Cafiero: “Las tierras públicas son para la producción y el empleo”
Miércoles 11 de
Noviembre 2020
Esta tarde el jefe de Gabinete Santiago Cafiero ratificó la decisión “estratégica” del Gobierno de que “las tierras públicas y fiscales sirvan para la producción y el empleo”. Las declaraciones las hizo durante un acto donde anunció la ampliación del parque industrial La Cantábrica, en el partido de Morón.
“Es fundamental que se haya vuelto al sendero productivo y que se piense, no solo en las posibilidades de la generación de empleo, que necesita toda la comunidad, sino también en lo que irradia este parque industrial a la hora de atraer nuevas inversiones y de generar exportaciones”, determinó Cafiero.
El acto formalizó la decisión del Gobierno nacional, a través de la Agencia Administradora de Bienes del Estado (AABE), de otorgar un permiso de uso al Ente de Promoción Industrial Buenos Aires para ampliar el polo productivo La Cantábrica de Morón.
El funcionario definió a La Cantábrica como “una huella de lo que sucedió en términos productivos en el país, con un proyecto de ampliación de las tierras que se interrumpió en los últimos años con otro modelo, que seguramente tenía una mirada de especulación inmobiliaria”. “Con la cesión de nuevos terrenos, el parque podrá ahora avanzar con su ampliación para potenciar el desarrollo económico de las pymes, tanto locales como de otras jurisdicciones”, agregó Cafiero.
En la ceremonia estuvieron presentes el presidente y el vicepresidente de la AABE, Martín Cosentino Moreto, y Juan Debandi, respectivamente. También participaron los secretarios municipales de Gobierno, Diego Spina; Desarrollo Local, Eugenia Navarro, y Planificación Estratégica, Pablo Izcovic, junto al presidente de la Unión Industrial del Oeste, Eduardo Gambaro, y el presidente y gerente de ADIF, Ricardo Lissalde y Mario Puccio. Al finalizar, Cafiero y las autoridades presentes visitaron el Parque Industrial DECA en Haedo.
El Parque industrial La Cantábrica está ubicado en el lugar donde estuvo una antigua empresa metalúrgica del mismo nombre y que fue un ícono de la industria metalúrgica argentina. En 1950 la fábrica empleaba a 5.000 empleados y producía implementos agrícolas, vías de tren, ejes de vagones y torres de transmisión eléctrica. A partir de la cesión de nuevos terrenos, el predio podrá avanzar para potenciar el desarrollo económico de las pymes.
El acto formalizó la decisión del Gobierno nacional, a través de la Agencia Administradora de Bienes del Estado (AABE), de otorgar un permiso de uso al Ente de Promoción Industrial Buenos Aires para ampliar el polo productivo La Cantábrica de Morón.
El funcionario definió a La Cantábrica como “una huella de lo que sucedió en términos productivos en el país, con un proyecto de ampliación de las tierras que se interrumpió en los últimos años con otro modelo, que seguramente tenía una mirada de especulación inmobiliaria”. “Con la cesión de nuevos terrenos, el parque podrá ahora avanzar con su ampliación para potenciar el desarrollo económico de las pymes, tanto locales como de otras jurisdicciones”, agregó Cafiero.
En la ceremonia estuvieron presentes el presidente y el vicepresidente de la AABE, Martín Cosentino Moreto, y Juan Debandi, respectivamente. También participaron los secretarios municipales de Gobierno, Diego Spina; Desarrollo Local, Eugenia Navarro, y Planificación Estratégica, Pablo Izcovic, junto al presidente de la Unión Industrial del Oeste, Eduardo Gambaro, y el presidente y gerente de ADIF, Ricardo Lissalde y Mario Puccio. Al finalizar, Cafiero y las autoridades presentes visitaron el Parque Industrial DECA en Haedo.
El Parque industrial La Cantábrica está ubicado en el lugar donde estuvo una antigua empresa metalúrgica del mismo nombre y que fue un ícono de la industria metalúrgica argentina. En 1950 la fábrica empleaba a 5.000 empleados y producía implementos agrícolas, vías de tren, ejes de vagones y torres de transmisión eléctrica. A partir de la cesión de nuevos terrenos, el predio podrá avanzar para potenciar el desarrollo económico de las pymes.
Con información de
El Economista
