SANTA FE
Les llevaron hasta el inodoro
Vecinas de Santa Rita II denuncian que hay una ola de robos y saqueos
Viernes 02 de
Febrero 2018
Un grupo de mujeres que habita el barrio Santa Rita II está desesperado. Es que desde hace un tiempo, las vecinas son víctimas de innumerables hechos delictivos. “Todos los días entran a robarnos en nuestras casas, nos rompen las puertas y nos sacan las rejas”, contaron alarmadas.
Hace un par de años, el gobierno provincial asignó cuatro viviendas a personas que padecieron algún tipo de vulneración de sus derechos —en general mujeres— en la parte nueva de este barrio del norte de la ciudad, en el marco del programa Mi Tierra, Mi Casa. Están ubicadas en las calles Servando Bayo y Doldán al 10.000.
Santa Rita II fue uno de los barrios usurpados en 2012 y hoy -con las viviendas recuperadas y entregadas a nuevos adjudicatarios- sigue siendo tierra de nadie. Mientras las familias se aferran a lo poco que tienen, un grupo de oportunistas entran a sus viviendas y se llevan todo. Así, el sueño de la casa propia se convirtió en un infierno. La inseguridad les azota la puerta permanentemente.
Pero no es lo único. Las vecinas solicitan con urgencia que se presten en la zona servicios básicos, como desmalezamiento, limpieza y recolección de basura; y que instalen un centro de atención primaria y un destacamento policial.
Seguidilla de robos
“Hace un mes entraron a mi casa. Se llevaron televisión, computadora, microondas y la cama”, comentó Alejandra Ironici, vecina del barrio, cansada de vivir con temor y preocupación por no saber con qué se encontrará cuando regrese a su casa, luego de una jornada laboral. “Ya no se puede vivir así, rodeado de pastizal y en penumbras”, dijo.
El pasado viernes 26 por la madrugada, Elsa Figueroa fue otra víctima. “Nos forcejearon las rejas, intentaron entrar por la ventana pero como no pudieron nos rompieron la puerta de entrada. Me robaron la heladera, mesa, sillas, cocina, garrafa, una pava eléctrica, camas, bidet, inodoro. Me desvalijaron la casa”, relató. Y encima la policía atendió a su llamado tras dos horas de insistencia. Según le explicaron “no tenían móvil policial ni personal para dirigirse hasta el lugar. Tomaron una constancia de lo ocurrido y nos prometieron que iban a realizar tareas de patrullajes más exhaustivas por el barrio. Desde ese día no lo vimos más por acá”, dijo Elsa.
Cristina Figueroa es otra mujer que vive en Santa Rita II y alza su voz en repudio a esta situación. “La mayoría de las casas tienen rejas y las que no, quienes las habitan tienen que estar ahí porque te descuidas y te entran a robar”, aseguró.
Las vecinas lamentan vivir en una zona carente de servicios básicos y olvidada por todos. “La policía viene cuando la llamamos porque nos robaron algo o porque vemos movimientos raros, sospechosos”, sostuvieron.
Excluidos
Por otra parte, Alejandra Ironici destacó que lo que se reclama es un proyecto de urbanización integral. “El barrio está excluido de toda política de urbanización. Las políticas de seguridad van de la mano de un proyecto de urbanización”, manifestó. También destacó que es “una situación de emergencia, de extrema vulnerabilidad porque es imposible continuar viviendo en estas condiciones”.
El martes pasado, en nombre de todas las vecinas, presentó una nota en la Dirección Provincial de Vivienda y Urbanismo, mediante la cual solicita una respuesta inmediata a todos los problemas.
Santa Rita II fue uno de los barrios usurpados en 2012 y hoy -con las viviendas recuperadas y entregadas a nuevos adjudicatarios- sigue siendo tierra de nadie. Mientras las familias se aferran a lo poco que tienen, un grupo de oportunistas entran a sus viviendas y se llevan todo. Así, el sueño de la casa propia se convirtió en un infierno. La inseguridad les azota la puerta permanentemente.
Pero no es lo único. Las vecinas solicitan con urgencia que se presten en la zona servicios básicos, como desmalezamiento, limpieza y recolección de basura; y que instalen un centro de atención primaria y un destacamento policial.
Seguidilla de robos
“Hace un mes entraron a mi casa. Se llevaron televisión, computadora, microondas y la cama”, comentó Alejandra Ironici, vecina del barrio, cansada de vivir con temor y preocupación por no saber con qué se encontrará cuando regrese a su casa, luego de una jornada laboral. “Ya no se puede vivir así, rodeado de pastizal y en penumbras”, dijo.
El pasado viernes 26 por la madrugada, Elsa Figueroa fue otra víctima. “Nos forcejearon las rejas, intentaron entrar por la ventana pero como no pudieron nos rompieron la puerta de entrada. Me robaron la heladera, mesa, sillas, cocina, garrafa, una pava eléctrica, camas, bidet, inodoro. Me desvalijaron la casa”, relató. Y encima la policía atendió a su llamado tras dos horas de insistencia. Según le explicaron “no tenían móvil policial ni personal para dirigirse hasta el lugar. Tomaron una constancia de lo ocurrido y nos prometieron que iban a realizar tareas de patrullajes más exhaustivas por el barrio. Desde ese día no lo vimos más por acá”, dijo Elsa.
Cristina Figueroa es otra mujer que vive en Santa Rita II y alza su voz en repudio a esta situación. “La mayoría de las casas tienen rejas y las que no, quienes las habitan tienen que estar ahí porque te descuidas y te entran a robar”, aseguró.
Las vecinas lamentan vivir en una zona carente de servicios básicos y olvidada por todos. “La policía viene cuando la llamamos porque nos robaron algo o porque vemos movimientos raros, sospechosos”, sostuvieron.
Excluidos
Por otra parte, Alejandra Ironici destacó que lo que se reclama es un proyecto de urbanización integral. “El barrio está excluido de toda política de urbanización. Las políticas de seguridad van de la mano de un proyecto de urbanización”, manifestó. También destacó que es “una situación de emergencia, de extrema vulnerabilidad porque es imposible continuar viviendo en estas condiciones”.
El martes pasado, en nombre de todas las vecinas, presentó una nota en la Dirección Provincial de Vivienda y Urbanismo, mediante la cual solicita una respuesta inmediata a todos los problemas.
Con información de
El Litoral