Por cruces por el agravamiento de penas y la prevención, se traba en Diputados la ley de barras
Miércoles 20 de
Marzo 2019
La ley de barras que promueve el oficialismo volvió a trabarse en Diputados, tras no conseguir dictamen, en medio de cruces con la oposición por el agravamiento de penas, la prevención y la falta de consulta a actores centrales del mundo futbolístico implicados en el proyecto.
Luego de que la iniciativa que envió el Ejecutivo al Congreso, tras los incidentes en el Superclásico entre River y Boca, fuese aprobada en diciembre en general, pero fracasara en su tratamiento en particular, el debate fue retomado este martes en las comisiones de Legislación Penal y Deportes, con la presencia de sus titulares Gabriela Burgos y Daniel Scioli.
Al abrir el debate, Burgos ya hizo mención a las diferencias existentes en torno al borrador del dictamen que había elaborado y puesto a circular desde el pasado jueves. “Yo sé que hay puntos conflictivos. El proyecto original tenía 30 artículos este tiene 46. Hay muestras probadas de esta Presidencia de poder llegar a un consenso para lograr un dictamen. Yo no voy a poner en duda que puedan existir legisladores que estén a favor de la violencia en el fútbol”, señaló.
En tanto, Scioli destacó que con respecto a la violencia en el fútbol comparten “la misma preocupación, aunque con miradas diferentes”. “Queda claro que el Ejecutivo ha puesto mucho énfasis en el agravamiento de las penas, pero lo que nosotros pedimos que se tenga en cuenta es un régimen integral para la prevención de la seguridad en el deporte”, expresó, al destacar que su bloque presentó un dictamen que hace hincapié en este punto.
Además, mostró su preocupación por la “desproporción de las penas”. “Uno que revolee una botella puede llegar a tener ocho años, al igual que un homicidio”, ejemplificó.
Por su parte, el diputado Andrés Vallone, del justicialismo de San Luis, pidió “no cometer el mismo error de diciembre de querer avanzar en una ley por la coyuntura sin escuchar a los actores, a los clubes o al Ministerio de Seguridad”. “Hay que analizar la aplicabilidad de este proyecto en el interior y en los pequeños clubes”, agregó.
A su turno, Facundo Moyano, de Red Argentina, calificó el proyecto de “oportunista y punitivista” y criticó el artículo que establece la incompatibilidad para que dirigentes de clubes y de la Asociaciones del Fútbol Argentino ejerzan cargos públicos. Si bien, se manifestó de acuerdo, sostuvo que esto no debería ser “exclusivo del fútbol, sino de todos los deportes”.
El clima se enrareció cuando el diputado de Cambiemos, Fernando Iglesias tomó la palabra. “No hablen de oportunismo político”, dijo, al tiempo que agregó “acá no hay nadie del bloque de Lousteau que fue quien frenó la ley en diciembre”.
Además, después de acusar al diputado del FpV Horacio Pietragalla de haberlo llamado “forro” fuera de micrófono y de cruzarse con su compañero de bancada, Rodolfo Tailhade, lanzó: “Nos quieren meter otra vez el cuento de la buena pipa. Tenemos un dictamen votado con 201 votos positivos y ninguno negativo. ¡Nunca he visto una cosa igual!”
El diputado entrerriano del FpV, Julio Solanas, destacó a su turno la “incongruencia” de estar debatiendo una ley de barras bravas cuando este año el Gobierno eliminó por el DNU 92/19 la Secretaría de Deportes.
La legisladora jujeña del interbloque Argentina Federal, Carolina Moisés, por su parte, reclamó que se tenga en cuenta la situación de los más de 3000 clubes del interior del país. “Lamento que haya diputados que crean que el país se acaba en la General Paz”, expresó y justificó que en diciembre la ley se votó en general, pero que allí mismo los diputados expresaron sus dudas al no aprobarla en particular. “El papelón no es nuestro, es de ustedes porque traen un proyecto que es insostenible”, agregó.
La situación volvió a tensarse cuando el diputado Iglesias la llamó “tonta”. Moisés recogió el guante: “¿Quién sos vos para decirme tonta? Fui presidenta de un club de fútbol durante seis años. Que un diputado me diga tonta no me afecta en lo más mínimo”.
Otro punto en debate fue el de las avalanchas, el proyecto prevé penas de prisión de uno a tres años “al que por cualquier medio provocare una avalancha”. El artículo fue criticado por la oposición por considerar casi imposible determinar el autor o los autores de un evento masivo como el que se desarrolla en las tribunas.
Por último, el oficialista Luis Petri pidió “tomar una decisión política contra los barras”. “Lo que no podemos es seguir poniendo excusas. Necesitamos agravar las penas porque tenemos organizaciones criminales constituidas. Estamos tratando de cortar con esta ley el poder económico de las cajas que permiten que los barras bravas sigan operando”, señaló y le reclamó “voluntad política a la oposición”.
