Rafaela: Unos pocos irresponsables ponen en riesgo el esfuerzo del resto
Por:
Juan Carlos Scalzo
Viernes 27 de
Marzo 2020
Unos pocos irresponsables ponen en riesgo el esfuerzo del resto. Personas que se movilizan por la vía pública sin causa que lo justifique, instigación a saquear supermercados y también el llamado a una concentración por los presos de Las Flores, son los irracionales sucesos que se registraron en las últimas horas.
El primer día “hábil” de esta semana (luego de lunes y martes feriados), las calles de Rafaela no se mostraban desiertas si no todo lo contrario, porque su apariencia era casi la de un día normal.
El microcentro, por ejemplo, presentaba un movimiento considerable, que se atribuyó a los cuatros días corridos de inactividad y a que los comercios, en busca de hacer caja, abrieron sus puertas a pesar de las restricciones y sanciones que rigen.
La preocupación de las autoridades fue mayúscula porque es evidente que muchos rafaelinos, aunque la inmensa mayoría es consciente de la gravedad de la situación, no han entendido suficientemente los riesgos que implica no cumplir con el distanciamiento social y los riesgo que su repudiable conducta acarrea tanto para ellos mismos como para aquellos con quienes tienen contacto.
La desazón en las fuerzas de seguridad (Policías provincial y federal, Gendarmería y la Guardia Urbana Rafaelina) también es muy grande porque nada alcanza para impedir que un grupo se vuelquen en las calles ignorando las alertas para prevenir el desastre. Tampoco sirven de lección las decenas y decenas de aprehensiones que a diario se registran y sus derivaciones penales y económicas. Lo peor de todo es que muchos de los afectados a los operativos empiezan a sentir, y lo señalan, que si no se revierte este comportamiento los controles se verán desbordados, justo cuando el brote entra en su etapa más agresiva.
Las medidas restrictivas adoptadas por el Gobierno municipal, para que se respete el aislamiento obligatorio, se fueron profundizando e intensificando fuertemente y la suspensión de las actividades es prácticamente total (administración pública, transporte, comercio, etc.), con excepción de las vinculadas al rubro comestibles, farmacia y venta de combustibles). Y en otra vuelta de tuerca, éste jueves, el Ejecutivo rafaelino autorizó la retención y secuestro de los vehículos de quienes no puedan justificar su presencia en las calles.
Detenidos por incitar a saqueos
A todo esto se agrega una inquietud adicional por lo que pueda pasar en el futuro inmediato si no se da respuesta a las demandas de las franjas más vulnerables de la sociedad y la sensación de que algo se puede estar gestando.
Tres sujetos fueron detenidos, en las ultimas horas, por “fogonear”, a través de las redes, el robo masivo en los supermercados de la ciudad y una mujer fue demorada por convocar, por el mismo medio, a concentración frente la Fiscalía Regional a quienes tiene familiares o allegados privados de su libertad en la cárcel de Las Flores.
En la madrugada del miércoles, un mayor y un menor de edad fueron sorprendidos cuando intentaban, de manera individual, pero articuladamente, incentivar y empujar a la población al saqueo de locales dedicados a la venta de comestibles, pero fueron rápidamente rastreados y aprehendidos por agentes de la policía provincial.
La aprehensión de ambos se produjo a través de los allanamientos ejecutados en sus domicilios, uno en el barrio Fátima y el otro en Central Córdoba, jurisdicciones linderas en el sector noreste de la ciudad.
Un tercero fue descubierto, en la víspera, cuando alentaba y trataba de organizar saqueos en distintos comercios, pero la maniobra fue detectada por agentes de la Agencia de Investigación Criminal y de Prevención en Seguridad del Municipio y en otro allanamiento (en una vivienda de calle Tucumán al 1500, en el norte del ejido urbano) se logró su detención.
