Los incendios de Córdoba tienen 10 veces el tamaño de la ciudad de Buenos Aires y ya se habla de "ecocidio"
Martes 13 de
Octubre 2020
Hace ya varias semanas que los incendios de Córdoba están colaborando con la destrucción del medio ambiente y el fuego parece no parar.
En la provincia de Córdoba, en Argentina los incendios que comenzaron intencionalmente ya destruyeron más de 2.000 kilómetros cuadrados de bosques, para entender bien la gravedad del tema, el equivalente es como 10 veces el tamaño de la ciudad de Buenos Aires.
Al principio se pudieron controlar los focos de mayor tamaño, sin embargo hubieron dos semanas donde los incendios no paraban y aún algunos bosques en las sierras siguen encendidos. Defensa Civil advirtió que el fuego podría reiniciarse en algunos “puntos calientes”.
El ministro de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable de Argentina, Juan Cabandié, afirmó en su cuenta de twitter: “No vamos a bajar los brazos hasta apagar los incendios y que los responsables paguen por el ecocidio. Basta de quemas”.
No obstante Córdoba no ha sido la única provincia argentina que sufrió por los incendios. Otras 13 provincias argentinas también han sufrido grandes incendios de bosques y pastizales en las últimas semanas. Según el funcionario, un 95% de los incendios son intencionales y acusó al sector ganadero de haber comenzado los siniestros a través de una práctica común establecida en Argentina: las quemas.
El experto en manejo del fuego Nicolás Mari, investigador del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y coordinador de la Red Latinoamericana de Teledetección e Incendios Forestales (RedLatif) explicó en diálogo con la BBC Mundo que esta técnica se utiliza con dos fines.
Las quemas
El primer fin es renovar las pasturas. “Se quema el pasto seco de un campo para buscar el llamado rebrote verde”, señaló y aclaró que en zonas llanas se utiliza ampliamente y si uno lo planifica y lo hace en condiciones controladas es una técnica efectiva y segura.Pero aclaró que muchas veces se hace de forma irresponsable, sin tomar en cuenta las condiciones del viento o el clima, que hacen que los fuegos se extiendan a otras áreas.
“Avanzar la frontera agropecuaria”, así se nombra al segundo objetivo de las quemas intencionales. “Son desmontes, pero en vez de usar topadoras queman los árboles. Lo suelen hacer grupos económicos grandes que compran bosques a un precio más barato y los queman para poder plantar soja y hacer que sus terrenos valgan más” especificó. Por otro lado, el experto señaló que la Ley de Bosques, con el fin de proteger a estas zonas no se aplica.
Una observación muy extraña también es que los incendios en Córdoba ocurren todos los años desde hace mucho tiempo y a pesar de esto la provincia no cuenta con una brigada de bomberos forestales. Por esta razón cada año, entre junio y diciembre, cuando se realizan las quemas y empiezan los incendios, la provincia debe pedir ayuda al gobierno nacional y a las otras provincias.
“El sistema de bomberos de Córdoba, que funciona con voluntarios, trabaja para salvar vidas humanas y casas. Si hay un incendio forestal detectan la casa más cercana y se concentran en protegerla de los fuegos”, explica Mari y agregó “Recién cuando no hay casas en riesgo se despliegan en los bosques”.
Por último el especialista contó que en las últimas dos semanas, cerca de 1.000 civiles participaron apagando los fuegos en tres ciudades cercanas a La Cumbre, donde vive, junto con unos 300 bomberos y 80 brigadistas forestales.
Al principio se pudieron controlar los focos de mayor tamaño, sin embargo hubieron dos semanas donde los incendios no paraban y aún algunos bosques en las sierras siguen encendidos. Defensa Civil advirtió que el fuego podría reiniciarse en algunos “puntos calientes”.
El ministro de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable de Argentina, Juan Cabandié, afirmó en su cuenta de twitter: “No vamos a bajar los brazos hasta apagar los incendios y que los responsables paguen por el ecocidio. Basta de quemas”.
No obstante Córdoba no ha sido la única provincia argentina que sufrió por los incendios. Otras 13 provincias argentinas también han sufrido grandes incendios de bosques y pastizales en las últimas semanas. Según el funcionario, un 95% de los incendios son intencionales y acusó al sector ganadero de haber comenzado los siniestros a través de una práctica común establecida en Argentina: las quemas.
El experto en manejo del fuego Nicolás Mari, investigador del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y coordinador de la Red Latinoamericana de Teledetección e Incendios Forestales (RedLatif) explicó en diálogo con la BBC Mundo que esta técnica se utiliza con dos fines.
Las quemas
El primer fin es renovar las pasturas. “Se quema el pasto seco de un campo para buscar el llamado rebrote verde”, señaló y aclaró que en zonas llanas se utiliza ampliamente y si uno lo planifica y lo hace en condiciones controladas es una técnica efectiva y segura.Pero aclaró que muchas veces se hace de forma irresponsable, sin tomar en cuenta las condiciones del viento o el clima, que hacen que los fuegos se extiendan a otras áreas.
“Avanzar la frontera agropecuaria”, así se nombra al segundo objetivo de las quemas intencionales. “Son desmontes, pero en vez de usar topadoras queman los árboles. Lo suelen hacer grupos económicos grandes que compran bosques a un precio más barato y los queman para poder plantar soja y hacer que sus terrenos valgan más” especificó. Por otro lado, el experto señaló que la Ley de Bosques, con el fin de proteger a estas zonas no se aplica.
Una observación muy extraña también es que los incendios en Córdoba ocurren todos los años desde hace mucho tiempo y a pesar de esto la provincia no cuenta con una brigada de bomberos forestales. Por esta razón cada año, entre junio y diciembre, cuando se realizan las quemas y empiezan los incendios, la provincia debe pedir ayuda al gobierno nacional y a las otras provincias.
“El sistema de bomberos de Córdoba, que funciona con voluntarios, trabaja para salvar vidas humanas y casas. Si hay un incendio forestal detectan la casa más cercana y se concentran en protegerla de los fuegos”, explica Mari y agregó “Recién cuando no hay casas en riesgo se despliegan en los bosques”.
Por último el especialista contó que en las últimas dos semanas, cerca de 1.000 civiles participaron apagando los fuegos en tres ciudades cercanas a La Cumbre, donde vive, junto con unos 300 bomberos y 80 brigadistas forestales.
Con información de
Aire de Santa Fe
