Elaboran un medicamento que tiene la virtud de borrar los malos recuerdos
Jueves 29 de
Mayo 2014
Un equipo de científicos norteamericanos busca probar en humanos con Gilenya, un fármaco habitualmente utilizado en el tratamiento de la esclerosis múltiple.
Como si se tratara de una secuela de una película de ciencia ficción, un equipo de científicos norteamericanos acaba de elaborar un medicamento que podría borrar el dolor asociado al recuerdo de episodios traumáticos, de acuerdo a un informe de la revista Nature.
Gilenya, el fármaco habitualmente utilizado en el tratamiento de la esclerosis múltiple, podría ser parte de una lista de "amnésicos" que aún deben seguir una eatap de testeo y experimentación pero que, en un futuro cercano, podrían traer mejoras al sufrimiento que producen cualquier tipo de traumas o situaciones dolorosas.
A través de estudios realizados en ratas de laboratorio, los neurocientíficos descubrieron que, en aquellos animales que tomaban el medicamento, se reducía el miedo a recibir otra descarga eléctrica. Previamente, se habían administrado numerosas descargas a los animales, que quedaban paralizados a causa la ansiedad. Sin embargo, después de tomar la dosis de Gilenya, este comportamiento de ansiedad y miedo se veía notablemente reducido.
Los autores del estudio confían en poder trasladar los resultados de su trabajo a los seres humanos y conquistar efectos similares en lo que se conoce como "extinción del miedo". De este modo, los individuos que padecen síndrome de estrés traumático, por ejemplo, podrían decidir olvidar el recuerdo doloroso que les provoca el trauma. Después del tratamiento, podrían volver a tener conocimiento de esa memoria, pero liberados del sentimiento de dolor. El desarrollo definitivo de un medicamento que induzca al olvido podría dejar atrás, en principio, otras terapias menos eficaces como la hipnosis y llevaría al extremo el concepto de memoria selectiva.
Gilenya, el fármaco habitualmente utilizado en el tratamiento de la esclerosis múltiple, podría ser parte de una lista de "amnésicos" que aún deben seguir una eatap de testeo y experimentación pero que, en un futuro cercano, podrían traer mejoras al sufrimiento que producen cualquier tipo de traumas o situaciones dolorosas.
A través de estudios realizados en ratas de laboratorio, los neurocientíficos descubrieron que, en aquellos animales que tomaban el medicamento, se reducía el miedo a recibir otra descarga eléctrica. Previamente, se habían administrado numerosas descargas a los animales, que quedaban paralizados a causa la ansiedad. Sin embargo, después de tomar la dosis de Gilenya, este comportamiento de ansiedad y miedo se veía notablemente reducido.
Los autores del estudio confían en poder trasladar los resultados de su trabajo a los seres humanos y conquistar efectos similares en lo que se conoce como "extinción del miedo". De este modo, los individuos que padecen síndrome de estrés traumático, por ejemplo, podrían decidir olvidar el recuerdo doloroso que les provoca el trauma. Después del tratamiento, podrían volver a tener conocimiento de esa memoria, pero liberados del sentimiento de dolor. El desarrollo definitivo de un medicamento que induzca al olvido podría dejar atrás, en principio, otras terapias menos eficaces como la hipnosis y llevaría al extremo el concepto de memoria selectiva.
Con información de
unosantafe