Siete técnicas para detectar cuándo una persona nos está mintiendo
Sábado 09 de
Noviembre 2013
Ciertas expresiones faciales, el lenguaje corporal y el patrón de comunicación pueden dejar en evidencia hasta al mejor de los mentirosos
Es posible que cualquier persona sepa detectar a un mentiroso si sabe qué señales debe vigilar. Debemos prestar atención a las expresiones faciales, el lenguaje corporal y el patrón de comunicación (la forma de expresarse).
Lillian Glass es analista del comportamiento y lenguaje corporal y prestó servicios al FBI para cazar a muchas personas que se delataban por las señales de engaño.
La experta aseguró que es fácil cazar al mentiroso si se sabe cómo se comporta en situaciones normales. Es decir, si una persona normalmente parpadea muy rápido, cuando mienta disminuirá el parpadeo e incluso intentará parpadear lo menos posible.
En su nuevo libro "The Body Language of Liars (El lenguaje de los mentirosos)", Lillian repasó algunos signos a los que se le debe prestar especial atención para darse cuenta si una persona está mintiendo.
Claro que si un mentiroso es inteligente y conoce las técnicas adecuadas, puede incluso engañar a los mejores profesionales, salvo por ciertas reacciones que generalmente no se pueden controlar, tales como las pulsaciones y la transpiración.
Cuando una persona tiene miedo, la temperatura de sus manos desciende. Y es que cuando alguien está asustado, nuestro cerebro envía la orden de mandar la sangre a las piernas para correr, y por tanto, la parte superior del cuerpo, y muy especialmente las extremidades, se suelen quedar frías.
De ahí viene el color pálido cuando alguien recibe un susto. Cuando miente, usted siente miedo de ser descubierto, y por tanto, en menor proporción, la temperatura de las manos disminuye. Probablemente esta técnica sea la única que no es posible controlar en un interrogatorio.
A continuación, algunas señales que envían los mentirosos, consignadas por Negocios1000:
1. Parpadeo
Todo el mundo sabe que los mentirosos no miran a los ojos, por lo que el verdadero profesional de la mentira no quiere romper el contacto visual, y suele realizar un esfuerzo extra que da lugar a un parpadeo mucho menor del habitual.
Si conoce bien a la persona, a través de la forma en que lo mira, un intento de manipulación, suele ser suficiente como para saber que quien le está hablando no está siendo sincero.
Según explicó Glass, la mayoría de los mejores estafadores de la historia solían despistar a la gente con su mirada, a menudo con parpadeos regulares.
"Cuando las personas dicen la verdad, la mayoría, de vez en cuando, mueven los ojos y miran para otro lado, ya que no tienen nada que esconder", indicó la experta.
2. Más información de la cuenta
¿Cuándo es aconsejable abrocharse el cinturón en un avión y ponerse a rezar? cuando la azafata, sin que nadie le pregunte, dice que todo va bien, y que no hay que preocuparse.
Asimismo, cuando ante una sencilla pregunta alguien sigue y sigue dando información que no se le solicitó y con todo tipo de detalles, hay una alta probabilidad de que nos estén mintiendo.
"Los mentirosos piensan que si te dan todo tipo de detalles, su historia parecerá más creíble", explicó Glass.
3. Exageración en su actuación
Un mentiroso puede volverse hostil si es descubierto, pero también puede sobre-actuar para dar la sensación de "extremadamente indignado", creyendo que la mejor forma de demostrarle que usted se equivocó es haciéndolo sentir mal.
4.Quietos como estatuas
Al igual que ocurre con la mirada, todo el mundo sabe que cuando alguien está muy inquieto es porque está nervioso, pero Glass afirmó que otros comportamientos se distinguen por intentar no mover ni un sólo músculo del cuerpo, hasta el punto de parecer frío.
Al respecto, afirmó: "Cuando se habla es muy normal mover las manos e incluso los pies, así como realizar movimientos inconscientes. Así que si observa a alguien rígido como un bloque en una postura catatónica carente de movimiento, suele ser un cartel de advertencia de que algo no va bien."
5. Partes vulnerables del cuerpo
Curbir sectores vulnerables es otro instinto natural que, según Glass, observó en muchas ocasiones en las salas de tribunales e interrogatorios.
"Las manos en el pecho, cuello y abdomen son críticas para el mentiroso. Siempre me doy cuenta de que hemos dado en el clavo con un sospechoso cuando éste se tapa la parte delantera de su garganta", aseguró la experta.
6. La boca
Otro instinto natural muy común cuando mentimos es taparnos la boca. Literalmente nuestro cerebro envía nuestras manos para cortar la comunicación, aunque este gesto realmente está más enfocado a cuando alguien no quiere responder a una pregunta concreta, o lo que es igual, no quiere decir la verdad sobre el asunto en cuestión.
7. Sed
¿Cómo podemos saber que la persona tiene sequedad en la boca?, según Glass, él mismo nos lo va a decir con ciertos gestos.
"Si alguna vez vemos un interrogatorio real de un detenido, los sospechosos que son culpables, cada vez tienen más dificultad para continuar hablando", explicó Glass.