Finalmente, una mujer terminó tras las rejas luego convocar, a través de Facebook, a los familiares de internos de la cárcel de Las Flores para realizar una marcha frente a la sede del Ministerio Pública de la Acusación de Rafaela. Alertado por el hecho, el ministerio de Seguridad de la provincia puso en marcha una investigación y se logró la identificación de la agitadora, que ahora enfrenta una causa penal.
El microcentro, por ejemplo, presentaba un movimiento considerable, que se atribuyó a los cuatros días corridos de inactividad y a que los comercios, en busca de hacer caja, abrieron sus puertas a pesar de las restricciones y sanciones que rigen.
La preocupación de las autoridades fue mayúscula porque es evidente que muchos rafaelinos, aunque la inmensa mayoría es consciente de la gravedad de la situación, no han entendido suficientemente los riesgos que implica no cumplir con el distanciamiento social y los riesgo que su repudiable conducta acarrea tanto para ellos mismos como para aquellos con quienes tienen contacto.
La desazón en las fuerzas de seguridad (Policías provincial y federal, Gendarmería y la Guardia Urbana Rafaelina) también es muy grande porque nada alcanza para impedir que un grupo se vuelquen en las calles ignorando las alertas para prevenir el desastre. Tampoco sirven de lección las decenas y decenas de aprehensiones que a diario se registran y sus derivaciones penales y económicas. Lo peor de todo es que muchos de los afectados a los operativos empiezan a sentir, y lo señalan, que si no se revierte este comportamiento los controles se verán desbordados, justo cuando el brote entra en su etapa más agresiva.
Las medidas restrictivas adoptadas por el Gobierno municipal, para que se respete el aislamiento obligatorio, se fueron profundizando e intensificando fuertemente y la suspensión de las actividades es prácticamente total (administración pública, transporte, comercio, etc.), con excepción de las vinculadas al rubro comestibles, farmacia y venta de combustibles). Y en otra vuelta de tuerca, éste jueves, el Ejecutivo rafaelino autorizó la retención y secuestro de los vehículos de quienes no puedan justificar su presencia en las calles.
Detenidos por incitar a saqueos
A todo esto se agrega una inquietud adicional por lo que pueda pasar en el futuro inmediato si no se da respuesta a las demandas de las franjas más vulnerables de la sociedad y la sensación de que algo se puede estar gestando.
Tres sujetos fueron detenidos, en las ultimas horas, por “fogonear”, a través de las redes, el robo masivo en los supermercados de la ciudad y una mujer fue demorada por convocar, por el mismo medio, a concentración frente la Fiscalía Regional a quienes tiene familiares o allegados privados de su libertad en la cárcel de Las Flores.
En la madrugada del miércoles, un mayor y un menor de edad fueron sorprendidos cuando intentaban, de manera individual, pero articuladamente, incentivar y empujar a la población al saqueo de locales dedicados a la venta de comestibles, pero fueron rápidamente rastreados y aprehendidos por agentes de la policía provincial.
La aprehensión de ambos se produjo a través de los allanamientos ejecutados en sus domicilios, uno en el barrio Fátima y el otro en Central Córdoba, jurisdicciones linderas en el sector noreste de la ciudad.
Un tercero fue descubierto, en la víspera, cuando alentaba y trataba de organizar saqueos en distintos comercios, pero la maniobra fue detectada por agentes de la Agencia de Investigación Criminal y de Prevención en Seguridad del Municipio y en otro allanamiento (en una vivienda de calle Tucumán al 1500, en el norte del ejido urbano) se logró su detención.
Finalmente, una mujer terminó tras las rejas luego convocar, a través de Facebook, a los familiares de internos de la cárcel de Las Flores para realizar una marcha frente a la sede del Ministerio Pública de la Acusación de Rafaela. Alertado por el hecho, el ministerio de Seguridad de la provincia puso en marcha una investigación y se logró la identificación de la agitadora, que ahora enfrenta una causa penal.
Con información de
El Litoral
