SANTA FE
Los gimnasios de la ciudad en una "delicada situación"
Por:
Juan Ignacio Rodríguez
Lunes 11 de
Mayo 2020
Desde la cámara que los nuclea aseguran que las ganancias por entrenamientos virtuales son mínimas y no alcanzan para cubrir todos los gastos. Presentaron un protocolo para poder empezar a trabajar en forma “gradual”. El miércoles, profesores de Educación Física se movilizarán a Casa de Gobierno.
Si bien la “flexibilización” de la cuarentena se nota cada vez más, hay quienes todavía padecen aquello que se inició el 20 de marzo con la declaración del aislamiento social, preventivo y obligatorio en todo el país, por la pandemia del coronavirus. Uno de estos sectores que se encuentra en un momento muy preocupante es el de los gimnasios de la ciudad.
Ernesto Capozzolo es el tesorero de la Cámara de Gimnasios de Santa Fe, una entidad vigente desde hace 17 años, pero que hace aproximadamente tres que tiene personería jurídica. En esta entidad hay anotados unos 70 gimnasios, dentro de los cuales están los más representativos por sus dimensiones, antigüedad, jerarquía, etcétera. No obstante, hace un tiempo un relevamiento municipal llegó a relevar unos 200 en la ciudad: tal vez hoy esta cifra haya quedado desactualizada.
En diálogo con El Litoral, Capozzolo describió el difícil momento que atraviesan: “Es un ingreso marginal el que tenemos actualmente. Será un 20% de lo que uno podía tener en meses como abril o mayo, trabajando en forma normal. Los gimnasios tenemos un 90 ó 95% de costos fijos entre sueldos, alquileres, impuestos, servicios, software de gestión, internet, televisión por cable, algunos que tienen servicios de limpieza, Sadaic, Adicapif, etcétera, sin contar luz y gas. Entonces, mantenernos con estos pocos ingresos es imposible”.
“Hay algunos que ya suspendieron o dieron de baja servicios; se intenta pagar los sueldos, negociamos con los dueños de los inmuebles. Pero son medidas momentáneas, pues mientras más se extienda en el tiempo este parate, más complicado vamos a estar. Según lo que nos dicen, a nivel municipal el intendente está muy supeditado a lo que decida (el gobernador Omar) Perotti; colegas de Rosario nos dicen que allá pasa lo mismo”, agregó el referente.
Alquiler de elementos
A principios de esta semana, trascendió que la Municipalidad autorizaba a los dueños de los gimnasios, previo registro en el Palacio Municipal, a alquilar sus elementos de manera particular. Según pudo averiguar este medio, a dos semanas de comenzada la cuarentena, muchos dueños de gimnasios comenzaron a alquilar sus herramientas de trabajo en forma personalizada. Al respecto, Capozzolo dijo: “No nos consta. Al menos un grupo chico de propietarios, que conformamos la comisión, no lo hicimos. Sí tenemos conocimiento de muchos otros afiliados que lo hicieron”.
Respecto de la medida municipal, “lo que nos dijeron desde la secretaría de la Producción es que ahora se puede hacer esto sin riesgo de infracción, tener un permiso para circular y hacer entrega de los elementos. Tuvimos un antecedente complicado con un gimnasio grande que apenas empezó la cuarentena, juntó a seis profesores y dio una clase on line desde el mismo gimnasio. Hubo vecinos que denunciaron esta actividad, llegó la policía, los multaron (se habló de una infracción con un costo cercano a los 200 mil pesos) y le colocaron una faja de clausura, que la tuvieron durante 20 días.
Ahora ya no la tienen porque pidieron el permiso también para poder alquilar”, relató.
Tras ese suceso, “surgió el temor entre quienes tenemos gimnasios en zona céntrica, respecto de hacer algo por el estilo; no es lo mismo un gimnasio que está más en la zona norte que, ‘entre gallos y medianoche’, puede alquilar las cosas”, añadió Capozzolo.
