SANTA FE
Motochorros la golpearon brutalmente para robarle la mochila: Es triste tener que agradecer estar viva”
Lunes 30 de
Septiembre 2019
Sucedió el sábado al mediodía en San Lorenzo al 1700, a tan solo dos cuadras de la Comisaría 2ª. “Me preparé para que no me duelan tanto los golpes”, dijo la víctima en diálogo con Aire de Santa Fe.
En los últimos días, la sociedad santafesina salió a las calles en reclamo de respuestas del Estado frente a la inseguridad. Sin embargo, los hechos delictivos no cesaron a lo largo de la ciudad. El fin de semana le tocó a Agustina Iturraspe en barrio Sur, en pleno horario transitado y con movimiento.
Como cualquier otro día, la joven se encontraba ingresando a su domicilio en San Lorenzo al 1700 a las 12.30 del mediodía. “Siempre tengo la precaución de mirar para todos lados”, contó Agustina Iturraspe en una entrevista con Aire de Santa Fe. Lo que no se esperaba es que dos motochorros la abordaran repentinamente cuando estaba a punto de entrar a su casa.
La llave de la puerta ya tenía media vuelta pero decidió cerrar para que no la empujaran hacia el interior. “Logré volver a cerrar y correrme a un costado para que no hagan fuerza para entrar, porque eso hubiese sido otra historia que no quiero ni imaginar. Fue una milésima de segundo, eran dos muchachos de más de 30 años. Uno le daba órdenes al otro para que me agarre y vino directo a pegarme, pero yo no intenté hacerle nada. Solo pensé que sea lo que dios quiera y me preparé para que no me duelan tanto los golpes”, contó la mujer.
El hecho delictivo ocurrió a dos cuadras de la Comisaría 2ª. “Con todo lo que está pasando, por suerte no atentaron contra mí con un arma y fueron solo golpes. Me pude cubrir para que no me peguen en la cara, porque eran golpes de puño cerrado y patadas cuando estaba tirada en el piso. Lo lamentable es tener que agradecer el hecho de estar viva y que los daños no fueron mayores más que los físicos. Es la suerte de decir que no me desfiguraron la cara o que no me cortaron”, agregó Agustina Iturraspe.
Los delincuentes lograron sacarle la mochila que llevaba colgada antes de huir. La joven explicó que “el celular lo tenía en la mano pero no lograron llevárselo, no sé si es por lo dura que me puse al intentar soportar los golpes. Cuando se fueron, lo primero que hice fue tratar de ubicar la patente pero la moto no la tenía”.
Agustina hizo su descargo en sus redes sociales, con una imagen capturada desde una cámara donde se ven los delincuentes. “Me han llegado varias informaciones de que ya saben quiénes son, pero nadie hace nada. Todos hablan pero queda en la nada”, agregó.
Luego de lo ocurrido, muchos vecinos se acercaron y fue finalmente asistida por médicos. “A veces la gente está shockeada o no reacciona rápido, quizás por miedo”, contó en Aire de Santa Fe. Agustina Iturraspe es una de las tantas víctimas de la violencia estructural que se vive en el país.
Como cualquier otro día, la joven se encontraba ingresando a su domicilio en San Lorenzo al 1700 a las 12.30 del mediodía. “Siempre tengo la precaución de mirar para todos lados”, contó Agustina Iturraspe en una entrevista con Aire de Santa Fe. Lo que no se esperaba es que dos motochorros la abordaran repentinamente cuando estaba a punto de entrar a su casa.
La llave de la puerta ya tenía media vuelta pero decidió cerrar para que no la empujaran hacia el interior. “Logré volver a cerrar y correrme a un costado para que no hagan fuerza para entrar, porque eso hubiese sido otra historia que no quiero ni imaginar. Fue una milésima de segundo, eran dos muchachos de más de 30 años. Uno le daba órdenes al otro para que me agarre y vino directo a pegarme, pero yo no intenté hacerle nada. Solo pensé que sea lo que dios quiera y me preparé para que no me duelan tanto los golpes”, contó la mujer.
El hecho delictivo ocurrió a dos cuadras de la Comisaría 2ª. “Con todo lo que está pasando, por suerte no atentaron contra mí con un arma y fueron solo golpes. Me pude cubrir para que no me peguen en la cara, porque eran golpes de puño cerrado y patadas cuando estaba tirada en el piso. Lo lamentable es tener que agradecer el hecho de estar viva y que los daños no fueron mayores más que los físicos. Es la suerte de decir que no me desfiguraron la cara o que no me cortaron”, agregó Agustina Iturraspe.
Los delincuentes lograron sacarle la mochila que llevaba colgada antes de huir. La joven explicó que “el celular lo tenía en la mano pero no lograron llevárselo, no sé si es por lo dura que me puse al intentar soportar los golpes. Cuando se fueron, lo primero que hice fue tratar de ubicar la patente pero la moto no la tenía”.
Agustina hizo su descargo en sus redes sociales, con una imagen capturada desde una cámara donde se ven los delincuentes. “Me han llegado varias informaciones de que ya saben quiénes son, pero nadie hace nada. Todos hablan pero queda en la nada”, agregó.
Luego de lo ocurrido, muchos vecinos se acercaron y fue finalmente asistida por médicos. “A veces la gente está shockeada o no reacciona rápido, quizás por miedo”, contó en Aire de Santa Fe. Agustina Iturraspe es una de las tantas víctimas de la violencia estructural que se vive en el país.
Con información de
Aire de Santa Fe
