Sauce Viejo: por la inseguridad, los chicos se quedan sin comer
Viernes 03 de
Mayo 2019
"Señor, ¿hoy abre el comedor?", fue la pregunta que recibió el movilero de LT10 en la puerta de la escuela Presidente Perón de Sauce Viejo. Y la respuesta es "no": no hay clases, y no se puede dar de comer a los chicos. Por una cuestión de seguridad, el establecimiento debió cerrar sus puertas en la tarde del jueves.
Es luego de una nueva balacera que se produjo ayer al mediodía en la vereda de la institución, a la hora de salida de los alumnos. Son dos familias en disputa, aseguran los vecinos, que tienen por costumbre dirimir sus diferencias a los tiros y en cualquier momento del día. Mientras tanto, paradójicamente, había una reunión en la comisaría para tratar el tema.
"Fue horrible. Estábamos todos en la comisaría: docentes, directivos del gobierno comunal, el subcomisario Morales, los padres, y ellos sin piedad y sin respeto se acercaron hasta donde estábamos manifestándonos, se empezaron a insultar entre ellos, se fueron caminando amenazándose hasta la esquina de la escuela, y ahí nomás empezaron a los tiros. Los chicos que salían de la escuela con los padres, los padres desesperados buscando los chicos, nosotros metiendo los chicos adentro de la comisaría", relató a Primera Tarde una mamá.
No era la primera experiencia de ese tipo: el domingo 28 de abril, mientras se realizaban los comicios, las mismas dos bandas antagónicas tuvieron en vilo a los votantes y autoridades que estaban dentro de la Perón. Y el lunes 29 volvieron a enfrentarse. Así, en cuatro días, protagonizaron tres tiroteos.
Este viernes, Adelina Oeste amaneció con una presencia policial inusual: caminantes, patrullaje, custodia en la puerta de la escuela. Hasta efectivos de Gendarmería se apersonaron en el barrio. Ya desde el Ministerio de Seguridad se había asegurado que se tomarían medidas inmediatas.
Los uniformados dan cierta tranquilidad, dicen los vecinos. Pero también exigen soluciones de fondo a la situación. Para que los chicos puedan volver a la escuela. A estudiar, a aprender, y también a comer.
"Fue horrible. Estábamos todos en la comisaría: docentes, directivos del gobierno comunal, el subcomisario Morales, los padres, y ellos sin piedad y sin respeto se acercaron hasta donde estábamos manifestándonos, se empezaron a insultar entre ellos, se fueron caminando amenazándose hasta la esquina de la escuela, y ahí nomás empezaron a los tiros. Los chicos que salían de la escuela con los padres, los padres desesperados buscando los chicos, nosotros metiendo los chicos adentro de la comisaría", relató a Primera Tarde una mamá.
No era la primera experiencia de ese tipo: el domingo 28 de abril, mientras se realizaban los comicios, las mismas dos bandas antagónicas tuvieron en vilo a los votantes y autoridades que estaban dentro de la Perón. Y el lunes 29 volvieron a enfrentarse. Así, en cuatro días, protagonizaron tres tiroteos.
Este viernes, Adelina Oeste amaneció con una presencia policial inusual: caminantes, patrullaje, custodia en la puerta de la escuela. Hasta efectivos de Gendarmería se apersonaron en el barrio. Ya desde el Ministerio de Seguridad se había asegurado que se tomarían medidas inmediatas.
Los uniformados dan cierta tranquilidad, dicen los vecinos. Pero también exigen soluciones de fondo a la situación. Para que los chicos puedan volver a la escuela. A estudiar, a aprender, y también a comer.
Con información de
LT10
