Zaffaroni habló sobre el asesinato del kiosquero: "Encerrar ladroncitos no va a evitar los homicidios"
Jueves 11 de
Noviembre 2021
Sobre el tratamiento que deberían recibir a quienes denominó como "perejiles", el exmiembro de la Corte Suprema dijo que "hay que agarrarlos del cogote, pegarle dos o tres cachetadas y decirles que dejen de jorobar".
El exmiembro de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Eugenio Zaffaroni, se refirió el miércoles 10 de noviembre al asesinato del kiosquero en Ramos Mejía e insistió en que "encerrar ladroncitos" o "perejiles" no va a "evitar los homicidios".
En declaraciones a Radio 10, Zaffaroni opinó: “Si alguien cree que por encerrar más perejiles se van a evitar los homicidios, creo que está un poco equivocado. ¿Qué es encerrar perejiles? Es encerrar ladroncitos y cosas de esa naturaleza".
De esta manera se refirió a Leandro Daniel Suárez (29), el acusado de asesinar a Sabo en complicidad de una adolescente de 15 años y quien efectuó cuatro disparos al tórax de la víctima causándole la muerte de manera inmediata.
“Hay una cosa que es elemental, no se puede confundir a un homicida con un perejil. Encerrar perejiles es reproducir delincuencia”, insistió a continuación para luego denunciar que se está haciendo uso político del asesinato del kiosquero.
Con respecto al tratamiento "diferencial" que debería brindársele a ambas "clases" de individuo, señaló: “No se puede tratar a un homicida o a un violador o a un psicópata de la misma manera en que se trata a un idiota que se lleva un celular”.
Los dichos del exmiembro de la Corte Suprema de Justicia de la Nación van en sintonía con las recientes declaraciones del ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, quien sostuvo que Suárez "se bajó de un remís y mató por un osito y unos chocolates".
“En realidad el tratamiento que habría que darle a este último es agarrarlo del cogote, pegarle dos o tres cachetadas y decirle que deje de jorobar”, completó y aclaró que, sin embargo, "eso no se puede hacer porque eso es violatorio de los derechos humanos".
Defendiendo su postura, Zaffaroni insistió en el tratamiento que deben tener los delincuentes: “Si vas a llenar la cárcel de tontos, los tontos saldrán deteriorados y estigmatizados. Eso reproduce delincuencia en lugar de prevenirla".
Bajo la misma línea que comenzó a desarrollar en instancias iniciales de la entrevista, remarcó: "No se puede tratar de la misma manera a todos los casos. No se puede curar el cáncer, el sida y la tuberculosis con la misma medicina”.
Finalmente habló del concepto de “puerta giratoria” y reflexionó: “Hay gente que tiene que salir, porque si a los tontos los metes adentro es porque no hacen cosas muy graves. La puerta giratoria es porque la mayoría no está por cosas muy graves”.
En declaraciones a Radio 10, Zaffaroni opinó: “Si alguien cree que por encerrar más perejiles se van a evitar los homicidios, creo que está un poco equivocado. ¿Qué es encerrar perejiles? Es encerrar ladroncitos y cosas de esa naturaleza".
De esta manera se refirió a Leandro Daniel Suárez (29), el acusado de asesinar a Sabo en complicidad de una adolescente de 15 años y quien efectuó cuatro disparos al tórax de la víctima causándole la muerte de manera inmediata.
“Hay una cosa que es elemental, no se puede confundir a un homicida con un perejil. Encerrar perejiles es reproducir delincuencia”, insistió a continuación para luego denunciar que se está haciendo uso político del asesinato del kiosquero.
Con respecto al tratamiento "diferencial" que debería brindársele a ambas "clases" de individuo, señaló: “No se puede tratar a un homicida o a un violador o a un psicópata de la misma manera en que se trata a un idiota que se lleva un celular”.
Los dichos del exmiembro de la Corte Suprema de Justicia de la Nación van en sintonía con las recientes declaraciones del ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, quien sostuvo que Suárez "se bajó de un remís y mató por un osito y unos chocolates".
“En realidad el tratamiento que habría que darle a este último es agarrarlo del cogote, pegarle dos o tres cachetadas y decirle que deje de jorobar”, completó y aclaró que, sin embargo, "eso no se puede hacer porque eso es violatorio de los derechos humanos".
Defendiendo su postura, Zaffaroni insistió en el tratamiento que deben tener los delincuentes: “Si vas a llenar la cárcel de tontos, los tontos saldrán deteriorados y estigmatizados. Eso reproduce delincuencia en lugar de prevenirla".
Bajo la misma línea que comenzó a desarrollar en instancias iniciales de la entrevista, remarcó: "No se puede tratar de la misma manera a todos los casos. No se puede curar el cáncer, el sida y la tuberculosis con la misma medicina”.
Finalmente habló del concepto de “puerta giratoria” y reflexionó: “Hay gente que tiene que salir, porque si a los tontos los metes adentro es porque no hacen cosas muy graves. La puerta giratoria es porque la mayoría no está por cosas muy graves”.
Con información de
Perfil
