Juntan firmas para apoyar un proyecto de ley que busca descontar del Impuesto a las Ganancias los gastos educativos
Miércoles 30 de
Septiembre 2020
Yamila Lezcano Chávez, licenciada en Administración, generó una página para juntar firmas por un proyecto de ley que entró en las últimas horas al Congreso.
Sin tener demasiados detalles ni formar parte de un partido político escribió que se había enterado de la idea por las redes sociales y pidió compartirla y juntar firmas para que se haga realidad.
“Leí en redes que en el Congreso se presentó un proyecto que apunta a que podamos descontar todos los meses del impuesto a las ganancias lo que pagamos en educación. En mi caso sería por la maestría y los materiales que utilizo para realizarla. Me pareció un buen proyecto para apoyar. Aún más en el contexto que estamos atravesando, donde seguramente tendremos que achicar nuestra economía familiar", escribió.
El proyecto al que se refería fue presentado por el diputado nacional del radicalismo Emiliano Yacobitti y acompañado por diferentes legisladores del arco opositor. Lo que busca es que se descuente del impuesto a las ganancias los gastos vinculados a la educación, como es el caso materiales, clases de apoyo, clases de idiomas, transportes escolares, indumentaria escolar, cuotas de cooperadoras y matrículas, y cuotas de las instituciones educativas.
El proyecto marca que si una persona gana entre $55 mil y $145 mil va a poder descontar todos los meses lo que gasta en temas referidos a la educación. "Se podrán deducir los gastos del contribuyente a título personal, de hijos menores de 18 años a cargo y de hijos mayores de edad y menores de 25 años que estén a exclusivo cargo del contribuyente, cursen estudios regulares y que no perciban ingresos superiores a 1,5 salarios mínimo, vital y móvil por mes.
“El esfuerzo fiscal asciende al 0,08% del PBI y representa el 0,24% del presupuesto ampliado para el 2020”, indican los legisladores en el documento, en el que resaltan una serie de beneficios. Entre ellos resaltaron que la recaudación extra que tendrá el Estado “porque una persona se gradué de la universidad, a valor presente, equivale a $10 millones” y que “si cada persona que estudia se gradúa, la educación superior le genera al Estado un retorno real del 12,4%”.
En diálogo con Infobae, Yacobitti explicó que “el proyecto está más vigente que nunca” y que es importante que “veamos a la educación como una inversión y no como un gasto”. Además, resaltó “el acompañamiento de otros diputados de la oposición” que respaldaron el proyecto con su firma.
Además de representantes de la UCR, la Coalición Cívica y el PRO, el documento fue firmado por Graciela Camaño, del interbloque Federal y José Luis Ramón, de Unidad Federal, los dos esquemas legislativos donde están aglutinados el peronismo disidente y el socialismo.
La joven que comenzó la campaña para juntar firmas también dio su mirada sobre la importancia que tendría que el proyecto avance. “La educación es un derecho del que todos deberíamos gozar. Lamentablemente, con la crisis económica del país, estudiar queda relegado en un segundo plano. Y eso tiene que cambiar”, expresó.
“Estoy haciendo una maestría en la Flacso. Hoy en día estudiar me demanda un esfuerzo económico grande, mes a mes, que justifico por la necesidad de capacitarme y crecer profesionalmente. Pero, cada vez se hace más difícil llegar a fin de mes, las cuotas universitarias son cada vez más altas y mi sueldo no puede seguir el ritmo”, indicó al pedirle a la gente respalde el proyecto.
“Leí en redes que en el Congreso se presentó un proyecto que apunta a que podamos descontar todos los meses del impuesto a las ganancias lo que pagamos en educación. En mi caso sería por la maestría y los materiales que utilizo para realizarla. Me pareció un buen proyecto para apoyar. Aún más en el contexto que estamos atravesando, donde seguramente tendremos que achicar nuestra economía familiar", escribió.
El proyecto al que se refería fue presentado por el diputado nacional del radicalismo Emiliano Yacobitti y acompañado por diferentes legisladores del arco opositor. Lo que busca es que se descuente del impuesto a las ganancias los gastos vinculados a la educación, como es el caso materiales, clases de apoyo, clases de idiomas, transportes escolares, indumentaria escolar, cuotas de cooperadoras y matrículas, y cuotas de las instituciones educativas.
El proyecto marca que si una persona gana entre $55 mil y $145 mil va a poder descontar todos los meses lo que gasta en temas referidos a la educación. "Se podrán deducir los gastos del contribuyente a título personal, de hijos menores de 18 años a cargo y de hijos mayores de edad y menores de 25 años que estén a exclusivo cargo del contribuyente, cursen estudios regulares y que no perciban ingresos superiores a 1,5 salarios mínimo, vital y móvil por mes.
“El esfuerzo fiscal asciende al 0,08% del PBI y representa el 0,24% del presupuesto ampliado para el 2020”, indican los legisladores en el documento, en el que resaltan una serie de beneficios. Entre ellos resaltaron que la recaudación extra que tendrá el Estado “porque una persona se gradué de la universidad, a valor presente, equivale a $10 millones” y que “si cada persona que estudia se gradúa, la educación superior le genera al Estado un retorno real del 12,4%”.
En diálogo con Infobae, Yacobitti explicó que “el proyecto está más vigente que nunca” y que es importante que “veamos a la educación como una inversión y no como un gasto”. Además, resaltó “el acompañamiento de otros diputados de la oposición” que respaldaron el proyecto con su firma.
Además de representantes de la UCR, la Coalición Cívica y el PRO, el documento fue firmado por Graciela Camaño, del interbloque Federal y José Luis Ramón, de Unidad Federal, los dos esquemas legislativos donde están aglutinados el peronismo disidente y el socialismo.
La joven que comenzó la campaña para juntar firmas también dio su mirada sobre la importancia que tendría que el proyecto avance. “La educación es un derecho del que todos deberíamos gozar. Lamentablemente, con la crisis económica del país, estudiar queda relegado en un segundo plano. Y eso tiene que cambiar”, expresó.
“Estoy haciendo una maestría en la Flacso. Hoy en día estudiar me demanda un esfuerzo económico grande, mes a mes, que justifico por la necesidad de capacitarme y crecer profesionalmente. Pero, cada vez se hace más difícil llegar a fin de mes, las cuotas universitarias son cada vez más altas y mi sueldo no puede seguir el ritmo”, indicó al pedirle a la gente respalde el proyecto.
Con información de
Infobae