25 DE ABRIL 2024
Denunciado tras golpear y amenazar a su novia
Lunes 15 de
Junio 2020
Tiene 20 años y fue imputado por tres delitos, todos cometidos en el marco de una violenta agresión a su pareja, de 21. Fue liberado con alternativas.
Un joven de 20 años fue imputado por golpear y amenazar a su novia luego de que ella no quisiera entregarle su celular. El hecho ocurrió en la localidad de Colonia Francesa, donde ambos residen, en el departamento San Javier.
Todo comenzó el martes pasado, cuando Lucas G. le exigió a su novia, de 21 años, su celular para poder revisar sus contactos y conversaciones. Estaban en el domicilio de ella, ya entrada la noche, y él comenzó a insultarla, la empujó y la tomó fuerte del cuello. Ella le pedía que le devolviera el móvil, pero él se negaba, por lo que decidió ingresar a la casa.
Pero la chica no pudo lograr su cometido, ya que Lucas G. la tomó de los brazos y la arrastró, obligándola a que lo acompañe a una plaza. Una vez allí, la amenazó: “las voy a matar a las dos, me la van pagar”, haciendo referencia también a la abuela de la muchacha, con quien vive.
Luego de eso, el joven tomó a su novia del brazo y la obligó a caminar con él, hasta que en un momento la volvió a tomarla del cuello y la empujó, haciéndola caer al suelo. La insultó y la golpeó en el rostro con su puño, y después hizo que se levantara y siguiera caminando a su lado. Poco importó que la chica manifestara “que se quería ir”.
Tres delitos
La violencia no duró más tiempo gracias a que se encontraron con un conocido, momento en el que la muchacha aprovechó para irse rápidamente del lugar. Un rato más tarde, y a través de un intermediario, la joven recibió su celular. Radicó la denuncia en el Área de Investigación de Violencia de Género, Sexual y Familiar de San Javier.
“Los hechos ocurrieron en el marco de una relación de noviazgo de una antigüedad aproximada de 2 años y medio, durante al cual -Lucas G.- ejerció violencia física y psicológica sobre su pareja, generando una relación desigual de poder capaz de afectar su libertad, su dignidad, su integridad física, psicológica y patrimonial, así también como su seguridad personal”, aseguró el fiscal Francisco Cecchini en la audiencia imputativa presidida por el juez Nicolás Falkenberg el viernes pasado. El joven está acusado de tres delitos: “lesiones leves dolosas calificadas por el vínculo”, “amenazas en contexto de violencia de género” y “robo” en concurso real.
Representado por el abogado Mario Guedes, del Servicio Público Provincial de la Defensa Penal (SPPDP), el imputado recibió un conjunto de medidas alternativas destinadas a cautelar el proceso, tales como la fijación de un domicilio, una medida de distancia de 200 metros respecto de la víctima y de su abuela -tanto de su vivienda como de su persona- incluida una prohibición de contacto por cualquier medio. Además, cuando culmine la cuarentena Lucas G. deberá presentarse en la sede del Ministerio público de la Acusación de San Javier mensualmente.
Todo comenzó el martes pasado, cuando Lucas G. le exigió a su novia, de 21 años, su celular para poder revisar sus contactos y conversaciones. Estaban en el domicilio de ella, ya entrada la noche, y él comenzó a insultarla, la empujó y la tomó fuerte del cuello. Ella le pedía que le devolviera el móvil, pero él se negaba, por lo que decidió ingresar a la casa.
Pero la chica no pudo lograr su cometido, ya que Lucas G. la tomó de los brazos y la arrastró, obligándola a que lo acompañe a una plaza. Una vez allí, la amenazó: “las voy a matar a las dos, me la van pagar”, haciendo referencia también a la abuela de la muchacha, con quien vive.
Luego de eso, el joven tomó a su novia del brazo y la obligó a caminar con él, hasta que en un momento la volvió a tomarla del cuello y la empujó, haciéndola caer al suelo. La insultó y la golpeó en el rostro con su puño, y después hizo que se levantara y siguiera caminando a su lado. Poco importó que la chica manifestara “que se quería ir”.
Tres delitos
La violencia no duró más tiempo gracias a que se encontraron con un conocido, momento en el que la muchacha aprovechó para irse rápidamente del lugar. Un rato más tarde, y a través de un intermediario, la joven recibió su celular. Radicó la denuncia en el Área de Investigación de Violencia de Género, Sexual y Familiar de San Javier.
“Los hechos ocurrieron en el marco de una relación de noviazgo de una antigüedad aproximada de 2 años y medio, durante al cual -Lucas G.- ejerció violencia física y psicológica sobre su pareja, generando una relación desigual de poder capaz de afectar su libertad, su dignidad, su integridad física, psicológica y patrimonial, así también como su seguridad personal”, aseguró el fiscal Francisco Cecchini en la audiencia imputativa presidida por el juez Nicolás Falkenberg el viernes pasado. El joven está acusado de tres delitos: “lesiones leves dolosas calificadas por el vínculo”, “amenazas en contexto de violencia de género” y “robo” en concurso real.
Representado por el abogado Mario Guedes, del Servicio Público Provincial de la Defensa Penal (SPPDP), el imputado recibió un conjunto de medidas alternativas destinadas a cautelar el proceso, tales como la fijación de un domicilio, una medida de distancia de 200 metros respecto de la víctima y de su abuela -tanto de su vivienda como de su persona- incluida una prohibición de contacto por cualquier medio. Además, cuando culmine la cuarentena Lucas G. deberá presentarse en la sede del Ministerio público de la Acusación de San Javier mensualmente.
Con información de
El Litoral