Protocolo
En los últimos días, la Cámara de Gimnasios de Santa Fe presentó un protocolo de seguridad e higiene para poder de a poco empezar a trabajar con normalidad. “Es adecuado a nuestra realidad, algo similar a lo que se presentó a nivel nacional. Lo que estamos pidiendo es abrir, dependiendo la superficie de cada gimnasio, con grupos de 5 ó 10 personas, con las medidas de seguridad como si fuera un entrenamiento personalizado o semipersonalizado; tomar la temperatura a profesores y clientes; tener dispenser con alcohol etílico al 70% o alcohol en gel; limpieza de elementos; entre otras cosas. Y desde ya, ir haciendo un testeo acerca de cómo se va implementando el protocolo. Pero todavía no tenemos respuestas concretas”.
Sobre el final, Capozzolo dijo: “Nos están poniendo a los gimnasios en el grupo de entretenimientos, y terminamos quedando últimos en la fila. Estamos peleando para que se nos considere dentro del grupo relacionado a la salud. Porque la mayoría de las personas va al gimnasio por recomendación médica, para rehabilitar una lesión o también aquellos que lo hacen por esparcimiento, que forma parte de los hábitos saludables”.
Profes a la plaza
El próximo miércoles 13 de mayo a las 10 de la mañana, profesores de Educación Física se movilizarán a Plaza de Mayo para visibilizar frente a Casa de Gobierno la delicada situación que están atravesando. “El motivo de la marcha surge tras estar en comunicación con varios colegas. Entendemos la situación de los clubes donde se dejan de cobrar cuotas (pagando a los profesores mitad de sueldo, o nada) y gimnasios, que lamentablemente tienen que cerrar porque no pueden pagar los impuestos, y los costos de mantenimiento de las estructuras resultan insostenibles. Muchos optaron por trabajar desde sus casas para dichos gimnasios, planificando y adaptando rutinas, algunos sin ser pagos”, comentó un profesional —que prefirió preservar su nombre— a El Litoral.
“Nos están poniendo a los gimnasios en el grupo de entretenimientos, y terminamos quedando últimos en la fila. Estamos pelando para que se nos considere dentro del grupo relacionado a la salud. Porque la mayoría de las personas va al gimnasio por recomendación médica”, dijo Capozzolo.
Ernesto Capozzolo es el tesorero de la Cámara de Gimnasios de Santa Fe, una entidad vigente desde hace 17 años, pero que hace aproximadamente tres que tiene personería jurídica. En esta entidad hay anotados unos 70 gimnasios, dentro de los cuales están los más representativos por sus dimensiones, antigüedad, jerarquía, etcétera. No obstante, hace un tiempo un relevamiento municipal llegó a relevar unos 200 en la ciudad: tal vez hoy esta cifra haya quedado desactualizada.
En diálogo con El Litoral, Capozzolo describió el difícil momento que atraviesan: “Es un ingreso marginal el que tenemos actualmente. Será un 20% de lo que uno podía tener en meses como abril o mayo, trabajando en forma normal. Los gimnasios tenemos un 90 ó 95% de costos fijos entre sueldos, alquileres, impuestos, servicios, software de gestión, internet, televisión por cable, algunos que tienen servicios de limpieza, Sadaic, Adicapif, etcétera, sin contar luz y gas. Entonces, mantenernos con estos pocos ingresos es imposible”.
“Hay algunos que ya suspendieron o dieron de baja servicios; se intenta pagar los sueldos, negociamos con los dueños de los inmuebles. Pero son medidas momentáneas, pues mientras más se extienda en el tiempo este parate, más complicado vamos a estar. Según lo que nos dicen, a nivel municipal el intendente está muy supeditado a lo que decida (el gobernador Omar) Perotti; colegas de Rosario nos dicen que allá pasa lo mismo”, agregó el referente.
