SANTA FE
Intentó robar, golpeó a la comerciante y se olvidó el arma en un local de indumentaria
Miércoles 11 de
Septiembre 2019
El hecho ocurrió en el comercio Lubna, ubicado en Avenida Facundo Zuviría 6300. El delincuente golpeó en la cabeza a la comerciante antes de darse a la fuga.
Durante esta mañana, otro hecho delictivo en comercios tuvo lugar en la ciudad. Esta vez, fue el turno del local de indumentaria conocido como Lubna en inmediaciones de Av. Facundo Zuviría 6300. Un hombre se hizo pasar por un cliente, pero pronto comenzó a apuntar con un arma a la encargada para intentar robar. Tras golpear a la mujer en su cabeza mientras ella le manifestaba no poseer nada de valor, el hombre logró escaparse. Sin embargo, entre las corridas olvidó recoger el arma de fuego que quedó tirada en el suelo.
“Él se metió primero adentro, después me pidió cosas de valor y el celular. Pero yo le decía que revise, que no tenía nada y lo poco que tenía se lo iba a dar. Como yo intentaba salir por la puerta él me empezó a golpear con el arma en la cabeza para que me quedara ahí. Después de que se caigan los percheros no se cómo pero logré salir y él escapó corriendo. Cuando entré de nuevo, encontré el arma tirada en el piso y la policía después me confirmó que estaba cargada”, contó Daniela –la comerciante del local- al móvil de Aire de Santa Fe.
“Alguien lo estaba esperando así que enseguida arrancó el auto. No llegamos a ver la patente porque estaba estacionado estratégicamente detrás de otro y se escaparon hacia el sur. Es una hora muy transitada en la que suele entrar mucha gente. No te dejan trabajar, la saqué barata”, agregó la mujer.
“Él se metió primero adentro, después me pidió cosas de valor y el celular. Pero yo le decía que revise, que no tenía nada y lo poco que tenía se lo iba a dar. Como yo intentaba salir por la puerta él me empezó a golpear con el arma en la cabeza para que me quedara ahí. Después de que se caigan los percheros no se cómo pero logré salir y él escapó corriendo. Cuando entré de nuevo, encontré el arma tirada en el piso y la policía después me confirmó que estaba cargada”, contó Daniela –la comerciante del local- al móvil de Aire de Santa Fe.
“Alguien lo estaba esperando así que enseguida arrancó el auto. No llegamos a ver la patente porque estaba estacionado estratégicamente detrás de otro y se escaparon hacia el sur. Es una hora muy transitada en la que suele entrar mucha gente. No te dejan trabajar, la saqué barata”, agregó la mujer.
Con información de
Aire de Santa Fe