$ 49,4 millones, 80 % con financiamiento externo
El presupuesto nacional incluyó un puerto turístico en Santa Fe
Por:
Ignacio Hintermeister
Miércoles 11 de
Noviembre 2020
Las planillas de obras del texto que elaboró la Casa Rosada, contemplan $ 27,5 millones más para instalaciones similares en Rosario. Todo en el marco de un proyecto de corredores fluviales con crédito del BID, en riesgo por subejecuciones desde hace varios años.
El proyecto de ley de presupuesto nacional de 2021 contuvo en su elaboración original, en sus largas y detalladas planillas de obras, una partida de $ 49,4 millones para la construcción de una estación fluvial turística en el puerto de Santa Fe, y otra similar en Rosario con una cifra final de $ 27,5 millones de pesos más.
Ambas propuestas suponen un aporte del 80 % del Banco Interamericano de Desarrollo y el 20 % restante a cargo del ministerio a cargo de Matías Lammens, que en julio pasado dictó una resolución (294/2020) actualizando el reglamento operativo del Programa de Desarrollo de Corredores Turísticos del Préstamo BID 2606/OC-AR.
El texto que aprobó Diputados y que debe ser revisado por el Senado nacional incluye además $ 17 millones para la terminal portuaria de la ciudad de Corrientes, $ 43,3 millones para una terminal en La Paz, Entre Ríos y $ 25,8 millones para una terminal más en Posadas, Misiones. En todos los casos el 80 % de la inversión está a cargo del BID, cuyo crédito es en dólares y suma U$ S 80 millones para el programa.
El Programa de Desarrollo de Corredores Turísticos nació del decreto 168/2012 que firmaron la por entonces presidenta Cristina Kirchner y su ministro del área, Carlos Meyer. El objetivo descripto en ese instrumento, “es incrementar el gasto turístico, mejorando el aprovechamiento turístico espacial y temporal de las Áreas Protegidas (APs) y sus destinos asociados, mediante el apoyo a la estructuración de productos turísticos, fortalecimiento institucional y mejora de la gestión ambiental”.
En la gestión macrista, la administración nacional intentó reflotar la fallida iniciativa, asociándola a un proyecto de turismo para unir Buenos Aires con Posadas, mediante cruceros fluviales con camarotes y servicios a bordo. En el Ente Autárquico del Puerto de Santa Fe aún están los “renders” que acercó una consultora para construir la estación en lo que hoy es una zona aduanera inactiva, sobre el dique uno, entre la cabina de Turismo de la ciudad y los galpones.
Alejandro Grandinetti, director de Turismo de la actual gestión provincial de Omar Perotti, le dijo a El Litoral que la iniciativa de corredores fluviales es un proyecto estratégico que fue incluso impulsado durante un encuentro internacional de Turismo en Madrid, por parte del Colitur (Consejo Litoral de Turismo) junto a otras provincias ribereñas.
Sin embargo, el funcionario provincial aclaró que el ministro nacional del área, Matías Lammens, intenta no perder el acceso al crédito, que en parte no fue utilizado por la inactividad de los proyectos en el país. Según la página web del BID, el proyecto está en ejecución con un 51 % de los fondos utilizados, pero quedan U$ S 39 millones disponibles, a lo que debe añadirse un 20 % más como aporte del gobierno nacional para que la línea sea ejecutable.
Costo y oportunidad
El crédito otorgado hace ya 9 años, comenzó a pagarse en 2018 y estipula cuotas semestrales hasta el año 2037. Eso supone financiamiento de bajo costo y largo plazo para infraestructura y promoción de una de las actividades que más empleo genera, incluyendo divisas en el caso del turismo receptivo.
La subejecución presupuestaria -que abarca a unos y otros en las orillas de la grieta- podría hacer perder lo que queda de ese financiamiento del BID, en un país que necesita cada divisa, en especial si eso supone inversión en la economía real, infraestructura y potencial generación de empleo formal y de más divisas.
