Medicamentos decomisados fueron pedidos por Santa Fe y nunca llegaron
Un punto de luz al gran interrogante que generó el decomiso de medicamentos con la leyenda “Gobierno de Santa Fe - Distribución Gratuita” en Ezeiza, que tenían como destino Venezuela. Aunque más temprano el ministro de Gobierno, Pablo Farías, había descartado el faltante de medicamentos en la provincia, el titular del Laboratorio Industrial Farmacéutico (LIF), Guillermo Cleti, confirmó que las drogas secuestradas debían ser enviadas por un laboratorio a Santa Fe aunque la entrega jamás se cumplió.
En diálogo con los periodistas Roberto Caferra y Evelin Machain en Radiópolis (Radio 2), Cleti aseguró que desde el gobierno pudieron averiguar que el cargamento con destino a Venezuela – fue retenido en la Aduana de Ezeiza en medio de una investigación por maniobras ilegales por casi 260 millones de pesos en supuestas exportaciones de medicina al país bolivariano– había sido pedido a un laboratorio pero nunca llegó. “Quiero aclarar que este medicamento no es de línea pública”, comenzó y explicó que las drogas son adquiridas por el Estado a través de la propia producción y de la compra.
“Revisamos el registro de compras centralizadas y accedimos a información que no es formal. El medicamento podría ser un antibiótico que se utiliza para infecciones urinarias y de piel. Es su único uso y no se puede usar como precursores o para otra actividad”, continuó.
Cleti contó que, ante la gran incógnita que tenían con respecto a la noticia difundida en un primer momento por Infobae.com, cruzaron datos de licitaciones. “Detectamos al medicamento en el último proceso de licitación de compra de medicamentos en febrero de este año. Tenía un plazo de entrega y no se cumplió hasta hoy”, advirtió. E insistió: “Hay una coincidencia exacta, esta medicación con sello debería estar en nuestros hospitales y no llegaron nunca”.
“Estamos indignados, lograron manchar la gestión pública de Santa Fe”, manifestó con pesar y confió en que se tomarán acciones judiciales contra esta empresa, de la cual prefirió no brindar detalles. Sin embargo, reconoció que no es ninguna de los dos firmas mencionadas en la nota periodística del sitio on line. “Me quiero eximir de nombrarla pero es una empresa con 30 años de trayectoria y no es ninguna de las dos que figuran, es un tercer laboratorio”, subrayó.
Este lunes se conoció que un cargamento, con destino a Venezuela, fue retenido en la Aduana de Ezeiza en medio de una investigación por maniobras ilegales por casi 260 millones de pesos en supuestas exportaciones de medicina al país bolivariano. Los medicamentos estaban destinados al Ministerio del Poder Popular para la Salud para de la República Bolivariana de Venezuela.
Las empresas vinculadas a la sobrefacturación son Laboratorio Internacional Argentino SA y Denver Farma SA. Ambas son proveedoras de la provincia de Santa Fe. De acuerdo a Infobae.com, detrás de las empresas mencionadas están Pablo Rubio y Juan José Levy, quienes según la publicación, vienen haciendo negocios hace varios con Venezuela a través de un fideicomiso que tiene aquel país con la Argentina, gracias a aceitados contactos que tendrían con el ex Ministro de Planificación Julio De Vido.
Ningún faltante
Más temprano, el gobierno santafesino había descartado la falta de medicamentos en la provincia y había asegurado que desconocía los motivos por los cuales aparecieron varias unidades con la leyenda “Gobierno de Santa Fe - Distribución Gratuita” entre los remedios que fueron decomisados en el aeropuerto de Ezeiza con destino a Venezuela.
Consultado por la periodista Ivana Fux (Radiópolis, Radio 2), el ministro de Gobierno Pablo Farías, señaló: “Lo que podemos decir es que no tenemos faltante de ese medicamento al que la Provincia le compra esa droga. Los blister ya vienen con esta leyenda. No tenemos faltante ni remesas que no fueran entregadas”.
“No sabemos por qué el laboratorio enviaba esos medicamentos a Venezuela. Estamos tranquilos porque pensamos que podría haber habido un robo, pero no hay faltante”, continuó. Luego, confió que la situación “es normal” aunque advirtió: “Vamos a seguir investigando”.