SANTA FE
Dos de los ocho detenidos en Cabal, Las Lomas y Villa Hipódromo seguirán en prisión
Martes 22 de
Octubre 2019
El pasado jueves se realizaron 42 allanamientos simultáneos en tres barrios de la ciudad. El fiscal Giavedoni confirmó que se busca realizar un trabajo integral.
El martes, en los tribunales de Santa Fe, se realizaron dos audiencias de prisión preventiva en el marco de la investigación por la que el pasado jueves se concretaron un total de 42 allanamientos simultáneos en los barrios Las Lomas, Cabal y Villa Hipódromo de la ciudad de Santa Fe. Una de las audiencias fue solicitada por el fiscal Estanislao Giavedoni para seis de los ocho detenidos, a raíz de una causa por amenazas calificadas. Mientras que la otra estuvo a cargo del fiscal de la Unidad Especial de homicidios Martín Torres, en el marco de una causa que investigó a otro de los aprehendidos en los opertivas y que se encuentra vinculado al crimen de Elías Insaurralde, ocurrido en mayo de este año.
Todos los detenidos resultaron detenidos el pasado por el fiscal Giavedoni quien le acusó formalmente a seis de los ocho detenidos. Dos de ellos fueron acusados de amenazar a una vecina con sendas armas de fuego, y de efectuar disparos contra el carribar que la misma posee. En tanto, los otros cuatro fueron imputados por el delito de tenencia ilegítima de armas de fuego de uso civil, que fueron secuestradas en sus viviendas al realizarse los allanamientos. Sólo uno de estos seis quedó en prisión preventiva ayer.
En razón de ello, el fiscal explicó desde el móvil de Aire de Santa Fe que para la mayoría se trata de la primera causa que tramitan. “Sólo uno cuenta con antecedentes penales condenatorios”, explicó el funcionario judicial.
Homicidio
En los allanamientos fue detenido uno joven vinculado a un crimen por lo que terminó en manos del fiscal Torres quien lo imputó, también el sábado, como coautor del homicidio de Elías Insaurralde,. Dos días después la jueza Rosana Carrara impuso su prisión preventiva. El mismo está acusado de haber participado del asesinato que ocurrió el 10 de mayo de este año, en horas de la madrugada.
Por el violento y fatal desenlace, el primero en caer fue “Pipi”, imputado como el autor de los disparos, en el mes de agosto y se impuso su prisión preventiva. En los múltiples allanamientos del pasado jueves detuvieron al “Pelado”, sobre quien pesa un pedido de captura.
Una interna violenta
En los últimos tiempos se dio una escalada de violencia por disputas entre bandas de los barrios que mantienen en jaque a los vecinos. Incluso un niño perdió la vida y una pequeña quedó con secuelas irreversibles tras recibir un disparo en el cráneo. El lunes 18 de enero de 2016 Iván Albarengo recibió un disparo en el cráneo que le costó la vida. El niño estaba junto a otros jóvenes en Obispo Boneo entre Primer Pasaje y Camino Viejo a Esperanza, cuando comenzaron los disparos. En un juicio oral y público, Germán Castañeda, Leandro Armelino y Alejandro Barrios fueron condenados a 21 años de prisión por el hecho, condena que la cámara de apelaciones bajó a 17 años.
A los pocos días, el domingo 31 de enero de ese mismo año, minutos antes del mediodía, un hombre mayor de edad se trasladaba en un carro –tirado por un caballo–, en el que también iban sus tres hijos menores de edad. En inmediaciones de las calles Viñas y Pavón fueron interceptados por Diego Andersen, que se conducía en una motocicleta.
Andersen primero se colocó detrás del carro y mientras le apuntaba con un arma de fuego al padre de la niña, le exigió que frenara. El hombre intentó apurar la marcha del carro, motivo por el cual, Andersen se colocó a la par y le realizó un disparo de arma de fuego intencional que impactó en el cráneo de la menor de tres años, quien iba sentada entre las piernas de su padre. Las heridas de la niña le ocasionaron secuelas irreversibles y en el marco de un procedimiento abreviado se firmó una condena a 13 años de prisión por este hecho.
Todos los detenidos resultaron detenidos el pasado por el fiscal Giavedoni quien le acusó formalmente a seis de los ocho detenidos. Dos de ellos fueron acusados de amenazar a una vecina con sendas armas de fuego, y de efectuar disparos contra el carribar que la misma posee. En tanto, los otros cuatro fueron imputados por el delito de tenencia ilegítima de armas de fuego de uso civil, que fueron secuestradas en sus viviendas al realizarse los allanamientos. Sólo uno de estos seis quedó en prisión preventiva ayer.
En razón de ello, el fiscal explicó desde el móvil de Aire de Santa Fe que para la mayoría se trata de la primera causa que tramitan. “Sólo uno cuenta con antecedentes penales condenatorios”, explicó el funcionario judicial.
Homicidio
En los allanamientos fue detenido uno joven vinculado a un crimen por lo que terminó en manos del fiscal Torres quien lo imputó, también el sábado, como coautor del homicidio de Elías Insaurralde,. Dos días después la jueza Rosana Carrara impuso su prisión preventiva. El mismo está acusado de haber participado del asesinato que ocurrió el 10 de mayo de este año, en horas de la madrugada.
Por el violento y fatal desenlace, el primero en caer fue “Pipi”, imputado como el autor de los disparos, en el mes de agosto y se impuso su prisión preventiva. En los múltiples allanamientos del pasado jueves detuvieron al “Pelado”, sobre quien pesa un pedido de captura.
Una interna violenta
En los últimos tiempos se dio una escalada de violencia por disputas entre bandas de los barrios que mantienen en jaque a los vecinos. Incluso un niño perdió la vida y una pequeña quedó con secuelas irreversibles tras recibir un disparo en el cráneo. El lunes 18 de enero de 2016 Iván Albarengo recibió un disparo en el cráneo que le costó la vida. El niño estaba junto a otros jóvenes en Obispo Boneo entre Primer Pasaje y Camino Viejo a Esperanza, cuando comenzaron los disparos. En un juicio oral y público, Germán Castañeda, Leandro Armelino y Alejandro Barrios fueron condenados a 21 años de prisión por el hecho, condena que la cámara de apelaciones bajó a 17 años.
A los pocos días, el domingo 31 de enero de ese mismo año, minutos antes del mediodía, un hombre mayor de edad se trasladaba en un carro –tirado por un caballo–, en el que también iban sus tres hijos menores de edad. En inmediaciones de las calles Viñas y Pavón fueron interceptados por Diego Andersen, que se conducía en una motocicleta.
Andersen primero se colocó detrás del carro y mientras le apuntaba con un arma de fuego al padre de la niña, le exigió que frenara. El hombre intentó apurar la marcha del carro, motivo por el cual, Andersen se colocó a la par y le realizó un disparo de arma de fuego intencional que impactó en el cráneo de la menor de tres años, quien iba sentada entre las piernas de su padre. Las heridas de la niña le ocasionaron secuelas irreversibles y en el marco de un procedimiento abreviado se firmó una condena a 13 años de prisión por este hecho.
Con información de
Aire de Santa Fe
