Esperan una inflación del 4% para enero, con los alimentos como protagonistas
Jueves 28 de
Enero 2021
A días de cerrar enero -primer mes del año para el cual el Gobierno estimó una inflación total del 29%-, las consultoras privadas anticipan que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del mes estará en la zona del 4% y alimentos y bebidas vuelve a ser el rubro que más presionó sobre los precios, con una aceleración en las últimas semanas.
El anticipo de los economistas con sus relevamientos se encuentra en línea con lo que prevé el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) que elabora el Banco Central en base a encuestas. Para el BCRA la inflación de enero será del 4% y desde el próximo mes habrá una tendencia descendente, con una proyección de 3,7% de inflación para febrero.
"Vemos una inflación superior al 4% en enero y, alimentos y bebidas volverán a estar por encima del indicador general con una suba de alrededor de 4,5%", explicó Damian Di Pace, economista director de Focus Market, y agregó que las categorías con mayor incremento fueron carnes, frutas y verduras y, por otro lado, se registraron subas en productos de limpieza.
Además, en el indicador de precios que elabora el INDEC habrían repercutido las dos subas en el precio de la nafta que se dieron en enero, luego de tarifas congeladas en los primeros seis meses de 2020 y, por otra parte, la autorización en las subas de las tarifas de conectividad a internet, telefonía fija y móvil, con incrementos permitidos de entre 5% y 8%.
De acuerdo al relevamiento que realiza la consultora LCG mediante web scraping con 8.000 alimentos y bebidas de 5 supermercados el 16% de la canasta relevada presentó aumentos de precios, lo que marcó el mayor registro en los últimos tres meses. Además, su director, Guido Lorenzo alertó a El Cronista "esperamos que otra vez la inflación núcleo supere al indicador general por la cantidad de productos regulados con una marca de 4,6%".
En diciembre, la inflación que no contiene estacionales ni regulados fue del 4,9%. Para enero la previsión de los analistas encuestados en el REM sí difiere de la de las consultoras privadas. Proyectaron que será del 3,8% y, de esta manera, la inflación núcleo para 2021 se ubicaría en 47,2%.
En los últimos seis meses, el aumento sólo de la categoría de alimentos que componen la canasta habría sido del 23%. "Diciembre cerró con una caída del consumo masivo de 6,7% porque el rubro de alimentos es muy sensible al bolsillo y genera una pérdida de poder adquisitivo del ingreso de los trabajadores muy importante que empeora los indicadores de pobreza e indigencia", comentó Di Pace.
La consultora Eco Go, dirigida por Marina Dal Poggetto es la única que espera un valor para la inflación mensual de enero por debajo del 4% y proyecta que será del 3,8%, pero coincide en que los alimentos fueron los protagonistas.
Este último tiempo el mercado comenzó a interiorizar la disipación de una posible depreciación del tipo de cambio, en gran parte gracias a la mejora del precio de los commodities, y por esta razón, las expectativas de inflación implícita en los instrumentos de renta fija mostraron una reducción.
Sebastián Einstoss, de Eco Go, dijo que el actual manejo de la nominalidad presenta una serie de disyuntivas. Por un lado, el crawling peg (micro depreciaciones del tipo de cambio) corre por detrás a la inflación y pone un cierto "piso" para sectores altamente dolarizados. Por otro lado, el objetivo del Gobierno nacional de lograr una mejora en términos reales de los ingresos, de amplios sectores sociales, abre puertas a nuevas dudas sobre cuáles serán las anclas nominales en este año electoral.
En esta línea, el Ejecutivo no deja de trabajar para cerrar acuerdos que anclen los precios de estacionales, como el que se anunció la última semana de cortes de carne promocionales y el que busca para las frutas y verduras.
"Vemos una inflación superior al 4% en enero y, alimentos y bebidas volverán a estar por encima del indicador general con una suba de alrededor de 4,5%", explicó Damian Di Pace, economista director de Focus Market, y agregó que las categorías con mayor incremento fueron carnes, frutas y verduras y, por otro lado, se registraron subas en productos de limpieza.
Además, en el indicador de precios que elabora el INDEC habrían repercutido las dos subas en el precio de la nafta que se dieron en enero, luego de tarifas congeladas en los primeros seis meses de 2020 y, por otra parte, la autorización en las subas de las tarifas de conectividad a internet, telefonía fija y móvil, con incrementos permitidos de entre 5% y 8%.
De acuerdo al relevamiento que realiza la consultora LCG mediante web scraping con 8.000 alimentos y bebidas de 5 supermercados el 16% de la canasta relevada presentó aumentos de precios, lo que marcó el mayor registro en los últimos tres meses. Además, su director, Guido Lorenzo alertó a El Cronista "esperamos que otra vez la inflación núcleo supere al indicador general por la cantidad de productos regulados con una marca de 4,6%".
En diciembre, la inflación que no contiene estacionales ni regulados fue del 4,9%. Para enero la previsión de los analistas encuestados en el REM sí difiere de la de las consultoras privadas. Proyectaron que será del 3,8% y, de esta manera, la inflación núcleo para 2021 se ubicaría en 47,2%.
En los últimos seis meses, el aumento sólo de la categoría de alimentos que componen la canasta habría sido del 23%. "Diciembre cerró con una caída del consumo masivo de 6,7% porque el rubro de alimentos es muy sensible al bolsillo y genera una pérdida de poder adquisitivo del ingreso de los trabajadores muy importante que empeora los indicadores de pobreza e indigencia", comentó Di Pace.
La consultora Eco Go, dirigida por Marina Dal Poggetto es la única que espera un valor para la inflación mensual de enero por debajo del 4% y proyecta que será del 3,8%, pero coincide en que los alimentos fueron los protagonistas.
Este último tiempo el mercado comenzó a interiorizar la disipación de una posible depreciación del tipo de cambio, en gran parte gracias a la mejora del precio de los commodities, y por esta razón, las expectativas de inflación implícita en los instrumentos de renta fija mostraron una reducción.
Sebastián Einstoss, de Eco Go, dijo que el actual manejo de la nominalidad presenta una serie de disyuntivas. Por un lado, el crawling peg (micro depreciaciones del tipo de cambio) corre por detrás a la inflación y pone un cierto "piso" para sectores altamente dolarizados. Por otro lado, el objetivo del Gobierno nacional de lograr una mejora en términos reales de los ingresos, de amplios sectores sociales, abre puertas a nuevas dudas sobre cuáles serán las anclas nominales en este año electoral.
En esta línea, el Ejecutivo no deja de trabajar para cerrar acuerdos que anclen los precios de estacionales, como el que se anunció la última semana de cortes de carne promocionales y el que busca para las frutas y verduras.
Con información de
Cronista
