La nueva MacBook Pro de Apple: rápida y ligera pero no para todo el mundo
Viernes 18 de
Noviembre 2016
La nueva versión de las MacBook Pro tiene un solo tipo de puerto de conexión, distinto a la variedad que tenían antes. Esto obligará a los usuarios a comprar adaptadores para conectar los aparatos que utilizan diferentes tipos de conectores.
En el teclado, Apple también remplazó la hilera superior de botones físicos, incluida la tecla “Escape”, con una banda virtual sensible al tacto llamada Touch Bar.
¿Los beneficios? Las nuevas computadoras portátiles son más rápidas, delgadas y ligeras que las de la generación anterior y las baterías tienen casi diez horas de vida. Los botones virtuales de la Touch Bar se transforman según la aplicación que se esté utilizando, lo que permitirá a los creadores de software hacer atajos personalizados.
En el periodo de dos semanas que estuve recogiendo las impresiones sobre estas computadoras entre ingenieros y profesionales de la tecnología, pude probar las nuevas MacBook Pro, las cuales cuestan entre 1500 y 2800 dólares, según el modelo. Concluí que, aunque las nuevas computadoras portátiles son bastante eficientes para muchos profesionales, no hay prisa por comprar una.
Esto es lo mejor y lo peor de las nuevas MacBook Pro:
USB-C: A coleccionar adaptadores
En las nuevas computadoras portátiles, Apple utilizó únicamente la siguiente generación de puertos USB: USB-C. Se espera que en los próximos años esta conexión pequeña y ovalada remplace al voluminoso puerto rectangular conocido como USB-A en muchos dispositivos y accesorios de cómputo.
En las pruebas que realicé en las MacBook Pro, el mayor reto fue que solo hubiera puertos USB-C. Los modelos anteriores tenían USB-A y algunos otros tipos de puertos, entre ellos el HDMI, para conectar dispositivos como impresoras y monitores. Ahora, los puertos USB-C serán la única alternativa para conectar casi todo a la computadora portátil, desde cargadores y pantallas adicionales hasta lectores de tarjetas de fotos. Las MacBook Pro más austeras tienen dos puertos USB-C y los modelos de mayor calidad incluyen cuatro.
Esto quiere decir que en el futuro inmediato habrá que comprar adaptadores para enchufar dispositivos con diferentes conectores. Lo molesto es que uno de estos es el cable de corriente del iPhone, que tiene un conector USB-A. Así que, para cargar un iPhone en una nueva MacBook Pro, por ejemplo, se necesita un adaptador en el cable que conecte dispositivos USB-A a puertos USB-C.
La transición hacia USB-C puede ser un dolor de cabeza, pero se resuelve fácilmente comprando adaptadores baratos.
A largo plazo, el cambio de Apple a USB-C ayudará a crear un nuevo paradigma en la industria, dijo Brian Denslow, técnico de TechCollective, una consultoría de tecnologías de la información ubicada en San Francisco. La meta es alcanzar un punto en el que todos los dispositivos periféricos tengan un conector USB-C y finalmente no se necesitarán adaptadores.
Touch Bar: una página en blanco
Con Touch Bar, el objetivo de Apple es remplazar algunas teclas obsoletas con una banda versátil que se adapta a las aplicaciones que se estén utilizando. Asimismo, Apple también colocó un sensor para huellas digitales en la Touch Bar.
Es muy fácil acostumbrarse al Touch Bar, pero no encontré que fuera muy útil ni eficiente. Por ejemplo, si se abre la aplicación de “Fotos”, Touch Bar despliega imágenes en miniatura de fotos de la biblioteca y al pulsar una se selecciona para edición. Es genial pero ¿por qué no solo seleccionar la foto de la pantalla de la computadora? Cuando se usa el navegador Safari, se puede utilizar Touch Bar para elegir una pestaña diferente en el navegador, pero es más rápido usar atajos del teclado (por ejemplo, con Command+1 se elige la primera pestaña).
Cuando volví a utilizar una computadora portátil con un teclado normal, no sentí que me estuviera perdiendo de nada. Pero así como pasó con el iPhone desde su primer día, Touch Bar es en esencia una página en blanco y los desarrolladores de aplicaciones tienen la responsabilidad de hacerla más cautivadora.
Límites de velocidad y memoria
Muchos fieles a Apple se han obsesionado con las restricciones de memoria y el desempeño decepcionante de las nuevas MacBook Pro. Los nuevos modelos tienen un máximo de 16 gigabits de memoria RAM —el mismo límite que las MacBook Pro anteriores— y prácticamente la misma velocidad de procesador que las últimas portátiles profesionales. Sin embargo, esta solo es una parte de la historia.
Las nuevas portátiles son mucho más rápidas en algunas cosas que los modelos antiguos, mientras que en otras son solo un poco más veloces. En pruebas de velocidad realizadas con la aplicación Geekbench 4, el procesador de la MacBook Pro de 15 pulgadas fue solo de 10 a 17 por ciento más rápido que el modelo de 15 pulgadas que se lanzó en 2012. Sin embargo, en la nueva MacBook Pro, el procesador de gráficos, crucial para tareas de cómputo fuertes, es casi dos veces más rápido que el del modelo más viejo y los controladores de almacenamiento también son mucho más veloces.
El límite de memoria RAM es molesto para los usuarios que necesitan potencia. A mayor cantidad de RAM, se pueden abrir más aplicaciones y la computadora puede maniobrarlas más rápidamente. El problema, en teoría, es que si las aplicaciones futuras acaparan más memoria en unos años, las MacBook Pro no aceptarán más memoria porque el máximo posible son 16 gigabits.
Esperen a los pioneros
Las opiniones de los usuarios profesionales de la MacBook Pro están demasiado divididas como para que yo haga una recomendación generalizada.
Algo es seguro: para los usuarios informales o todo aquel que compre su primera computadora portátil, aquellos que tal vez quieran una computadora solo para navegar en internet y usar aplicaciones sencillas, la MacBook Pro es un exceso. La Chromebook 13 de Dell a 430 dólares o la MacBook Air de 1000 dólares —la computadora portátil con menor precio de Apple— son más lentas y tienen pantallas con una resolución más baja, pero cuentan con la potencia suficiente para cubrir sus necesidades.
Probablemente, las nuevas MacBook Pro tengan la potencia suficiente para la mayoría de los profesionales, pero si usted se considera un usuario avanzado y es escéptico respecto de la MacBook Pro, mejor espera a ver si se confirman las preocupaciones iniciales después de que los usuarios pioneros empiecen a usar las máquinas.
Con información de
Nytimes
