SANTA FE | CIUDAD
Despertaron con ladrones en la casa
Martes 18 de
Octubre 2016
Pasó anoche en Liceo Norte. Dos delincuentes tomaron de rehén a una familia y le robaron todas sus pertenencias.
Fue una pesadilla en tiempo real.
Mayra, Walter y la beba de ambos, de 1 año, anoche dormían plácidamente en su casa de barrio Liceo Norte, en calle J. J. Valle 4900. Eran cerca de las 2 y sobre la ciudad se abatía un fuerte temporal de agua y viento.
De repente Mayra se despertó cuando escuchó ruidos que provenían desde otro dormitorio. “Era como si alguien estuviera moviendo los juguetes de la beba”, comentó hoy en diálogo con El Litoral.
Encapuchados
* “Lo despierto a mi marido y le cuento lo que estaba pasando. El se levanta y cuando abre la puerta de la habitación se encontró con dos sujetos encapuchados, en el otro dormitorio, que estaban revisando todo.
“Lo primero que hicimos fue cerrar la puerta y poner la cajonera de la bebé para que los tipos no puedan entrar. Mi marido comenzó a gritar y los tipos golpeaban la puerta y también gritaban. Querían entrar”.
Mientras ellos forcejeaban yo llamo a la policía. Pero lo que pasó fue increíble. Me preguntaban cómo estaban las calles, si había barro, si había alguna calle asfaltada... Yo no podía creer lo que estaba pasando. Nosotros en medio del peligro y esta gente que me hablaba de la lluvia...”, comentó Mayra con preocupación.
“Los tipos se llevaron mi moto que estaba guardada acá adentro del comedor. También dinero en efectivo; ropa nuestra y de la bebé; dos teléfonos celulares. Y todavía no sé bien porque a medida que voy reacomodando todo me doy cuenta de lo que falta”, precisó.
No los pararon
Al cabo de 45 minutos “que nos parecieron eternos” finalmente un patrullero llegó hasta el domicilio de la familia asaltada. Pero las malas noticias continuaron.
“Cuando por fin aparecieron los policías me preguntaron si me habían llevado un secador de pelo, porque ellos habían cruzado a dos vagos que iban en moto llevando un secador. No puedo creer que no los pararon.
“Es decir que vieron a dos tipos en moto, en medio de la tormenta, llevando cosas y no les llamó la atención. Eso es algo que me deja sin palabras”, agregó.
Media hora de terror
“Los tipos estuvieron cerca de media hora acá adentro. Y en ese tramo lo que vivimos fue de terror. Mi hija empezó a llorar porque escuchaba los gritos y los golpes en la puerta. En esos momentos el miedo te enloquece.
Para entrar a la vivienda los delincuentes violentaron la persiana de una ventana.
Aunque tuvieron en cuenta un detalle. “Hasta se tomaron el tiempo de aflojar el foco que tenemos en la puerta, para dejar todo a oscuras”, culminó.
Con información de
ellitoral
