25 DE ABRIL 2024
CÓRDOBA
Ahora se robaron un chaleco de una comisaría
Martes 10 de
Enero 2017
El pertrecho de protección balística desapareció de una sede en Nueva Córdoba. Estaba en una oficina. Se prevén sanciones. Otra vez, un agente ebrio protagonizó serios escándalos con sus pares dentro de un boliche.
Como parte de una extensa serie de escándalos que parecieran no tener freno, un vital pertrecho policial (como lo es un chaleco antibalas) desapareció en los últimos días del interior de una comisaría de Córdoba capital. El implemento se encontraba guardado en una oficina de una dependencia a la que solamente acceden policías, por lo que está descartado de plano que haya sido un simple vecino quien se lo robó.
Más allá del episodio en sí, el tema no es menor si se tiene en cuenta que muchos de esos chalecos antibalas terminan en bandas de delincuentes que cometen violentos asaltos, ya sea en domicilios, en empresas o en las calles de Córdoba, mediante el ardid de falsos allanamientos.
El robo del chaleco antibalas fue confirmado por altas fuentes policiales y judiciales.
Este nuevo escándalo ya está, por un lado, bajo investigación policial; y por el otro, en manos del Tribunal de Conducta Policial, el órgano interno (compuesto por civiles) que investiga y sanciona a los malos uniformados.
Por ahora, no hay sanciones, aunque se descarta que las habrá.
En tanto, y pese a esta preocupante y reiterada sucesión de graves escándalos con policías, no hubo palabra oficial por parte de las autoridades de la fuerza.
El fin de semana, otro oficial fue detenido mientras transitaba (y luego quiso huir) en un auto robado, junto con otros hombres.
¿Alguien sabe? Nadie sabe
La investigación interna permitió determinar que el chaleco antibalas azul con leyenda “Policía de Córdoba” (marca Stopping Power) desapareció el pasado 2 del corriente de la base del Cuerpo de Vigilancia Especial (CVE), de Nueva Córdoba.
Lo último que se sabe es que, al no ser un elemento personal como una pistola reglamentaria, el chaleco antibalas es usado por distintos uniformados. Y todo queda asentado en un libro.
Un oficial lo usó y a la siesta de aquella jornada se lo entregó a un agente que, a su vez, lo llevó hasta la noche en tareas preventivas.
El agente volvió a la comisaría y dejó el chaleco en una mesa, en una oficina. Cuando regresó a buscarlo, ya no estaba. Nadie supo dar respuestas sobre el chaleco.
Policía borracho y preso
Un agente terminó preso en las últimas horas luego de haber protagonizado, de civil, serios incidentes en un boliche del barrio General Paz, de Córdoba. El suboficial llegó a agredir a una policía. Lo llamativo es que este agente, hoy de 31 años, ya había cometido un incidente idéntico hace dos años en otro boliche en el Cerro de las Rosas.
450 policías echados en nueve años en Córdoba. Desde 2007 hasta 2016, unos 450 policías fueron cesanteados (echados) de la fuerza de seguridad por distintos delitos y faltas. Tal como se informó en estas páginas, 39 uniformados fueron echados en el último año, independientemente de lo que resuelva la Justicia. En tanto, hay 200 que permanecen en situación pasiva por sumarios de los últimos tres años.
Más allá del episodio en sí, el tema no es menor si se tiene en cuenta que muchos de esos chalecos antibalas terminan en bandas de delincuentes que cometen violentos asaltos, ya sea en domicilios, en empresas o en las calles de Córdoba, mediante el ardid de falsos allanamientos.
El robo del chaleco antibalas fue confirmado por altas fuentes policiales y judiciales.
Este nuevo escándalo ya está, por un lado, bajo investigación policial; y por el otro, en manos del Tribunal de Conducta Policial, el órgano interno (compuesto por civiles) que investiga y sanciona a los malos uniformados.
Por ahora, no hay sanciones, aunque se descarta que las habrá.
En tanto, y pese a esta preocupante y reiterada sucesión de graves escándalos con policías, no hubo palabra oficial por parte de las autoridades de la fuerza.
El fin de semana, otro oficial fue detenido mientras transitaba (y luego quiso huir) en un auto robado, junto con otros hombres.
¿Alguien sabe? Nadie sabe
La investigación interna permitió determinar que el chaleco antibalas azul con leyenda “Policía de Córdoba” (marca Stopping Power) desapareció el pasado 2 del corriente de la base del Cuerpo de Vigilancia Especial (CVE), de Nueva Córdoba.
Lo último que se sabe es que, al no ser un elemento personal como una pistola reglamentaria, el chaleco antibalas es usado por distintos uniformados. Y todo queda asentado en un libro.
Un oficial lo usó y a la siesta de aquella jornada se lo entregó a un agente que, a su vez, lo llevó hasta la noche en tareas preventivas.
El agente volvió a la comisaría y dejó el chaleco en una mesa, en una oficina. Cuando regresó a buscarlo, ya no estaba. Nadie supo dar respuestas sobre el chaleco.
Policía borracho y preso
Un agente terminó preso en las últimas horas luego de haber protagonizado, de civil, serios incidentes en un boliche del barrio General Paz, de Córdoba. El suboficial llegó a agredir a una policía. Lo llamativo es que este agente, hoy de 31 años, ya había cometido un incidente idéntico hace dos años en otro boliche en el Cerro de las Rosas.
450 policías echados en nueve años en Córdoba. Desde 2007 hasta 2016, unos 450 policías fueron cesanteados (echados) de la fuerza de seguridad por distintos delitos y faltas. Tal como se informó en estas páginas, 39 uniformados fueron echados en el último año, independientemente de lo que resuelva la Justicia. En tanto, hay 200 que permanecen en situación pasiva por sumarios de los últimos tres años.
Con información de
lavoz
