SANTA FE
Noche agitada en Sargento Cabral
Martes 01 de
Agosto 2017
Un intruso logró “colarse” en tres casas. Tenía preparado varios bolsos pero, en el apuro de la fuga, sólo se llevó una bicicleta.
Eran cerca de las 3 cuando una mujer despertó por los ruidos que venían desde el patio su casa, en Quintana al 1900.
Con lógico temor, la vecina salió de su dormitorio para averiguar qué estaba pasando. Fue entonces cuando, en medio de la oscuridad, alcanzó a observar la silueta de un hombre que forzaba una de las ventanas de la propiedad.
“Traté de mantener la mayor calma posible, pero como pude llamé a la policía y le pedí que vengan lo más rápido posible”, dijo hoy a El Litoral.
A los pocos minutos un patrullero del Comando Radioeléctrico llegó al lugar. Sin embargo, los uniformados no pudieron encontrar nada. Esto fue así porque el malviviente, rápido de reflejos, ya había abandonado dicho lugar para cruzarse a una vivienda vecina.
En este segundo inmueble el intruso permaneció durante más de 2 horas, tiempo durante el cual violentó otras aberturas y requisó las dependencias de la casa.
No conforme con lo hecho hasta allí, poco después se animó a cometer el tercer ingreso a un inmueble de la cuadra.
Pero a diferencia de los casos precedentes, esta última incursión fue advertida por algunos testigos que nuevamente llamaron a la policía.
Así las cosas, minutos después de las 6, la cuadra de Quintana al 1900 se vio alterada por el arribo de numerosos patrulleros, algunos del Comando Radioeléctrico además del móvil de la Seccional 5ta. que corresponde por jurisdicción.
Tamaño despliegue puso en fuga al delincuente que, pese a estar rodeado, logró burlar el cerco policial y escapar a la carrera.
Según se supo en una de las viviendas “visitadas” el rufián se dejó varios bolsos con pertenencias de las víctimas. No obstante trascendió que alcanzó a llevarse una bicicleta.
Esta mañana los vecinos de la cuadra manifestaron su preocupación por los hechos acontecidos y reclamaron por mayor vigilancia, sobre todo en horario nocturno.
Con lógico temor, la vecina salió de su dormitorio para averiguar qué estaba pasando. Fue entonces cuando, en medio de la oscuridad, alcanzó a observar la silueta de un hombre que forzaba una de las ventanas de la propiedad.
“Traté de mantener la mayor calma posible, pero como pude llamé a la policía y le pedí que vengan lo más rápido posible”, dijo hoy a El Litoral.
A los pocos minutos un patrullero del Comando Radioeléctrico llegó al lugar. Sin embargo, los uniformados no pudieron encontrar nada. Esto fue así porque el malviviente, rápido de reflejos, ya había abandonado dicho lugar para cruzarse a una vivienda vecina.
En este segundo inmueble el intruso permaneció durante más de 2 horas, tiempo durante el cual violentó otras aberturas y requisó las dependencias de la casa.
No conforme con lo hecho hasta allí, poco después se animó a cometer el tercer ingreso a un inmueble de la cuadra.
Pero a diferencia de los casos precedentes, esta última incursión fue advertida por algunos testigos que nuevamente llamaron a la policía.
Así las cosas, minutos después de las 6, la cuadra de Quintana al 1900 se vio alterada por el arribo de numerosos patrulleros, algunos del Comando Radioeléctrico además del móvil de la Seccional 5ta. que corresponde por jurisdicción.
Tamaño despliegue puso en fuga al delincuente que, pese a estar rodeado, logró burlar el cerco policial y escapar a la carrera.
Según se supo en una de las viviendas “visitadas” el rufián se dejó varios bolsos con pertenencias de las víctimas. No obstante trascendió que alcanzó a llevarse una bicicleta.
Esta mañana los vecinos de la cuadra manifestaron su preocupación por los hechos acontecidos y reclamaron por mayor vigilancia, sobre todo en horario nocturno.
Con información de
ellitoral