BUENOS AIRES
Fue a robar una joyería con un arma en la mano
A los ocho años ya roba a punta de pistola
Jueves 21 de
Febrero 2019
El caso ocurrió en una joyería y bijouterie del centro de Moreno, en la provincia de Buenos Aires. Un niño de tan solo ocho años ingresó al local -que atiende tras las rejas por seguridad- y apuntó al dueño con un arma.
El comerciante, Nicolás García, contó a Crónica "El chico golpeó la reja y pensé que me iba a pedir algo de comer, así que por eso lo dejé entrar".
Pero no resultó ser lo que Nicolas pensaba. El chico frenó cerca del mostrador y amenazó a García. "El pibito me dijo que le diera todo, que no me hiciera el boludo porque me iba a 'quemar'. Ahí sacó la pistola y la puso sobre el mostrador, para asustarme".
En un primer momento, el comerciante creyó que el arma era de juguete, no salía de su asombro al oír la amenaza, más aún viendo que el niño se encontraba solo y hablaba en tono muy tranquilo. En una veloz reacción, García tomó el arma del mostrador y pudo sacar al pequeño fuera del negocio.
"Aproveché el descuido del pibe cuando puso la pistola sobre la mesa, lo tomé del cuello y lo saqué a las corridas del negocio. Casi que ni pensé en lo que estaba haciendo", admitió.
En cuanto a la respuesta de la Policía, agregó: "Me dijeron que como era un menor de 8 años, no podían hacer nada. Me volví loco y me llené de frustración, pero este es el país en el que vivimos. Incluso tengo temor porque me dijeron que si sigo jodiendo me van a romper todo". García, ante esta situación de amenazas por parte de familiares del asaltante, pidió protección policial.
Pero no resultó ser lo que Nicolas pensaba. El chico frenó cerca del mostrador y amenazó a García. "El pibito me dijo que le diera todo, que no me hiciera el boludo porque me iba a 'quemar'. Ahí sacó la pistola y la puso sobre el mostrador, para asustarme".
En un primer momento, el comerciante creyó que el arma era de juguete, no salía de su asombro al oír la amenaza, más aún viendo que el niño se encontraba solo y hablaba en tono muy tranquilo. En una veloz reacción, García tomó el arma del mostrador y pudo sacar al pequeño fuera del negocio.
"Aproveché el descuido del pibe cuando puso la pistola sobre la mesa, lo tomé del cuello y lo saqué a las corridas del negocio. Casi que ni pensé en lo que estaba haciendo", admitió.
En cuanto a la respuesta de la Policía, agregó: "Me dijeron que como era un menor de 8 años, no podían hacer nada. Me volví loco y me llené de frustración, pero este es el país en el que vivimos. Incluso tengo temor porque me dijeron que si sigo jodiendo me van a romper todo". García, ante esta situación de amenazas por parte de familiares del asaltante, pidió protección policial.
Con información de
El Litoral