Cada vez con más temor de que lo que escucharon fuera verdad, los adultos fueron en primer lugar al Jardín de Infantes a pedir explicaciones. Y en cuestión de minutos, siguieron por la comisaría cuarta, donde dejaron radicada la denuncia.
 
Se trata de un nuevo caso de presunto abuso sexual -del que habrían sido víctimas cuatro menores- a manos de un docente. El escenario del supuesto ataque, según denunciaron los padres, habría sido el Jardín de Infantes Nº 914, ubicado en 22 y 42, y dependiente de la escuela Gral. San Martín, ubicada al lado.
 
El miércoles pasado comenzó todo cuando una nena de cuatro años (los nombres de los menores involucrados se preservan por cuestiones legales) le comentó a su mamá, en medio de una charla más, que el profesor de música “le hacía cosquillas y la abrazaba”.
 
Claro que ese era el comienzo de lo que luego enardeció a los padres. Siempre de acuerdo a lo relatado por los mayores, la menor siguió diciendo que el docente le rozaba el cuerpo con algunos instrumentos musicales, y comenzó de inmediato la sospecha de los supuestos abusos.
 
La reacción de la mujer fue inmediata: comenzó a llamar a los padres de los otros niños, en el orden de la lista alfabética.
 
En un primer momento, ninguno de ellos afirmó haber escuchado algo así de boca de sus hijos. “Era difícil para nosotros sacarles el tema. Pero tanto yo como otros tres padres más nos fuimos enterando de que les hacían cosas parecidas”, le explicó a EL DIA una de las madres que hizo la denuncia penal.
 
HABLAN DE AL MENOS 4 CASOS
 
Al parecer, las frases que oían los fueron tomando por sorpresa, al tiempo que les provocaban “mucha bronca”. En total, dijeron, serían cuatro los menores presuntamente atacados.
 
“Mi hijo me dijo que el profesor le bajaba los pantalones, que lo tocaba y le proponía algunos ‘juegos’ sexuales, mientras abría la boca”, continuó la mujer, que pidió reserva de su identidad.
 
“Esto lo hago porque los quiero mucho. No le digas nada a tus papás porque se van a enojar”, habrían sido las palabras del docente que ahora está en la mira, siempre según el relato de los padres.
 
“Costó mucho que los nenes quisieran hablar porque muchos lo justifican y lo defienden, porque lo ven como alguien bueno”, aseguró otra de las mamás.
 
Después de que más de una decena de padres se reuniera en la comisaría 4ª para denunciar estos casos, la fiscalía a cargo de Alvaro Garganta ordenó que cada uno de los menores que habría sufrido esos abusos sea entrevistado por un psicólogo.
 
El objetivo será esclarecer la veracidad de los dichos de los nenes, además de corroborar si tienen algún tipo de lesión corporal que ratifique las sospechas.
 
Poco antes de la presentación policial, los mismos padres habían ido al jardín para exigirle a las autoridades que les “dieran explicaciones”.
 
En el medio del intercambio con los responsables de esa entidad educativa, a los padres les indicaron que el docente habría quedado apartado de sus funciones, aunque esta información no fue confirmada con las autoridades educativas.