CÓRDOBA
Acusan a “viudas negras” de matar a un jubilado
Sábado 15 de
Octubre 2016
Una mujer y su hija tienen antecedentes de dormir a camioneros para robarles en Río Cuarto y alrededores. Una de ellas ya había asesinado a un expolicía a cuchilladas. Ahora serán juzgadas por hacerse pasar por asistentes sociales para asaltar a unanciano.
Yésica Oviedo (29) y su madre, Margarita Beatriz Oviedo (41), conocidas como “viudas negras” porque años atrás estuvieron acusadas de dormir a camioneros para robarles, deberán enfrentar otra vez el banquillo de los acusados este lunes en la ciudad de Río Cuarto.
Yésica Oviedo tiene un antecedente por homicidio, había sido condenada a 12 años, pero estaba con prisión domiciliaria, régimen que violó para cometer el nuevo crimen, según se sostiene en la acusación.
Ahora llega a juicio imputada de “homicidio en ocasión de robo” por la muerte de Luis Juan Loggia, un hombre de 82 años que fue golpeado de manera brutal durante un asalto, en vísperas de la Navidad de 2015, y días después falleció.
Por el delito también están acusados su madre, Margarita Oviedo (quien debía ser la garante de su prisión domiciliaria) y Alejandro David Pavón (22).
Según la instrucción del caso, las mujeres Oviedo abordaron a Loggia a la salida de un banco, se presentaron como asistentes sociales, le pidieron sus datos personales y le dijeron que pronto le harían una encuesta socioambiental en su casa para ayudarlo.
Tres días después se presentaron en el domicilio de Loggia junto con Pavón y otro hombre no identificado.
Como conocía a las mujeres, el jubilado les franqueó la entrada de su vivienda, ubicada en Simón Gorordo 875.
Adentro, Loggia fue salvajemente golpeado y lesionado con un cuchillo de acero (con una hoja de 16 centímetros). Maniatado con cables, fue abandonado herido en un galpón de la vivienda.
Le llevaron dos celulares, un maletín, un reloj y documentación de un plazo fijo por más de cinco mil pesos, según consta en la acusación.
Poco después, a Margarita Oviedo le hallaron el maletín de Loggia y varios efectos más en su poder.
Detuvieron a la hija y a Pavón, quien sería yerno de Margarita. El jubilado finalmente murió aquel 31 de diciembre debido a los golpes recibidos y se agravó la situación de todos los sospechosos.
Camioneros dormidos
El primer hecho por el que Yésica Oviedo y su madre, Margarita, fueron investigadas en Río Cuarto ocurrió hace seis años, y se trató de una tentativa de robo a un camionero.
Las mujeres, que solían ejercer la prostitución al costado de la ruta nacional 8, le pidieron a un chofer que las llevara a San Luis.
Gendarmería detuvo al transporte porque circulaba de manera zigzagueante. Detectó que el camionero había sido drogado, presuntamente con fines de robo.
En otro hecho, Yésica Oviedo estuvo involucrada junto con una amiga, María Quiroga. Dejaron a un camionero dormido en una estación de servicio de Vicuña Mackenna y este denunció que le faltó dinero.
Los dos hechos se le acumularon con el homicidio del taxista y policía retirado Salvador Beraldi (57), ocurrido en 2012.
Terminó condenada a 12 años, con prisión domiciliaria.
El nuevo juicio que Yésica Oviedo debe enfrentar comenzará a las 9.30 de este lunes en la Cámara del Crimen N° 2, integrada por Pablo Bianchi, Emilio Andruet y Carlos González Castellano (presidente).
Será con jurados populares.
A Yésica Oviedo y a Pavón los representará el defensor oficial Santiago Camogli, en tanto que Margarita Oviedo ha nombrado como abogado a Rolby Valdivieso.
El crimen
En noviembre de 2012, la Cámara del Crimen N° 2 de Río Cuarto condenó a Yésica a 12 años de prisión por el “homicidio simple” del taxista Beraldi.
El hombre, quien era policía retirado, fue hallado desnudo, muerto, con más de 20 puñaladas.
Para el fiscal de Cámara, Jorge Medina, Yésica “llegó al domicilio con la idea de dormirlo para robarle (se halló, en un vaso con agua, una droga que se usa para sedar animales), pero algo le falló y terminó masacrándolo con un cuchillo”.
La joven, que fue introducida en la prostitución por su madre cuando era adolescente, se presentó entonces de manera espontánea ante la Policía y confesó el crimen.
En el juicio admitió graves problemas de adicciones, argumentó que con Beraldi tenían una relación de varios meses que ella no podía cortar, sostuvo que el hombre con el arma blanca le exigía prácticas sexuales y que ella actuó en legítima defensa.
La mayoría de los jurados no le creyó.
Como tenía hijos menores de edad, la Justicia le concedió la prisión domiciliaria y era su madre Margarita la garante de esa condición. Yésica no podía salir de su casa de barrio 400 Viviendas.
Pero transgredió la orden judicial y, tres años después de aquel crimen, terminó detenida en Bouwer junto con su madre, a la espera de un nuevo juicio por otro cruento homicidio.
Seguidilla criminal
Crímenes y sospechas. El raid delictivo que tiene a la mujer y a su hija involucradas.
2010. Margarita Oviedo (41) y su hija Yésica (29) fueron acusadas de dopar a un camionero para robarle, en Río Cuarto.
2012. Yésica fue condenada a 12 años de cárcel por el asesinato del taxista y policía retirado Salvador Beraldi (57), quien murió tras recibir más de 20 puñaladas.
2015. Luis Juan Loggia (82) fue golpeado en un robo y murió el 31 de diciembre en Río Cuarto. Margarita, Yésica y un joven fueron imputados por el asesinato. Desde el lunes serán juzgados.
Seducción peligrosa
De qué se trata el delito. La modalidad criminal que existe detrás de esta jerga policial.
En la jerga policial y judicial, se denomina “viuda negra” a las mujeres que seducen a hombres, a los que luego dopan para robarles. En Córdoba, desde hace tiempo existe todo tipo de antecedentes en relación con esta clase de delito. Hay mujeres mayores que seducen a jubilados que acaban de cobrar en una sucursal bancaria; otras que buscan a sus víctimas en los casinos; prostitutas que se aprovechan de camioneros; e incluso más jóvenes que citan a los hombres a través de las redes sociales. En todos los casos, el objetivo es el mismo: doparlos para luego robarles.
Con información de
lavoz