En las proyecciones pospandemia, el turismo interno y el receptivo a nivel internacional prometen una rápida reactivación. El litoral fluvial, sus áreas protegidas naturales en uno de los ríos más importantes del mundo, y las ofertas urbanas desde Buenos Aires hasta Posadas, no parecen ser un proyecto a descartar. Excepto que las iniciativas requieren la complementación de inversiones privadas y actualizaciones normativas de navegación, que nunca son lo más sencillo en el país de las crisis y las oportunidades.
Ambas propuestas suponen un aporte del 80 % del Banco Interamericano de Desarrollo y el 20 % restante a cargo del ministerio a cargo de Matías Lammens, que en julio pasado dictó una resolución (294/2020) actualizando el reglamento operativo del Programa de Desarrollo de Corredores Turísticos del Préstamo BID 2606/OC-AR.
El texto que aprobó Diputados y que debe ser revisado por el Senado nacional incluye además $ 17 millones para la terminal portuaria de la ciudad de Corrientes, $ 43,3 millones para una terminal en La Paz, Entre Ríos y $ 25,8 millones para una terminal más en Posadas, Misiones. En todos los casos el 80 % de la inversión está a cargo del BID, cuyo crédito es en dólares y suma U$ S 80 millones para el programa.
El Programa de Desarrollo de Corredores Turísticos nació del decreto 168/2012 que firmaron la por entonces presidenta Cristina Kirchner y su ministro del área, Carlos Meyer. El objetivo descripto en ese instrumento, “es incrementar el gasto turístico, mejorando el aprovechamiento turístico espacial y temporal de las Áreas Protegidas (APs) y sus destinos asociados, mediante el apoyo a la estructuración de productos turísticos, fortalecimiento institucional y mejora de la gestión ambiental”.
En la gestión macrista, la administración nacional intentó reflotar la fallida iniciativa, asociándola a un proyecto de turismo para unir Buenos Aires con Posadas, mediante cruceros fluviales con camarotes y servicios a bordo. En el Ente Autárquico del Puerto de Santa Fe aún están los “renders” que acercó una consultora para construir la estación en lo que hoy es una zona aduanera inactiva, sobre el dique uno, entre la cabina de Turismo de la ciudad y los galpones.
Alejandro Grandinetti, director de Turismo de la actual gestión provincial de Omar Perotti, le dijo a El Litoral que la iniciativa de corredores fluviales es un proyecto estratégico que fue incluso impulsado durante un encuentro internacional de Turismo en Madrid, por parte del Colitur (Consejo Litoral de Turismo) junto a otras provincias ribereñas.
Sin embargo, el funcionario provincial aclaró que el ministro nacional del área, Matías Lammens, intenta no perder el acceso al crédito, que en parte no fue utilizado por la inactividad de los proyectos en el país. Según la página web del BID, el proyecto está en ejecución con un 51 % de los fondos utilizados, pero quedan U$ S 39 millones disponibles, a lo que debe añadirse un 20 % más como aporte del gobierno nacional para que la línea sea ejecutable.
Costo y oportunidad
El crédito otorgado hace ya 9 años, comenzó a pagarse en 2018 y estipula cuotas semestrales hasta el año 2037. Eso supone financiamiento de bajo costo y largo plazo para infraestructura y promoción de una de las actividades que más empleo genera, incluyendo divisas en el caso del turismo receptivo.
La subejecución presupuestaria -que abarca a unos y otros en las orillas de la grieta- podría hacer perder lo que queda de ese financiamiento del BID, en un país que necesita cada divisa, en especial si eso supone inversión en la economía real, infraestructura y potencial generación de empleo formal y de más divisas.
En las proyecciones pospandemia, el turismo interno y el receptivo a nivel internacional prometen una rápida reactivación. El litoral fluvial, sus áreas protegidas naturales en uno de los ríos más importantes del mundo, y las ofertas urbanas desde Buenos Aires hasta Posadas, no parecen ser un proyecto a descartar. Excepto que las iniciativas requieren la complementación de inversiones privadas y actualizaciones normativas de navegación, que nunca son lo más sencillo en el país de las crisis y las oportunidades.
Con información de
El Litoral
