SANTA FE
Un delincuente armado robó dos panaderías en menos de 5 minutos
Jueves 13 de
Febrero 2020
Fue en dos locales Balear. "Sé que me están filmando pero dame la plata", dijo el ladrón.
Un delincuente que se trasladaba en moto entró este jueves a la mañana a la panadería Balear ubicada en 9 de Julio y Boulevard. A punta de pistola amenazó a la empleada y le exigió que le de la recaudación. Salió con el dinero y el celular de la mujer.
No habían pasado ni cinco minutos, según el horario de las cámaras de seguridad, cuando el mismo ladrón llegó al local de la misma cadena, en Urquiza y Suipacha, donde actuó de manera similar. Ingresó mostrando el arma, diciéndole a la encargada "sé que me están filmando pero vengo a robar".
Jésica, la empleada del segundo negocio asaltado, contó a través del móvil de LT10 que el sujeto ingresó mostrando el arma y apuntándole directamente.
Además de la plata, le pidió su teléfono celular pero la joven le dijo que no lo lleva a la panadería.
"Entró, me apuntó, me pidió la plata que tenía y celulares. Ahí me dijo que sabía que había cámaras, pero que venía a robar porque su madre estaba enferma. Salió y volvió a entrar para guardarse el arma y el dinero en las medias, debajo del pantalón".
Jésica agregó que es el tercer asalto que vive desde que comenzó a trabajar en la panadería, y sucedieron en distintos locales. También comentó que su compañera, de la primera sucursal asaltada se descompuso y tuvo que dejar su lugar de trabajo luego del robo.
No habían pasado ni cinco minutos, según el horario de las cámaras de seguridad, cuando el mismo ladrón llegó al local de la misma cadena, en Urquiza y Suipacha, donde actuó de manera similar. Ingresó mostrando el arma, diciéndole a la encargada "sé que me están filmando pero vengo a robar".
Jésica, la empleada del segundo negocio asaltado, contó a través del móvil de LT10 que el sujeto ingresó mostrando el arma y apuntándole directamente.
Además de la plata, le pidió su teléfono celular pero la joven le dijo que no lo lleva a la panadería.
"Entró, me apuntó, me pidió la plata que tenía y celulares. Ahí me dijo que sabía que había cámaras, pero que venía a robar porque su madre estaba enferma. Salió y volvió a entrar para guardarse el arma y el dinero en las medias, debajo del pantalón".
Jésica agregó que es el tercer asalto que vive desde que comenzó a trabajar en la panadería, y sucedieron en distintos locales. También comentó que su compañera, de la primera sucursal asaltada se descompuso y tuvo que dejar su lugar de trabajo luego del robo.
Con información de
LT10
