Activan segundo tramo del swap por u$s 5700 millones antes de las elecciones
Por:
Esteban Rafele
Miércoles 11 de
Octubre 2023
Massa envió intercambio de documentación antes de la partida de Alberto Fernández a Beijing. BCRA había usado fondos transitoriamente para pagarle al FMI.
El Gobierno quiere tener disponible para la semana próxima el segundo tramo de libre disponibilidad del swap con China, para sumar unos u$s 5700 millones. El Ministerio de Economía indicó que envió la documentación necesaria para poder usar esa porción de divisas, que puede cambiarse por dólares con el pago de una tasa de interés, para que el dinero sea utilizable antes de las elecciones del domingo 22.
A fines de abril, el ministro Sergio Massa y el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, firmaron en Beijing la utilización de un segundo bloque de libre disponibilidad del swap por el equivalente a u$s 18.000 millones. Desde entonces, la autoridad monetaria informó que ese dinero se activaría cuando fuera necesario. El Gobierno tocó ahora el botón rojo, días antes de la visita del presidente Alberto Fernández a Xi Jinping.
Según informó el Banco Central, el Gobierno había activado parcialmente el segundo tramo del swap en agosto, para pagarle al FMI una parte del vencimiento de capital que completó con giros de la CAF y Qatar. Una vez recibidos los DEGs, luego de la firma del acuerdo, el Estado devolvió esos préstamos transitorios. En el caso de China, fuentes oficiales argumentaron que lo hicieron para no pagar intereses de manera innecesaria.
Esa operación, según la visión del BCRA, demostró que el dinero estaba a mano, en caso de emergencia. Es algo que otras fuentes del Gobierno no comparten; consideraban que eran necesarios mayores pasos burocráticos y que se cumplirían ahora.
Alberto Fernández incluyó en el temario de su visita a Beijing la firma del acuerdo, junto con Pesce. Fuentes oficiales indicaron que la formalidad de papeles y fotos se cumpliría el miércoles 18. Días antes de su partida, Economía filtró que Massa ya comenzó con el intercambio burocrático. En BCRA consideraron que es un "viaje de consolidación" de las relaciones.
Los u$s 5000 millones, ahora líquidos o de fácil conversión, vienen a engrosar el menú que tiene el BCRA para intervenir en el mercado en momentos críticos. Se suman a los aproximadamente u$s 700 millones sobrantes del primer tramo, que pueden usarse para pagar importaciones en moneda china o convertir.
Hasta agosto, según reveló el FMI, se habían usado el equivalente a u$s 3800 millones del primer tramo. El Gobierno abrió la ventana de pagos de importaciones en abril y, hacia julio, volvió a dosificar las autorizaciones de pago, según importadores.
El ala económica del Gobierno sin traje de candidato comenzó a contar el periodo que falta para las elecciones en ruedas cambiarias. Con dos feriados en el medio, quedarían, con la de este miércoles, seis episodios.
Entre martes y miércoles, Economía, incluyó en el dólar diferencial a las exportaciones de automóviles, minería de oro y plata, pesca, girasol, vino y economías regionales. Espera que la minería adelante algo de exportaciones y que automotrices aceleren la liquidación de lo que vendieron este mes antes del 20.
En su viaje, Fernández también busca al menos u$s 500 millones para las represas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic. Sería el segundo desembolso para la obra de Santa Cruz en los casi cuatro años de su gobierno. Pero China quiere gestos para liberar el pago.
Entre varias idas y vueltas y trabas burocráticas, China giró apenas u$s 500 millones en diciembre, luego de una negociación que aceleró Massa pero que no sirvió para normalizar la ejecución de la obra.
Según negociadores el Comité de la Reforma, los bancos chinos y la aseguradora Sinosure quieren que se firmen adendas que vienen demoradas, la adenda 12 sobre la construcción de la central Kirchner y la adenda del contrato de financiamiento, con una demora de siete años.
