y Richieri, esto es, en barrio Adelina de Santo Tomé.
Los primeros en arribar fueron los agentes policiales de la subcomisaría 13ª quienes al advertir la gravedad de la situación comenzaron a rescatar a la personas, trasladándolas en patrulleros.
Al momento de desatarse el incidente dentro del inmueble estaba una mujer de 42 años juntos a sus seis hijos, identificados como Betiana (23); Mariano (20); Micaela (13); Nicolás (9); Jesús (7) y Sofía (6).
Además de los nombrados en la casa se encontraba una mujer, de 63 años, que es la abuela de los chicos.
De acuerdo con las primeras versiones el principal foco ígneo se produjo dentro de unos de los dormitorios, donde varios de los más pequeños quedaron atrapados.
Uno de los que llevó la peor parte fue Nicolás (9) quien fue sacado del lugar en estado agonizante. Con urgencia se lo trasladó en ambulancia hasta el Samco de Santo Tomé donde ingresó con paro cardíaco.
Durante más de 1 hora el personal médico le realizó maniobras de reanimación y pese a los esfuerzos realizados se produjo su fallecimiento.
Poco después, también llegó al mismo centro sanitario Mariano (20), quien ingresó lúcido aunque con quemaduras en 90 por ciento del cuerpo, que motivaron su derivación al hospital Cullen.
En tanto, en situación más que delicada fueron trasladados la adolescente de 13 años y su hermanito, de 7, hasta el Hospital de Niños Orlando Alassia, donde permanecen internados en condición crítica.
Los demás involucrados resultaron con lesiones por quemaduras de distinta consideración aunque, en principio, no habría riesgo de vida para ninguno de ellos.
En el lugar, trabajaron agentes policiales, además de Bomberos y peritos quienes investigan las causas del siniestro. Hasta el momento, las versiones circulantes refieren a un hecho accidental.
Este incendio seguido de muerte sería el último capítulo de una historia de violencia familiar que comenzó hace varios años.
Así lo hicieron saber hoy numerosos vecinos entrevistados por El Litoral quienes definieron lo ocurrido como “una tragedia anunciada”.
* “Averigüen ustedes (por los periodistas) la cantidad de denuncias que se hicieron contra esa familia. Los chicos reciben castigos físicos, se escuchan gritos por golpes y llantos a toda hora. Sin embargo, nunca nadie hizo nada”, dijeron.
“Ésa es la verdadera ‘casa del terror’. Esa mujer (por la madre de los chicos) hace tiempo estuvo presa por un hecho tremendo. Pero quedó en libertad y siguió haciendo de las suyas. A veces, aparecen los visitadores sociales pero de nada sirve. Ahora es tarde... porque uno de los chiquitos murió”, agregaron.
En este sentido, El Litoral pudo saber que tanto en el Samco de Santo Tomé como en dependencias policiales obran informes que dan cuenta de episodios de violencia y abusos en la citada propiedad.
A su vez otros dos menores (una adolescente de 13 años y otro chiquito de 7), hermanos del fallecido, permanecen internados en condición crítica en el Hospital de Niños Orlando Alassia.
Del hecho, se tuvo noticias poco antes de las 8 cuando varios llamados telefónicos al 911 dieron cuenta de un siniestro con fuego en una vivienda ubicada en Victoria Ocampo y Richieri, esto es, en barrio Adelina de Santo Tomé.
Los primeros en arribar fueron los agentes policiales de la subcomisaría 13ª quienes al advertir la gravedad de la situación comenzaron a rescatar a la personas, trasladándolas en patrulleros.
Al momento de desatarse el incidente dentro del inmueble estaba una mujer de 42 años juntos a sus seis hijos, identificados como Betiana (23); Mariano (20); Micaela (13); Nicolás (9); Jesús (7) y Sofía (6).
Además de los nombrados en la casa se encontraba una mujer, de 63 años, que es la abuela de los chicos.
De acuerdo con las primeras versiones el principal foco ígneo se produjo dentro de unos de los dormitorios, donde varios de los más pequeños quedaron atrapados.
Víctima inocente
Uno de los que llevó la peor parte fue Nicolás (9) quien fue sacado del lugar en estado agonizante. Con urgencia se lo trasladó en ambulancia hasta el Samco de Santo Tomé donde ingresó con paro cardíaco.
Durante más de 1 hora el personal médico le realizó maniobras de reanimación y pese a los esfuerzos realizados se produjo su fallecimiento.
Poco después, también llegó al mismo centro sanitario Mariano (20), quien ingresó lúcido aunque con quemaduras en 90 por ciento del cuerpo, que motivaron su derivación al hospital Cullen.
En tanto, en situación más que delicada fueron trasladados la adolescente de 13 años y su hermanito, de 7, hasta el Hospital de Niños Orlando Alassia, donde permanecen internados en condición crítica.
Los demás involucrados resultaron con lesiones por quemaduras de distinta consideración aunque, en principio, no habría riesgo de vida para ninguno de ellos.
En el lugar, trabajaron agentes policiales, además de Bomberos y peritos quienes investigan las causas del siniestro. Hasta el momento, las versiones circulantes refieren a un hecho accidental.
“Una tragedia anunciada”
Este incendio seguido de muerte sería el último capítulo de una historia de violencia familiar que comenzó hace varios años.
Así lo hicieron saber hoy numerosos vecinos entrevistados por El Litoral quienes definieron lo ocurrido como “una tragedia anunciada”.
* “Averigüen ustedes (por los periodistas) la cantidad de denuncias que se hicieron contra esa familia. Los chicos reciben castigos físicos, se escuchan gritos por golpes y llantos a toda hora. Sin embargo, nunca nadie hizo nada”, dijeron.
“Ésa es la verdadera ‘casa del terror’. Esa mujer (por la madre de los chicos) hace tiempo estuvo presa por un hecho tremendo. Pero quedó en libertad y siguió haciendo de las suyas. A veces, aparecen los visitadores sociales pero de nada sirve. Ahora es tarde... porque uno de los chiquitos murió”, agregaron.
En este sentido, El Litoral pudo saber que tanto en el Samco de Santo Tomé como en dependencias policiales obran informes que dan cuenta de episodios de violencia y abusos en la citada propiedad.
Con información de
ellitoral
