25 DE ABRIL 2024
Bolivia: la presidente interina Jeanine Áñez cuestionó el llamado a elecciones en plena pandemia de coronavirus
Sábado 13 de
Junio 2020
La jefa de Estado afirmó que promulgará la convocatoria para el 6 de septiembre porque es su “obligación constitucional” pero llamó a los parlamentarios a tener "la honestidad de asumir públicamente la responsabilidad de esa decisión y de sus posibles consecuencias en la salud de los ciudadanos”.
Luego de que el Parlamento de Bolivia aprobara el miércoles que se convoque a elecciones generales el próximo 6 de septiembre, la presidente interina Jeanine Áñez envió una carta a la presidenta del Senado, Eva Copa, para cuestionar la fecha elegida para la votación nacional por el “riesgo real y muy grande para la salud y la vida de los bolivianos” que representa el brote de coronavirus que está golpeando al país.
“Es comprensible y muy respetable que usted y otros dirigentes políticos quieran elecciones lo antes posible. Pero es aún más comprensible y más respetable que una enorme mayoría de los bolivianos sientan que esas elecciones son un riesgo enorme para la salud y la vida de cada familia en nuestro país”, señaló Áñez en la misiva que también difundió en sus redes sociales.
Y agregó: “Para descartar ese riesgo de salud en las familias, le pido que dejemos de lado los colores políticos y que trabajemos coordinando esfuerzos y escuchando a los médicos y a los científicos. Y por eso le pido que me haga llegar usted el estudio médico y científico (el estudio epidemiológico) en el cual se basa su decisión y la del MAS para impulsar elecciones el 6 de septiembre”.
Además, en la carta, Áñez hizo un peculiar comentario sobre su rechazo a esta convocatoria: “Quiero dejarle muy claro que esta reflexión que le hago sobre la salud y la vida no es un afán para prorrogar mi gestión. Usted sabe que ese afán de prorrogarse es cosa del pasado y del líder de su partido, el ex presidente Evo Morales. Y usted sabe también que esa etapa, tan dañina para la democracia, ya la superó el pueblo boliviano”.
“De este modo, tenga usted la seguridad absoluta de que yo cumpliré la decisión legal que usted y el Tribunal Supremo Electoral tomen en cuenta a la fecha de elecciones. Y lo haré porque esa es mi obligación constitucional”, remarcó la mandataria.
Según la norma constitucional, el Poder Ejecutivo de Bolivia es el encargado de promulgar la convocatoria ya aprobada por los parlamentarios. Pero si no lo hiciera, la senadora Eva Copa podría tomar la iniciativa en su condición de presidenta de la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP).
Al final de la carta, Áñez reiteró su preocupación por el riesgo que corren los votantes en medio de la pandemia: “Quiero pedirle con respeto y firmeza, que usted y las personas que han hecho esta ley, tengan la honestidad de asumir públicamente la responsabilidad de esa decisión y de sus posibles consecuencias en la salud de los ciudadanos”.
Bolivia afronta uno de sus momentos más adversos por el incremento de contagios de COVID-19, cuando este viernes se cumplen tres meses desde que se identificaron los primeros casos en marzo pasado, con un récord diario de positivos.
El pico más alto de contagios se reportó justamente este pasado jueves, con 884, hasta aumentar a 16.165 los positivos, con 553 fallecidos, mientras que las estimaciones del Ministerio de Salud apuntan a los 100.000 a fines de julio.
Las regiones más afectadas por la pandemia, Santa Cruz, la más poblada del país con más de tres millones de habitantes, y Beni, un departamento amazónico con lago más de medio millón de pobladores, mantienen el confinamiento.
“Es comprensible y muy respetable que usted y otros dirigentes políticos quieran elecciones lo antes posible. Pero es aún más comprensible y más respetable que una enorme mayoría de los bolivianos sientan que esas elecciones son un riesgo enorme para la salud y la vida de cada familia en nuestro país”, señaló Áñez en la misiva que también difundió en sus redes sociales.
Y agregó: “Para descartar ese riesgo de salud en las familias, le pido que dejemos de lado los colores políticos y que trabajemos coordinando esfuerzos y escuchando a los médicos y a los científicos. Y por eso le pido que me haga llegar usted el estudio médico y científico (el estudio epidemiológico) en el cual se basa su decisión y la del MAS para impulsar elecciones el 6 de septiembre”.
Además, en la carta, Áñez hizo un peculiar comentario sobre su rechazo a esta convocatoria: “Quiero dejarle muy claro que esta reflexión que le hago sobre la salud y la vida no es un afán para prorrogar mi gestión. Usted sabe que ese afán de prorrogarse es cosa del pasado y del líder de su partido, el ex presidente Evo Morales. Y usted sabe también que esa etapa, tan dañina para la democracia, ya la superó el pueblo boliviano”.
“De este modo, tenga usted la seguridad absoluta de que yo cumpliré la decisión legal que usted y el Tribunal Supremo Electoral tomen en cuenta a la fecha de elecciones. Y lo haré porque esa es mi obligación constitucional”, remarcó la mandataria.
Según la norma constitucional, el Poder Ejecutivo de Bolivia es el encargado de promulgar la convocatoria ya aprobada por los parlamentarios. Pero si no lo hiciera, la senadora Eva Copa podría tomar la iniciativa en su condición de presidenta de la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP).
Al final de la carta, Áñez reiteró su preocupación por el riesgo que corren los votantes en medio de la pandemia: “Quiero pedirle con respeto y firmeza, que usted y las personas que han hecho esta ley, tengan la honestidad de asumir públicamente la responsabilidad de esa decisión y de sus posibles consecuencias en la salud de los ciudadanos”.
Bolivia afronta uno de sus momentos más adversos por el incremento de contagios de COVID-19, cuando este viernes se cumplen tres meses desde que se identificaron los primeros casos en marzo pasado, con un récord diario de positivos.
El pico más alto de contagios se reportó justamente este pasado jueves, con 884, hasta aumentar a 16.165 los positivos, con 553 fallecidos, mientras que las estimaciones del Ministerio de Salud apuntan a los 100.000 a fines de julio.
Las regiones más afectadas por la pandemia, Santa Cruz, la más poblada del país con más de tres millones de habitantes, y Beni, un departamento amazónico con lago más de medio millón de pobladores, mantienen el confinamiento.
Con información de
Infobae