Fernández y el canciller Santiago Cafiero también se entrevistarán, en China, con la presidenta del Nuevo Banco de Desarrollo de los BRICS, Dilma Rousseff. Luego de la entrada del país a ese bloque, fuentes oficiales lo consideraron como un primer paso para poder acceder a esa herramienta de financiamiento en el futuro, pero no mencionaron aportes inmediatos.
A fines de abril, el ministro Sergio Massa y el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, firmaron en Beijing la utilización de un segundo bloque de libre disponibilidad del swap por el equivalente a u$s 18.000 millones. Desde entonces, la autoridad monetaria informó que ese dinero se activaría cuando fuera necesario. El Gobierno tocó ahora el botón rojo, días antes de la visita del presidente Alberto Fernández a Xi Jinping.
Según informó el Banco Central, el Gobierno había activado parcialmente el segundo tramo del swap en agosto, para pagarle al FMI una parte del vencimiento de capital que completó con giros de la CAF y Qatar. Una vez recibidos los DEGs, luego de la firma del acuerdo, el Estado devolvió esos préstamos transitorios. En el caso de China, fuentes oficiales argumentaron que lo hicieron para no pagar intereses de manera innecesaria.
Esa operación, según la visión del BCRA, demostró que el dinero estaba a mano, en caso de emergencia. Es algo que otras fuentes del Gobierno no comparten; consideraban que eran necesarios mayores pasos burocráticos y que se cumplirían ahora.
Alberto Fernández incluyó en el temario de su visita a Beijing la firma del acuerdo, junto con Pesce. Fuentes oficiales indicaron que la formalidad de papeles y fotos se cumpliría el miércoles 18. Días antes de su partida, Economía filtró que Massa ya comenzó con el intercambio burocrático. En BCRA consideraron que es un "viaje de consolidación" de las relaciones.
Los u$s 5000 millones, ahora líquidos o de fácil conversión, vienen a engrosar el menú que tiene el BCRA para intervenir en el mercado en momentos críticos. Se suman a los aproximadamente u$s 700 millones sobrantes del primer tramo, que pueden usarse para pagar importaciones en moneda china o convertir.
Hasta agosto, según reveló el FMI, se habían usado el equivalente a u$s 3800 millones del primer tramo. El Gobierno abrió la ventana de pagos de importaciones en abril y, hacia julio, volvió a dosificar las autorizaciones de pago, según importadores.
El ala económica del Gobierno sin traje de candidato comenzó a contar el periodo que falta para las elecciones en ruedas cambiarias. Con dos feriados en el medio, quedarían, con la de este miércoles, seis episodios.
Entre martes y miércoles, Economía, incluyó en el dólar diferencial a las exportaciones de automóviles, minería de oro y plata, pesca, girasol, vino y economías regionales. Espera que la minería adelante algo de exportaciones y que automotrices aceleren la liquidación de lo que vendieron este mes antes del 20.
En su viaje, Fernández también busca al menos u$s 500 millones para las represas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic. Sería el segundo desembolso para la obra de Santa Cruz en los casi cuatro años de su gobierno. Pero China quiere gestos para liberar el pago.
Entre varias idas y vueltas y trabas burocráticas, China giró apenas u$s 500 millones en diciembre, luego de una negociación que aceleró Massa pero que no sirvió para normalizar la ejecución de la obra.
Según negociadores el Comité de la Reforma, los bancos chinos y la aseguradora Sinosure quieren que se firmen adendas que vienen demoradas, la adenda 12 sobre la construcción de la central Kirchner y la adenda del contrato de financiamiento, con una demora de siete años.
Fernández y el canciller Santiago Cafiero también se entrevistarán, en China, con la presidenta del Nuevo Banco de Desarrollo de los BRICS, Dilma Rousseff. Luego de la entrada del país a ese bloque, fuentes oficiales lo consideraron como un primer paso para poder acceder a esa herramienta de financiamiento en el futuro, pero no mencionaron aportes inmediatos.