Alquiler de elementos
A principios de esta semana, trascendió que la Municipalidad autorizaba a los dueños de los gimnasios, previo registro en el Palacio Municipal, a alquilar sus elementos de manera particular. Según pudo averiguar este medio, a dos semanas de comenzada la cuarentena, muchos dueños de gimnasios comenzaron a alquilar sus herramientas de trabajo en forma personalizada. Al respecto, Capozzolo dijo: “No nos consta. Al menos un grupo chico de propietarios, que conformamos la comisión, no lo hicimos. Sí tenemos conocimiento de muchos otros afiliados que lo hicieron”.
Respecto de la medida municipal, “lo que nos dijeron desde la secretaría de la Producción es que ahora se puede hacer esto sin riesgo de infracción, tener un permiso para circular y hacer entrega de los elementos. Tuvimos un antecedente complicado con un gimnasio grande que apenas empezó la cuarentena, juntó a seis profesores y dio una clase on line desde el mismo gimnasio. Hubo vecinos que denunciaron esta actividad, llegó la policía, los multaron (se habló de una infracción con un costo cercano a los 200 mil pesos) y le colocaron una faja de clausura, que la tuvieron durante 20 días.
Ahora ya no la tienen porque pidieron el permiso también para poder alquilar”, relató.
Tras ese suceso, “surgió el temor entre quienes tenemos gimnasios en zona céntrica, respecto de hacer algo por el estilo; no es lo mismo un gimnasio que está más en la zona norte que, ‘entre gallos y medianoche’, puede alquilar las cosas”, añadió Capozzolo.
Protocolo
En los últimos días, la Cámara de Gimnasios de Santa Fe presentó un protocolo de seguridad e higiene para poder de a poco empezar a trabajar con normalidad. “Es adecuado a nuestra realidad, algo similar a lo que se presentó a nivel nacional. Lo que estamos pidiendo es abrir, dependiendo la superficie de cada gimnasio, con grupos de 5 ó 10 personas, con las medidas de seguridad como si fuera un entrenamiento personalizado o semipersonalizado; tomar la temperatura a profesores y clientes; tener dispenser con alcohol etílico al 70% o alcohol en gel; limpieza de elementos; entre otras cosas. Y desde ya, ir haciendo un testeo acerca de cómo se va implementando el protocolo. Pero todavía no tenemos respuestas concretas”.
Sobre el final, Capozzolo dijo: “Nos están poniendo a los gimnasios en el grupo de entretenimientos, y terminamos quedando últimos en la fila. Estamos peleando para que se nos considere dentro del grupo relacionado a la salud. Porque la mayoría de las personas va al gimnasio por recomendación médica, para rehabilitar una lesión o también aquellos que lo hacen por esparcimiento, que forma parte de los hábitos saludables”.
Profes a la plaza
El próximo miércoles 13 de mayo a las 10 de la mañana, profesores de Educación Física se movilizarán a Plaza de Mayo para visibilizar frente a Casa de Gobierno la delicada situación que están atravesando. “El motivo de la marcha surge tras estar en comunicación con varios colegas. Entendemos la situación de los clubes donde se dejan de cobrar cuotas (pagando a los profesores mitad de sueldo, o nada) y gimnasios, que lamentablemente tienen que cerrar porque no pueden pagar los impuestos, y los costos de mantenimiento de las estructuras resultan insostenibles. Muchos optaron por trabajar desde sus casas para dichos gimnasios, planificando y adaptando rutinas, algunos sin ser pagos”, comentó un profesional —que prefirió preservar su nombre— a El Litoral.
“Nos están poniendo a los gimnasios en el grupo de entretenimientos, y terminamos quedando últimos en la fila. Estamos pelando para que se nos considere dentro del grupo relacionado a la salud. Porque la mayoría de las personas va al gimnasio por recomendación médica”, dijo Capozzolo.
Con información de
El Litoral
