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A un mes de las elecciones, Brasil extiende una baja de impuestos a toda la industria
Martes 16 de
Septiembre 2014
Como parte de la estrategia de acercamiento al sector empresarial para intentar reducir las resistencias a la candidatura a la reelección de la presidenta Dilma Rousseff, el ministro de Economía, Guido Mantega, anunció ayer la extensión a toda la industria de la reducción de la alícuota del Impuesto a la Renta de 34% a 25% sobre ganancias en el exterior de las compañías brasileñas.
La baja ya regía para alimentos, bebidas y el sector de construcción civil.
La industria venía pidiendo esa medida, contra la decisión del Fisco de tributar en 34% los lucros obtenidos por las subsidiarias en el exterior de las firmas locales. Ese impuesto quitaba competitividad a las empresas nacionales que actúan fuera del país.
“En la práctica, se trata de un equilibrio entre las empresas brasileñas y las extranjeras”, dijo Mantega.
Para el ministro, la medida ayuda a mantener la competitividad de la industria brasileña en el exterior en relación a sus rivales internacionales, que cuentan con financiamiento a tasas más bajas.
Exportación
El ministro confirmó que el programa de estímulo a las exportaciones conocido como Reintegra tendrá el año próximo una alícuota de 3%. Este mecanismo devuelve a los exportadores un porcentaje de sus ventas en el exterior.
La medida tiene el objetivo de brindar más competitividad a las exportaciones brasileñas y compensar eventuales valorizaciones del real.
En declaraciones realizadas en el 11º Forum de Economía de la Fundación Getulio Vargas (FGV), Mantega dijo que los ajustes se hacen necesarios prácticamente siempre, todavía más en períodos de cambios de política fiscal y monetaria en las principales economías globales. Según el funcionario, ahora, a la salida de la crisis internacional, los ajustes tienen que ser hechos en varios frentes. “Tenemos que hacer ajustes de superávit primario y cambios en las tasas”, afirmó.
Para el ministro, a lo largo de estos dos últimos años hubo ajustes para enfrentar los cambios en el ambiente económico global. Pero ahora, con las fuertes expectativas de recuperación de las economías más desarrolladas, Brasil necesitará realizar nuevos ajustes para lidiar con las modificaciones en la política económica de los Estados Unidos, que comienzan a desmontar su política monetaria observada en los últimos años. Para el ministro, los “ajustes dependen de la estrategia de política económica de cada país” y las medidas adoptadas en los últimos años impedirán que pase lo peor”
Independientemente de la remontada de la economía global, Brasil debe realizar reformas con el objetivo mayor de generar un aumento del empleo y de los ingresos, señaló Mantega.
“La economía mundial se recuperará. Esperamos que la crisis termine entre 2014 y 2015. Pero debemos hacer las reformas para ingresar en este nuevo ciclo con vigor”, dijo.
La industria venía pidiendo esa medida, contra la decisión del Fisco de tributar en 34% los lucros obtenidos por las subsidiarias en el exterior de las firmas locales. Ese impuesto quitaba competitividad a las empresas nacionales que actúan fuera del país.
“En la práctica, se trata de un equilibrio entre las empresas brasileñas y las extranjeras”, dijo Mantega.
Para el ministro, la medida ayuda a mantener la competitividad de la industria brasileña en el exterior en relación a sus rivales internacionales, que cuentan con financiamiento a tasas más bajas.
Exportación
El ministro confirmó que el programa de estímulo a las exportaciones conocido como Reintegra tendrá el año próximo una alícuota de 3%. Este mecanismo devuelve a los exportadores un porcentaje de sus ventas en el exterior.
La medida tiene el objetivo de brindar más competitividad a las exportaciones brasileñas y compensar eventuales valorizaciones del real.
En declaraciones realizadas en el 11º Forum de Economía de la Fundación Getulio Vargas (FGV), Mantega dijo que los ajustes se hacen necesarios prácticamente siempre, todavía más en períodos de cambios de política fiscal y monetaria en las principales economías globales. Según el funcionario, ahora, a la salida de la crisis internacional, los ajustes tienen que ser hechos en varios frentes. “Tenemos que hacer ajustes de superávit primario y cambios en las tasas”, afirmó.
Para el ministro, a lo largo de estos dos últimos años hubo ajustes para enfrentar los cambios en el ambiente económico global. Pero ahora, con las fuertes expectativas de recuperación de las economías más desarrolladas, Brasil necesitará realizar nuevos ajustes para lidiar con las modificaciones en la política económica de los Estados Unidos, que comienzan a desmontar su política monetaria observada en los últimos años. Para el ministro, los “ajustes dependen de la estrategia de política económica de cada país” y las medidas adoptadas en los últimos años impedirán que pase lo peor”
Independientemente de la remontada de la economía global, Brasil debe realizar reformas con el objetivo mayor de generar un aumento del empleo y de los ingresos, señaló Mantega.
“La economía mundial se recuperará. Esperamos que la crisis termine entre 2014 y 2015. Pero debemos hacer las reformas para ingresar en este nuevo ciclo con vigor”, dijo.
Con información de
Cronista