Y agregó: "A medida que la conversación avanza suelen humedecerse los labios con más frecuencia e intensidad. Esto ocurre porque el sistema nervioso autónomo disminuye el flujo salival en momentos de estrés y esto seca las mucosas de la boca."
La experta aseguró que es fácil cazar al mentiroso si se sabe cómo se comporta en situaciones normales. Es decir, si una persona normalmente parpadea muy rápido, cuando mienta disminuirá el parpadeo e incluso intentará parpadear lo menos posible.
En su nuevo libro "The Body Language of Liars (El lenguaje de los mentirosos)", Lillian repasó algunos signos a los que se le debe prestar especial atención para darse cuenta si una persona está mintiendo.
Claro que si un mentiroso es inteligente y conoce las técnicas adecuadas, puede incluso engañar a los mejores profesionales, salvo por ciertas reacciones que generalmente no se pueden controlar, tales como las pulsaciones y la transpiración.
Cuando una persona tiene miedo, la temperatura de sus manos desciende. Y es que cuando alguien está asustado, nuestro cerebro envía la orden de mandar la sangre a las piernas para correr, y por tanto, la parte superior del cuerpo, y muy especialmente las extremidades, se suelen quedar frías.
De ahí viene el color pálido cuando alguien recibe un susto. Cuando miente, usted siente miedo de ser descubierto, y por tanto, en menor proporción, la temperatura de las manos disminuye. Probablemente esta técnica sea la única que no es posible controlar en un interrogatorio.
A continuación, algunas señales que envían los mentirosos, consignadas por Negocios1000:
1. Parpadeo
Todo el mundo sabe que los mentirosos no miran a los ojos, por lo que el verdadero profesional de la mentira no quiere romper el contacto visual, y suele realizar un esfuerzo extra que da lugar a un parpadeo mucho menor del habitual.
Si conoce bien a la persona, a través de la forma en que lo mira, un intento de manipulación, suele ser suficiente como para saber que quien le está hablando no está siendo sincero.
Según explicó Glass, la mayoría de los mejores estafadores de la historia solían despistar a la gente con su mirada, a menudo con parpadeos regulares.
"Cuando las personas dicen la verdad, la mayoría, de vez en cuando, mueven los ojos y miran para otro lado, ya que no tienen nada que esconder", indicó la experta.
2. Más información de la cuenta
¿Cuándo es aconsejable abrocharse el cinturón en un avión y ponerse a rezar? cuando la azafata, sin que nadie le pregunte, dice que todo va bien, y que no hay que preocuparse.
Asimismo, cuando ante una sencilla pregunta alguien sigue y sigue dando información que no se le solicitó y con todo tipo de detalles, hay una alta probabilidad de que nos estén mintiendo.
"Los mentirosos piensan que si te dan todo tipo de detalles, su historia parecerá más creíble", explicó Glass.
3. Exageración en su actuación
Un mentiroso puede volverse hostil si es descubierto, pero también puede sobre-actuar para dar la sensación de "extremadamente indignado", creyendo que la mejor forma de demostrarle que usted se equivocó es haciéndolo sentir mal.
4.Quietos como estatuas
Al igual que ocurre con la mirada, todo el mundo sabe que cuando alguien está muy inquieto es porque está nervioso, pero Glass afirmó que otros comportamientos se distinguen por intentar no mover ni un sólo músculo del cuerpo, hasta el punto de parecer frío.
Al respecto, afirmó: "Cuando se habla es muy normal mover las manos e incluso los pies, así como realizar movimientos inconscientes. Así que si observa a alguien rígido como un bloque en una postura catatónica carente de movimiento, suele ser un cartel de advertencia de que algo no va bien."
5. Partes vulnerables del cuerpo
Curbir sectores vulnerables es otro instinto natural que, según Glass, observó en muchas ocasiones en las salas de tribunales e interrogatorios.
"Las manos en el pecho, cuello y abdomen son críticas para el mentiroso. Siempre me doy cuenta de que hemos dado en el clavo con un sospechoso cuando éste se tapa la parte delantera de su garganta", aseguró la experta.
6. La boca
Otro instinto natural muy común cuando mentimos es taparnos la boca. Literalmente nuestro cerebro envía nuestras manos para cortar la comunicación, aunque este gesto realmente está más enfocado a cuando alguien no quiere responder a una pregunta concreta, o lo que es igual, no quiere decir la verdad sobre el asunto en cuestión.
7. Sed
¿Cómo podemos saber que la persona tiene sequedad en la boca?, según Glass, él mismo nos lo va a decir con ciertos gestos.
"Si alguna vez vemos un interrogatorio real de un detenido, los sospechosos que son culpables, cada vez tienen más dificultad para continuar hablando", explicó Glass.
Y agregó: "A medida que la conversación avanza suelen humedecerse los labios con más frecuencia e intensidad. Esto ocurre porque el sistema nervioso autónomo disminuye el flujo salival en momentos de estrés y esto seca las mucosas de la boca."
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