JUEVES 17 DE MAYO
SANTA FE
Por un cuadro de estrés, el propietario de la clínica Sagrada Familia no asistió a la nueva audiencia
Miércoles 11 de
Marzo 2020
Una nueva reunión en el Ministerio de Trabajo se realizó el martes y, como en todas las anteriores a excepción de una, Esteban De Giovanni no estuvo presente.
Hace más de un mes que los trabajadores del Sanatorio Sagrada Familia siguen en las instalaciones a la espera de una respuesta por parte del propietario, quien dio la orden de cerrar el edificio sin avisar previamente a los empleados de la decisión. Entre discusiones que se convirtieron en forcejeos y ocupación física de los espacios, los trabajadores lograron defender sus puestos con una medida de fuerza que los tiene en vilo. El martes se realizó la séptima audiencia en el Ministerio de Trabajo de Santa Fe y nuevamente no apareció el propietario Esteban De Giovanni.
En la reunión anterior, el propietario apareció. En cambio en esta oportunidad sólo asistió el abogado, quien presentó un certificado que establece que De Giovanni padece un cuadro de estrés. "No pudimos arribar a ningún acuerdo ya que pretendían pagar el sueldo de enero con la condición de que desalojemos las instalaciones", contó María Angélica López, de la Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina (Atsa). "Lo que sucede es que el mes de enero fue trabajado con normalidad, por eso sostenemos que no está en discusión el pago de ese sueldo", aclaró.
Por ahora, los trabajadores decidieron esperar a que la propuesta mejore y fijaron una nueva audiencia para el lunes 16 de marzo a las 9, en la cual esperan contar con la presencia del propietario.
La toma de los espacios
Tras más de 11 horas de discusiones, incertidumbre y tensión, los trabajadores tomaron el hall del Instituto Cardiológico Sagrada Familia de Santa Fe el 31 de enero por la tarde. Los incidentes comenzaron a media mañana cuando la seguridad del lugar intentó desalojar el sanatorio sin previo aviso. A las 16.30 finalizó la audiencia en el Ministerio de Trabajo en la que decidieron que el efector continúe funcionando -a pesar de que no quedan pacientes- hasta el lunes a las 11 cuando se desarrolle otra reunión entre el propietario y los representantes de los trabajadores. Pero un nuevo conflicto se desató luego de las 16.30 cuando agentes policiales se acercaron al sanatorio ubicado en calle Rivadavia 3129 para sacar a los empleados que permanecían en el interior.
Este jueves se desarrolló la sexta audiencia en el Ministerio de Trabajo de Santa Fe para solucionar la situación de los trabajadores despedidos y que resisten en las instalaciones de la clínica Sagrada Familia.
Por la tarde, dos patrulleros y dos agentes motorizados arribaron al lugar para cerrar las puertas e impedir el ingreso de los representantes del gremio que llegaban con las novedades de la reunión. Sin embargo, en el interior del lugar había alrededor de 30 trabajadores que se negaban a salir para que no vuelvan a cerrar el Instituto Cardiológico.
Finalmente, cerca de las 19.30 arribó al lugar personal de la subcomisaría y de la fiscalía. Las autoridades permitieron la permanencia de los trabajadores en el lugar hasta que el conflicto se resuelva y habilitaron el libre acceso al edificio. Si bien los trabajadores podrán utilizar las instalaciones del sanatorio, la toma se concentrará en el hall y se espera que dure todo el fin de semana. Contarán con la custodia policial durante los dos días.
La prohibición de ingreso
Durante las primeras horas de la tarde, justo al finalizar la audiencia, el personal policial intervino en la entrada del edificio del sanatorio y prohibió el ingreso de los trabajadores al lugar. De esta manera, aquellos que estaban adentro no salieron durante tres horas porque no podían volver a entrar. López dialogó con Aire de Santa Fe: "queremos comunicarles a los compañeros la decisión que se tomó en la audiencia de programar una nueva reunión para el lunes, pero los agentes policiales no nos dejan entrar", contó y agregó que "la policía tiene la llave de la puerta del sanatorio y adentro los compañeros están sin agua y aire acondicionado".
