ENTRE RÍOS
Padre e hijo abusaban de una chica de 14 años: un caso que conmovió a Victoria
Jueves 17 de
Agosto 2017
El hecho, que ocurrió en una chacra del Quinto Cuartel, en 2011, tuvo una instancia de apelación en el Juzgado de Gualeguay.
El caso de "Los Benítez" (padre e hijo), quienes abusaron sexualmente de una adolescente de 14 años que era entregada por su propia madre, tuvo una instancia de apelación en el Juzgado de Gualeguay.
El hecho, que se conoció en 2011 cuando la joven tenía 14 años, ocurrió en una chacra del Quinto Cuartel, en Victoria.
En ese momento, tomó estado judicial involucrando a la Defensoría de Menores, y tras un pormenorizado análisis que sumó a un equipo interdisciplinario entre los que se cuentan psicólogos y psiquiatras, la Unidad Fiscal (UFI) se logró reunir elementos probatorios para imputar a Raúl Francisco Benítez y a su padre Raúl Benjamín Benítez por abuso sexual, 'con acceso carnal en el primer caso', y 'simple en forma reiterado' (Expte. Nº 18085, Fº13, L.E.16) respectivamente.
En los últimos días hubo apelación al dictamen de la Cámara en lo Criminal con asiento en la ciudad de Gualeguay. La sentencia, que aún no está firme, condena al primero a una pena de 6 años y medio de prisión, dos años de cumplimiento efectivo al segundo, y tres años en suspenso a la madre de la joven, por 'cooperación en abuso sexual'.
El caso
Todo comenzó cuando Benítez le prestó al padrastro de la menor esta casa de la chacra, donde tenía cría de animales y visitaba el lugar con regularidad, junto a su hijo, oportunidad en la cual concretaban los abusos.
Se atribuye a la madre de la chica haber cooperado con el hijo de Benítez, para que este pudiera abusar sexualmente de ella, y era propiciadora de los encuentros. A cambio "se les permitía seguir viviendo en la chacra, más regalos que le habría realizado Raúl Benítez como contraprestación por los actos de abuso que realizaba en perjuicio de la menor", según el expediente al que accedió Paralelo 32.
La joven, que ahora tiene 20 años, contó lo que sucedía a una maestra de la escuela a la que concurría en ese momento. La primera vez que fue obligada a tener relaciones con Benítez hijo fue en un auto y fue su propia madre quien la mandó de paseo con el abusador. Por otra parte, cuando la chica regresó abusada y le contó lo que había pasado le dijo "que se"fuera y que la dejara dormir".
En la causa también testificó a una agente sanitaria que concurría a la escuela donde la menor asistía. Tras la denuncia, María fue traslada al Hogar de Niñas María de Basualdo, mientras se sustanciaba la investigación que arrojaría la corresponsabilidad de los Benítez y de la propia madre de la menor abusada y de la complicidad del padrastro.
Un hecho más de extorsión que figura en el expediente es que Benítez padre, le prometía a la joven que si se 'portaba bien' y accedía a sus impulsos, le dejaría esa parcela para ella y los suyos. También surgió que los hermanos menores de la joven también estaban siendo víctima de tocamientos y abusos por parte de "Los Benítez".
El hecho, que se conoció en 2011 cuando la joven tenía 14 años, ocurrió en una chacra del Quinto Cuartel, en Victoria.
En ese momento, tomó estado judicial involucrando a la Defensoría de Menores, y tras un pormenorizado análisis que sumó a un equipo interdisciplinario entre los que se cuentan psicólogos y psiquiatras, la Unidad Fiscal (UFI) se logró reunir elementos probatorios para imputar a Raúl Francisco Benítez y a su padre Raúl Benjamín Benítez por abuso sexual, 'con acceso carnal en el primer caso', y 'simple en forma reiterado' (Expte. Nº 18085, Fº13, L.E.16) respectivamente.
En los últimos días hubo apelación al dictamen de la Cámara en lo Criminal con asiento en la ciudad de Gualeguay. La sentencia, que aún no está firme, condena al primero a una pena de 6 años y medio de prisión, dos años de cumplimiento efectivo al segundo, y tres años en suspenso a la madre de la joven, por 'cooperación en abuso sexual'.
El caso
Todo comenzó cuando Benítez le prestó al padrastro de la menor esta casa de la chacra, donde tenía cría de animales y visitaba el lugar con regularidad, junto a su hijo, oportunidad en la cual concretaban los abusos.
Se atribuye a la madre de la chica haber cooperado con el hijo de Benítez, para que este pudiera abusar sexualmente de ella, y era propiciadora de los encuentros. A cambio "se les permitía seguir viviendo en la chacra, más regalos que le habría realizado Raúl Benítez como contraprestación por los actos de abuso que realizaba en perjuicio de la menor", según el expediente al que accedió Paralelo 32.
La joven, que ahora tiene 20 años, contó lo que sucedía a una maestra de la escuela a la que concurría en ese momento. La primera vez que fue obligada a tener relaciones con Benítez hijo fue en un auto y fue su propia madre quien la mandó de paseo con el abusador. Por otra parte, cuando la chica regresó abusada y le contó lo que había pasado le dijo "que se"fuera y que la dejara dormir".
En la causa también testificó a una agente sanitaria que concurría a la escuela donde la menor asistía. Tras la denuncia, María fue traslada al Hogar de Niñas María de Basualdo, mientras se sustanciaba la investigación que arrojaría la corresponsabilidad de los Benítez y de la propia madre de la menor abusada y de la complicidad del padrastro.
Un hecho más de extorsión que figura en el expediente es que Benítez padre, le prometía a la joven que si se 'portaba bien' y accedía a sus impulsos, le dejaría esa parcela para ella y los suyos. También surgió que los hermanos menores de la joven también estaban siendo víctima de tocamientos y abusos por parte de "Los Benítez".
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