SANTA FE
Dos robos tremendos
Miércoles 21 de
Junio 2017
En barrio Roma, delincuentes desvalijaron la casa de una abogada. En Siete Jefes, otra vivienda sufrió robo y destrozos.
Una abogada padeció anoche su peor pesadilla cuando delincuentes se le ganaron en su domicilio particular en barrio Roma. De la odisea no escaparon sus dos hijos, de 13 y 20 años, que fueron golpeados. Tras amenazar y hostigar a sus víctimas los rufianes robaron pertenencias y huyeron en un vehículo de la profesional.
Eran cerca de las 2 de la madrugada cuando los ladrones ingresaron a la casa de Silvia Martinet (45), en Zavalla al 3300, esto es, frente al hospital Italiano.
* “Estábamos todos durmiendo cuando de pronto siento ruidos en la puerta del dormitorio. Abro los ojos y veo a dos ‘marcianos’. Uno estaba con el casco puesto; el otro era un petiso que se tapaba el rostro con una capucha. ¡Esto es un asalto!, me gritaron”, dijo Silvia Martinet (45, todavía conmocionada en diálogo con El Litoral.
“En eso, escucho que uno de mis hijos, que tiene 13 años, comienza a gritar. El otro, de 20, también. Yo les digo que por favor no les hagan nada. Pero les pegaron a los dos. Después los trajeron conmigo. Me dejaron que me vista y comenzaron a hostigarme. Me pedían plata y joyas. ‘Largá la plata’ me decían”, agregó.
No fue al voleo
La profesional asegura que lo ocurrido no fue al voleo, sino un hecho planificado. Para ello destaca que “no hubo violencia en las puertas. Han entrado con alguna llave maestra o algo similar. Se llevaron computadoras, dos televisores LCD; los celulares; algunas alhajas, en fin... todavía no terminé de revisar. Y cargaron todo en el vehículo de mi pareja, una Renault Kangoo negra. Estaba estacionada frente a la puerta del hospital. Estuvieron media hora cargando cosas. Entraban y salían a cada rato”.
“Querían encerrarnos”
Más adelante, Martinet recordó uno de los peores tramos del hecho, que fue cuando los malvivientes amagaron con secuestrar al menor de sus hijos.
* “Querían encerrarnos con llave pero no pudieron. Después dijeron vamos a llevarnos al más chico así pedimos rescate. Ahí me desesperé y les dije: ¡no, no hagan eso! Llévenme a mí. Por suerte no siguieron con esa idea”.
Me voy
“Éste es el tercer robo que sufro en 6 meses”, reveló Martinet. “Hace un mes y medio agarré a un tipo in fraganti acá en mi casa. Hice la denuncia en la 4ª pero no pasó nada. Y en enero sufrí otro robo. Ahora a tomé la decisión de irme, no me quedo más acá. Vivir así es un infierno. No se puede más seguir así”, sentenció.
Otro golpe en Siete Jefes
En medio de la noche, se escucha el estruendo contra una ventana y los vidrios que se rompen.
Entredormidos y aterrados, los dueños de casa alcanzan a asomarse y ven dentro de su living la silueta de varios individuos. Las víctimas optan por encerrarse en un cuarto y desde allí pedir auxilio al 911.
Los minutos corren y, tal como si nada hubiese ocurrido, los desconocidos aprovechan para cargar un televisor LED y darse a la fuga.
Algunos minutos después la policía llega hasta el lugar del hecho, en Pedro Ferré al 900, en pleno barrio Siete Jefes.
Los actuantes constatan la rotura de una ventana y la sustracción del electrodoméstico. Finalmente, el patrullero se pierde en medio de la noche.
Eran cerca de las 2 de la madrugada cuando los ladrones ingresaron a la casa de Silvia Martinet (45), en Zavalla al 3300, esto es, frente al hospital Italiano.
* “Estábamos todos durmiendo cuando de pronto siento ruidos en la puerta del dormitorio. Abro los ojos y veo a dos ‘marcianos’. Uno estaba con el casco puesto; el otro era un petiso que se tapaba el rostro con una capucha. ¡Esto es un asalto!, me gritaron”, dijo Silvia Martinet (45, todavía conmocionada en diálogo con El Litoral.
“En eso, escucho que uno de mis hijos, que tiene 13 años, comienza a gritar. El otro, de 20, también. Yo les digo que por favor no les hagan nada. Pero les pegaron a los dos. Después los trajeron conmigo. Me dejaron que me vista y comenzaron a hostigarme. Me pedían plata y joyas. ‘Largá la plata’ me decían”, agregó.
No fue al voleo
La profesional asegura que lo ocurrido no fue al voleo, sino un hecho planificado. Para ello destaca que “no hubo violencia en las puertas. Han entrado con alguna llave maestra o algo similar. Se llevaron computadoras, dos televisores LCD; los celulares; algunas alhajas, en fin... todavía no terminé de revisar. Y cargaron todo en el vehículo de mi pareja, una Renault Kangoo negra. Estaba estacionada frente a la puerta del hospital. Estuvieron media hora cargando cosas. Entraban y salían a cada rato”.
“Querían encerrarnos”
Más adelante, Martinet recordó uno de los peores tramos del hecho, que fue cuando los malvivientes amagaron con secuestrar al menor de sus hijos.
* “Querían encerrarnos con llave pero no pudieron. Después dijeron vamos a llevarnos al más chico así pedimos rescate. Ahí me desesperé y les dije: ¡no, no hagan eso! Llévenme a mí. Por suerte no siguieron con esa idea”.
Me voy
“Éste es el tercer robo que sufro en 6 meses”, reveló Martinet. “Hace un mes y medio agarré a un tipo in fraganti acá en mi casa. Hice la denuncia en la 4ª pero no pasó nada. Y en enero sufrí otro robo. Ahora a tomé la decisión de irme, no me quedo más acá. Vivir así es un infierno. No se puede más seguir así”, sentenció.
Otro golpe en Siete Jefes
En medio de la noche, se escucha el estruendo contra una ventana y los vidrios que se rompen.
Entredormidos y aterrados, los dueños de casa alcanzan a asomarse y ven dentro de su living la silueta de varios individuos. Las víctimas optan por encerrarse en un cuarto y desde allí pedir auxilio al 911.
Los minutos corren y, tal como si nada hubiese ocurrido, los desconocidos aprovechan para cargar un televisor LED y darse a la fuga.
Algunos minutos después la policía llega hasta el lugar del hecho, en Pedro Ferré al 900, en pleno barrio Siete Jefes.
Los actuantes constatan la rotura de una ventana y la sustracción del electrodoméstico. Finalmente, el patrullero se pierde en medio de la noche.
Con información de
ellitoral