"Nos vamos a quedar acá hasta que podamos entrar", indicó López y denunció las condiciones en las que se encuentran los trabajadores en el interior del sanatorio: "los policías nos abren apenas la puerta para que les pasemos agua a nuestros compañeros y no dejaron ni siquiera entrar al personal del Ministerio de Trabajo que vino a informar de la nueva audiencia".
La subsecretaria de Atsa remarcó que los trabajadores no fueron notificados de la decisión con anterioridad y esta mañana se enteraron de forma verbal de los despidos.
En la reunión anterior, el propietario apareció. En cambio en esta oportunidad sólo asistió el abogado, quien presentó un certificado que establece que De Giovanni padece un cuadro de estrés. "No pudimos arribar a ningún acuerdo ya que pretendían pagar el sueldo de enero con la condición de que desalojemos las instalaciones", contó María Angélica López, de la Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina (Atsa). "Lo que sucede es que el mes de enero fue trabajado con normalidad, por eso sostenemos que no está en discusión el pago de ese sueldo", aclaró.
Por ahora, los trabajadores decidieron esperar a que la propuesta mejore y fijaron una nueva audiencia para el lunes 16 de marzo a las 9, en la cual esperan contar con la presencia del propietario.
La toma de los espacios
Tras más de 11 horas de discusiones, incertidumbre y tensión, los trabajadores tomaron el hall del Instituto Cardiológico Sagrada Familia de Santa Fe el 31 de enero por la tarde. Los incidentes comenzaron a media mañana cuando la seguridad del lugar intentó desalojar el sanatorio sin previo aviso. A las 16.30 finalizó la audiencia en el Ministerio de Trabajo en la que decidieron que el efector continúe funcionando -a pesar de que no quedan pacientes- hasta el lunes a las 11 cuando se desarrolle otra reunión entre el propietario y los representantes de los trabajadores. Pero un nuevo conflicto se desató luego de las 16.30 cuando agentes policiales se acercaron al sanatorio ubicado en calle Rivadavia 3129 para sacar a los empleados que permanecían en el interior.
Este jueves se desarrolló la sexta audiencia en el Ministerio de Trabajo de Santa Fe para solucionar la situación de los trabajadores despedidos y que resisten en las instalaciones de la clínica Sagrada Familia.
Por la tarde, dos patrulleros y dos agentes motorizados arribaron al lugar para cerrar las puertas e impedir el ingreso de los representantes del gremio que llegaban con las novedades de la reunión. Sin embargo, en el interior del lugar había alrededor de 30 trabajadores que se negaban a salir para que no vuelvan a cerrar el Instituto Cardiológico.
Finalmente, cerca de las 19.30 arribó al lugar personal de la subcomisaría y de la fiscalía. Las autoridades permitieron la permanencia de los trabajadores en el lugar hasta que el conflicto se resuelva y habilitaron el libre acceso al edificio. Si bien los trabajadores podrán utilizar las instalaciones del sanatorio, la toma se concentrará en el hall y se espera que dure todo el fin de semana. Contarán con la custodia policial durante los dos días.
La prohibición de ingreso
Durante las primeras horas de la tarde, justo al finalizar la audiencia, el personal policial intervino en la entrada del edificio del sanatorio y prohibió el ingreso de los trabajadores al lugar. De esta manera, aquellos que estaban adentro no salieron durante tres horas porque no podían volver a entrar. López dialogó con Aire de Santa Fe: "queremos comunicarles a los compañeros la decisión que se tomó en la audiencia de programar una nueva reunión para el lunes, pero los agentes policiales no nos dejan entrar", contó y agregó que "la policía tiene la llave de la puerta del sanatorio y adentro los compañeros están sin agua y aire acondicionado".
"Nos vamos a quedar acá hasta que podamos entrar", indicó López y denunció las condiciones en las que se encuentran los trabajadores en el interior del sanatorio: "los policías nos abren apenas la puerta para que les pasemos agua a nuestros compañeros y no dejaron ni siquiera entrar al personal del Ministerio de Trabajo que vino a informar de la nueva audiencia".
La subsecretaria de Atsa remarcó que los trabajadores no fueron notificados de la decisión con anterioridad y esta mañana se enteraron de forma verbal de los despidos.
Con información de
Aire de Santa Fe
