25 DE ABRIL 2024
BUENOS AIRES
Un policía lo mató por la espalda, pero para la Justicia fue un "accidente"
Miércoles 29 de
Mayo 2019
Un jurado popular condenó por "homicidio culposo" al ex policía José Pérez Buscarolo, quien persiguió más de 10 cuadras con un auto, disparó y mató a Iago Ávalos, de 17 años.
Como si hubiera sido una muerte “involuntaria”, un jurado popular consideró que el ex subcomisario José Pérez Buscarolo es culpable de “homicidio culposo” por la muerte de Iago Ávalos, un joven de 17 años que le había sacado dos tazas de su auto, que se las había devuelto después de una persecución pero que igual lo siguió más de 10 cuadras con el auto, disparó y lo mató de un tiro en la espalda.
El hecho ocurrió el 12 de mayo del 2017. Iago estaba con su amigo Nicolás, con quien habían ido a dar unas vueltas en auto. En el camino vieron un auto estacionado en la puerta de una casa, agarraron dos tazas de las ruedas y se fueron. A las diez cuadras, un auto Logan gris claro los interceptó a toda velocidad. Era el subcomisario José Pérez Buscarolo.
El efectivo se bajó del vehículo, se puso en situación de tiro y empezó a insultarlos. Nicolás le dijo al efectivo que había sido una picardía y le devolvió las tazas. Los dos chicos, asustados, se fueron en el auto. Pero Buscarolo no quería que se escaparan y los persiguió durante 15 cuadras más. En el trayecto disparó varias veces contra el vehículo. Un disparo entró por la parte de atrás del vehículo e hirió a Iago por la espalda.
Tanto el fiscal del juicio, Alfredo Ferreyra y el abogado de la familia de Iago, Ismael Jalil, pidieron durante los alegatos que el acusado sea condenado por el delito de “homicidio agravado por su condición de miembro de la fuerza de seguridad”, un delito que tiene una pena máxima de prisión perpetua. Sin embargo la defensa dio tres alternativas: la absolución, un exceso en legítima defensa o, subsidiariamente que se lo condene por “homicidio culposo”, delito por el que finalmente votó el jurado popular.
Se trata de una pena que tiene como máximo una condena a cinco años de cárcel y una inhabilitación por 10 años. Sin embargo la sentencia será dada a conocer este viernes por la jueza Andrea Bearzi, del Tribunal Oral Criminal 6 de Morón.
“Desde el punto de vista práctico lo que tiene de bueno que se haya logrado una sentencia y se lo expulsó de la fuerza por lo que pierde privilegios”, explicó a este portal el abogado de la familia, Ismael Jalil. “Sin embargo, es un signo de esta época en donde se avala la mano dura, la doctrina Chocobar y la sociedad lo va naturalizando. Asi queda en evidencia en este juicio”, agregó.
Para la familia de Iago no fue Justicia. “Tenemos la sensación de que la muerte de Iago quedó impune. Como si hubiera sido un accidente y no un crimen”, sostuvo Irina, hermana de Iago.
El hecho ocurrió el 12 de mayo del 2017. Iago estaba con su amigo Nicolás, con quien habían ido a dar unas vueltas en auto. En el camino vieron un auto estacionado en la puerta de una casa, agarraron dos tazas de las ruedas y se fueron. A las diez cuadras, un auto Logan gris claro los interceptó a toda velocidad. Era el subcomisario José Pérez Buscarolo.
El efectivo se bajó del vehículo, se puso en situación de tiro y empezó a insultarlos. Nicolás le dijo al efectivo que había sido una picardía y le devolvió las tazas. Los dos chicos, asustados, se fueron en el auto. Pero Buscarolo no quería que se escaparan y los persiguió durante 15 cuadras más. En el trayecto disparó varias veces contra el vehículo. Un disparo entró por la parte de atrás del vehículo e hirió a Iago por la espalda.
Tanto el fiscal del juicio, Alfredo Ferreyra y el abogado de la familia de Iago, Ismael Jalil, pidieron durante los alegatos que el acusado sea condenado por el delito de “homicidio agravado por su condición de miembro de la fuerza de seguridad”, un delito que tiene una pena máxima de prisión perpetua. Sin embargo la defensa dio tres alternativas: la absolución, un exceso en legítima defensa o, subsidiariamente que se lo condene por “homicidio culposo”, delito por el que finalmente votó el jurado popular.
Se trata de una pena que tiene como máximo una condena a cinco años de cárcel y una inhabilitación por 10 años. Sin embargo la sentencia será dada a conocer este viernes por la jueza Andrea Bearzi, del Tribunal Oral Criminal 6 de Morón.
“Desde el punto de vista práctico lo que tiene de bueno que se haya logrado una sentencia y se lo expulsó de la fuerza por lo que pierde privilegios”, explicó a este portal el abogado de la familia, Ismael Jalil. “Sin embargo, es un signo de esta época en donde se avala la mano dura, la doctrina Chocobar y la sociedad lo va naturalizando. Asi queda en evidencia en este juicio”, agregó.
Para la familia de Iago no fue Justicia. “Tenemos la sensación de que la muerte de Iago quedó impune. Como si hubiera sido un accidente y no un crimen”, sostuvo Irina, hermana de Iago.
Con información de
Minuto Uno