Santa Fe suscribió a la hipótesis del ministro de Salud de Kicillof de que “estallarían Rosario y Córdoba” de contagios si se libera el AMBA
Miércoles 08 de
Julio 2020
Autoridades provinciales y municipales coincidieron en que aumentaría el riesgo de propagación de la enfermedad. Según su evaluación, la mayoría de los casos positivos en Santa Fe "son importados" de la Ciudad y Provincia de Buenos Aires. El gobierno cordobés aún no se pronunció.
“No hay que confundirse. Si nosotros liberamos mucho el AMBA te estalla Rosario, Córdoba, porque el 95 por ciento de los casos que aparecen en otras partes del país es porque pasaron por AMBA”, sostuvo ayer el ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollán, al pronunciarse sobre el impacto de una futura flexibilización de la cuarentena. Cuando superan los 100 días de aislamiento obligatorio en el área metropolitana y se discuten menos restricciones tras el 17 de julio, las autoridades de Santa Fe avalaron esta hipótesis.
“Coincidimos con los dichos del ministro Gollán. Por la cercanía y la vinculación con AMBA, es hasta la fecha el contacto más estrecho en los casos positivos que tenemos. Controlar Buenos Aires y Chaco también es poder controlar la situación en Santa Fe”, indicó la ministra de Salud provincial, Sonia Martorano.
Según la funcionaria del gobernador Omar Perotti, las medidas que se están implementando en el Área Metropolitana “son las más correctas para ellos y para las provincias vecinas”.
A su turno, el secretario de Salud de la Municpalidad de Rosario, Leonardo Caruana, se mostró en sintonía con el ministro Gollán de que si se produce una mayor apertura de la cuarentena en Buenos Aires, esa flexibilización aumentaría el riesgo de contagios en la ciudad santafesina. Según precisó, el “segundo brote” que tuvo Rosario “ha tenido un 95% en los antecedentes de viaje”.
“Cualquier situación que aumente el número de casos en el AMBA aumenta el riesgo en relación a trabajadores que comparten distintas actividades con la ciudad”, manifestó Caruana ante medios locales.
Sin embargo, matizó su evaluación sobre el alcance de las medidas que toman otros distritos y se distanció de las tensiones de criterios que ocurren, por ejemplo, entra las gestiones de la Provincia de Buenos Aires y la Ciudad.
“Si bien la pandemia tiene una situación mundial y general, las respuestas son locales y hay que analizar cada situación en un contexto que no se agota sólo en un tema biológico sino que se da en escenarios culturales, sociales y políticos”, resaltó el secretario de Salud de Rosario. Caruana está más pendiente de lo que ocurre en julio y agosto, los meses de mayor frío en todo el país.
“Estamos con días sin casos y otros con casos positivos y con confirmaciones alrededor, pero con un escenario epidemiológico controlado. Esos 136 casos hasta hoy nos obliga a seguir el camino y vamos a trabajar intensamente para ese escenario. ¿Qué queremos evitar? La circulación comunitaria”, puntualizó el funcionario.
En la provincia de Córdoba aún evitaron pronunciarse públicamente sobre las declaraciones de Gollán. El gobierno de Juan Schiaretti está focalizado en el foco de coronavirus que se disparó en la región de Traslasierra, considerado como “el más grande en una comunidad abierta en toda la provincia”.
“La situación es preocupante porque llevamos 132 casos en brotes completos, contando contagios secundarios como La Falda, ya que el origen fue en Villa Dolores”, señaló ayer el ministro de Salud, Diego Cardozo al visitar la zona y reunirse con el Centro de Operaciones de Emergencia (COE).
En Traslasierra, la gran mayoría de los contagios son por contactos estrechos aunque existen “tres o cuatro que se desconoce el nexo epidemiológico y por eso la situación es muy preocupante”, indicó Guillermo Baudonet, secretario de Salud de Villa Dolores.
“Coincidimos con los dichos del ministro Gollán. Por la cercanía y la vinculación con AMBA, es hasta la fecha el contacto más estrecho en los casos positivos que tenemos. Controlar Buenos Aires y Chaco también es poder controlar la situación en Santa Fe”, indicó la ministra de Salud provincial, Sonia Martorano.
Según la funcionaria del gobernador Omar Perotti, las medidas que se están implementando en el Área Metropolitana “son las más correctas para ellos y para las provincias vecinas”.
A su turno, el secretario de Salud de la Municpalidad de Rosario, Leonardo Caruana, se mostró en sintonía con el ministro Gollán de que si se produce una mayor apertura de la cuarentena en Buenos Aires, esa flexibilización aumentaría el riesgo de contagios en la ciudad santafesina. Según precisó, el “segundo brote” que tuvo Rosario “ha tenido un 95% en los antecedentes de viaje”.
“Cualquier situación que aumente el número de casos en el AMBA aumenta el riesgo en relación a trabajadores que comparten distintas actividades con la ciudad”, manifestó Caruana ante medios locales.
Sin embargo, matizó su evaluación sobre el alcance de las medidas que toman otros distritos y se distanció de las tensiones de criterios que ocurren, por ejemplo, entra las gestiones de la Provincia de Buenos Aires y la Ciudad.
“Si bien la pandemia tiene una situación mundial y general, las respuestas son locales y hay que analizar cada situación en un contexto que no se agota sólo en un tema biológico sino que se da en escenarios culturales, sociales y políticos”, resaltó el secretario de Salud de Rosario. Caruana está más pendiente de lo que ocurre en julio y agosto, los meses de mayor frío en todo el país.
“Estamos con días sin casos y otros con casos positivos y con confirmaciones alrededor, pero con un escenario epidemiológico controlado. Esos 136 casos hasta hoy nos obliga a seguir el camino y vamos a trabajar intensamente para ese escenario. ¿Qué queremos evitar? La circulación comunitaria”, puntualizó el funcionario.
En la provincia de Córdoba aún evitaron pronunciarse públicamente sobre las declaraciones de Gollán. El gobierno de Juan Schiaretti está focalizado en el foco de coronavirus que se disparó en la región de Traslasierra, considerado como “el más grande en una comunidad abierta en toda la provincia”.
“La situación es preocupante porque llevamos 132 casos en brotes completos, contando contagios secundarios como La Falda, ya que el origen fue en Villa Dolores”, señaló ayer el ministro de Salud, Diego Cardozo al visitar la zona y reunirse con el Centro de Operaciones de Emergencia (COE).
En Traslasierra, la gran mayoría de los contagios son por contactos estrechos aunque existen “tres o cuatro que se desconoce el nexo epidemiológico y por eso la situación es muy preocupante”, indicó Guillermo Baudonet, secretario de Salud de Villa Dolores.
Con información de
Infobae