SANTA FE
Vivo, de milagro: uno le disparó y erró, al otro se le trabó el revólver
Martes 23 de
Junio 2020
Un hombre de 44 años sufrió un brutal asalto: forcejeó con uno de los ladrones y así logró esquivar los balazos, mientras el otro delincuente intentaba destrabar el arma sin éxito.
David es un vecino de 44 años que en las últimas horas sufrió un salvaje ataque por parte de dos hombres en barrio René Favaloro, en el norte de la ciudad de Santa Fe. Su relato es estremecedor.
Mientras circulaba por calle Saavedra, al fondo, vio a los dos sujetos. Estaban encapuchados y con un palo de escoba, cerca de un zanjón con basura. Decidió entonces dejar pasar a una mujer que venía en la misma dirección, con un niño. Entonces, aceleró, pero fue detenido por un palazo en el pecho.
Los delincuentes le exigían que les diera su moto, pero él se negó. A partir de allí comenzó una lucha en la que David podría haber dejado su vida. Uno de ellos empezó a dispararle con un revólver, pero se le trabó. "No me quería pegar en la panza ni nada, me quería pegar en la cabeza", cuenta la víctima.
Entonces, el otro individuo tomó la posta y efectuó varios tiros, pero todos fueron desviados por David, que forcejeaba con él. Mientras tanto, el primer sujeto arengaba: "¡Matalo!".
Cuando lograron hacerse de la moto, lo seguían baleando. "Salí corriendo 'en zigzag' para que no me den en la espalda", relata David. Pese a la balacera, sólo un tiro lo rozó en el abdomen.
Mientras circulaba por calle Saavedra, al fondo, vio a los dos sujetos. Estaban encapuchados y con un palo de escoba, cerca de un zanjón con basura. Decidió entonces dejar pasar a una mujer que venía en la misma dirección, con un niño. Entonces, aceleró, pero fue detenido por un palazo en el pecho.
Los delincuentes le exigían que les diera su moto, pero él se negó. A partir de allí comenzó una lucha en la que David podría haber dejado su vida. Uno de ellos empezó a dispararle con un revólver, pero se le trabó. "No me quería pegar en la panza ni nada, me quería pegar en la cabeza", cuenta la víctima.
Entonces, el otro individuo tomó la posta y efectuó varios tiros, pero todos fueron desviados por David, que forcejeaba con él. Mientras tanto, el primer sujeto arengaba: "¡Matalo!".
Cuando lograron hacerse de la moto, lo seguían baleando. "Salí corriendo 'en zigzag' para que no me den en la espalda", relata David. Pese a la balacera, sólo un tiro lo rozó en el abdomen.
Con información de
LT10