Finalizada la reunión, la presidenta de la comisión llamó a un cuarto intermedio hasta el jueves a las 15 y anunció para este miércoles una reunión de asesores para seguir trabajando el texto.
El diálogo con ámbito.com, confirmó que “en principio” sigue en pie la fecha del 27 de marzo para llevar la iniciativa al recinto.
Al abrir el debate, Burgos ya hizo mención a las diferencias existentes en torno al borrador del dictamen que había elaborado y puesto a circular desde el pasado jueves. “Yo sé que hay puntos conflictivos. El proyecto original tenía 30 artículos este tiene 46. Hay muestras probadas de esta Presidencia de poder llegar a un consenso para lograr un dictamen. Yo no voy a poner en duda que puedan existir legisladores que estén a favor de la violencia en el fútbol”, señaló.
En tanto, Scioli destacó que con respecto a la violencia en el fútbol comparten “la misma preocupación, aunque con miradas diferentes”. “Queda claro que el Ejecutivo ha puesto mucho énfasis en el agravamiento de las penas, pero lo que nosotros pedimos que se tenga en cuenta es un régimen integral para la prevención de la seguridad en el deporte”, expresó, al destacar que su bloque presentó un dictamen que hace hincapié en este punto.
Además, mostró su preocupación por la “desproporción de las penas”. “Uno que revolee una botella puede llegar a tener ocho años, al igual que un homicidio”, ejemplificó.
Por su parte, el diputado Andrés Vallone, del justicialismo de San Luis, pidió “no cometer el mismo error de diciembre de querer avanzar en una ley por la coyuntura sin escuchar a los actores, a los clubes o al Ministerio de Seguridad”. “Hay que analizar la aplicabilidad de este proyecto en el interior y en los pequeños clubes”, agregó.
A su turno, Facundo Moyano, de Red Argentina, calificó el proyecto de “oportunista y punitivista” y criticó el artículo que establece la incompatibilidad para que dirigentes de clubes y de la Asociaciones del Fútbol Argentino ejerzan cargos públicos. Si bien, se manifestó de acuerdo, sostuvo que esto no debería ser “exclusivo del fútbol, sino de todos los deportes”.
El clima se enrareció cuando el diputado de Cambiemos, Fernando Iglesias tomó la palabra. “No hablen de oportunismo político”, dijo, al tiempo que agregó “acá no hay nadie del bloque de Lousteau que fue quien frenó la ley en diciembre”.
Además, después de acusar al diputado del FpV Horacio Pietragalla de haberlo llamado “forro” fuera de micrófono y de cruzarse con su compañero de bancada, Rodolfo Tailhade, lanzó: “Nos quieren meter otra vez el cuento de la buena pipa. Tenemos un dictamen votado con 201 votos positivos y ninguno negativo. ¡Nunca he visto una cosa igual!”
El diputado entrerriano del FpV, Julio Solanas, destacó a su turno la “incongruencia” de estar debatiendo una ley de barras bravas cuando este año el Gobierno eliminó por el DNU 92/19 la Secretaría de Deportes.
La legisladora jujeña del interbloque Argentina Federal, Carolina Moisés, por su parte, reclamó que se tenga en cuenta la situación de los más de 3000 clubes del interior del país. “Lamento que haya diputados que crean que el país se acaba en la General Paz”, expresó y justificó que en diciembre la ley se votó en general, pero que allí mismo los diputados expresaron sus dudas al no aprobarla en particular. “El papelón no es nuestro, es de ustedes porque traen un proyecto que es insostenible”, agregó.
La situación volvió a tensarse cuando el diputado Iglesias la llamó “tonta”. Moisés recogió el guante: “¿Quién sos vos para decirme tonta? Fui presidenta de un club de fútbol durante seis años. Que un diputado me diga tonta no me afecta en lo más mínimo”.
Otro punto en debate fue el de las avalanchas, el proyecto prevé penas de prisión de uno a tres años “al que por cualquier medio provocare una avalancha”. El artículo fue criticado por la oposición por considerar casi imposible determinar el autor o los autores de un evento masivo como el que se desarrolla en las tribunas.
Por último, el oficialista Luis Petri pidió “tomar una decisión política contra los barras”. “Lo que no podemos es seguir poniendo excusas. Necesitamos agravar las penas porque tenemos organizaciones criminales constituidas. Estamos tratando de cortar con esta ley el poder económico de las cajas que permiten que los barras bravas sigan operando”, señaló y le reclamó “voluntad política a la oposición”.
Finalizada la reunión, la presidenta de la comisión llamó a un cuarto intermedio hasta el jueves a las 15 y anunció para este miércoles una reunión de asesores para seguir trabajando el texto.
El diálogo con ámbito.com, confirmó que “en principio” sigue en pie la fecha del 27 de marzo para llevar la iniciativa al recinto.
Con información de
Ámbito
