CÓRDOBA
Qué hace en Córdoba la División de Inteligencia Antiterrorista
Por:
Juan Leyes
Domingo 07 de
Enero 2018
Creó un área que hace perfiles de potenciales terroristas. Monitorea a grupos anarquistas.
Un ataque incendiario contra la sede del Círculo de Suboficiales de Gendarmería y el daño a una financiera a manos de un grupo de encapuchados durante la marcha contra el gatillo fácil, ambos en agosto, activaron los radares de la Policía de Córdoba.
La División de Inteligencia Antiterrorista (DIA), creada en marzo, prestó colaboración en la investigación del ataque contra la sede de los gendarmes hasta que la Justicia federal decidió que fuera la propia Gendarmería la que continuara la pesquisa. El hecho se produjo dentro del contexto de repudio a esa fuerza militar en relación con el caso Santiago Maldonado.
Entrevistado por La Voz, Guillermo Brunas, jefe de la división, afirmó que están al tanto de los “riesgos potenciales” de grupos anarquistas como los que actuaron en la marcha contra el gatillo fácil en agosto y de aquellos simpatizantes de acciones extremistas vinculadas al conflicto mapuche.
“Hoy se analizan los riesgos potenciales, no hay indicios de que en Córdoba exista actividad relacionada” con el grupo de Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), fue la respuesta de Brunas. De todos modos, afirmó que “se ha hecho un monitoreo preventivo”.
La división trabaja actualmente en identificar a las agrupaciones anarquistas que “se hacen llamar Black Bloc”, de la que ya hay indicios de una célula por el allanamiento de material vinculado a esta táctica de protesta.
“Lo está trabajando la Dirección General de Investigaciones Criminales a los fines de identificar esas personas y de que no se acreciente esa clase de grupos en la provincia”, dijo Brunas.
“Este tipo de agrupaciones tienen una táctica que utilizan en las manifestaciones: entran todos encapuchados, vestidos de negro, hacen algún tipo de desmán y desaparecen de la marcha con el fin de no ser detectados”, detalló el subcomisario.
Perfiles peligrosos
Este año, meses después de su creación, la DIA sumó una psiquiatra encargada del “área de perfilación” y capacitó a su personal en la materia para obtener información a través de entrevistas socioambientales, redes sociales e interacciones informáticas.
La DIA elabora los perfiles a requerimiento de la Justicia. Muchas veces se comienza en las redes sociales, sitio que también es identificado como un lugar de “captación” de voluntades de actividades terroristas, según los especialistas de esa división.
“Perfilación es entender y ver los riesgos que puede representar una persona a través de manifestaciones que haya hecho públicas, en redes sociales, por conductas que los mismos vecinos manifiestan”, describió el subcomisario Brunas.
“Es un trabajo complementario; las redes sociales ayudan, pero no son determinantes. Con los aportes de los que van investigando (en la calle o en el terreno), voy elaborando un perfil”, dijo la experta del área. También el área de informática aporta datos sobre visitas y contactos. “Con esto se cierra un círculo y se saca un patrón de lo que es la persona en sí”, contó el jefe policial.
Críticas a la nueva división
Las tareas de Inteligencia no son novedad para los organismos de derechos humanos y partidos de izquierda, que denunciaron el accionar de las fuerzas de seguridad en varias oportunidades.
“Repudiamos todo accionar que tenga que ver con inteligencia sobre las fuerzas sociales y políticas porque entendemos que los conflictos sociales y políticos se resuelven desde otro lugar; hay protocolos internacionales de actuación”, expresó Emiliano Salguero, de la Mesa de Trabajo por los Derechos Humanos. Desde esa organización denunciaron amenazas de policías durante los allanamientos a partidos políticos de agosto y a un supuesto infiltrado durante una marcha por la aparición de Santiago Maldonado, apenas un día después.
En coincidencia, la legisladora del PTS-FIT, Laura Vilches, repudió las tareas de Inteligencia y dijo que detrás de ellas hay un “mensaje de amedrentamiento”.
“El pico fue durante las movilizaciones por Santiago Maldonado; inclusive unos días después salió esta supuesta hipótesis de que había células anarquistas en Córdoba”, dijo Vilches y agregó: "esta fue una mentira que largaron a rodar en el marco de la estigmatización de los que luchamos en general y al enemigo interno que están construyendo en la medida de la política de Cambiemos que es el pueblo mapuche".
La legisladora recordó que desde su banca en la Unicameral se hicieron pedidos de informe para que el Gobierno provincial indicara detalles del funcionamiento de la DIA, pero no fueron contestados.
La División de Inteligencia Antiterrorista (DIA), creada en marzo, prestó colaboración en la investigación del ataque contra la sede de los gendarmes hasta que la Justicia federal decidió que fuera la propia Gendarmería la que continuara la pesquisa. El hecho se produjo dentro del contexto de repudio a esa fuerza militar en relación con el caso Santiago Maldonado.
Entrevistado por La Voz, Guillermo Brunas, jefe de la división, afirmó que están al tanto de los “riesgos potenciales” de grupos anarquistas como los que actuaron en la marcha contra el gatillo fácil en agosto y de aquellos simpatizantes de acciones extremistas vinculadas al conflicto mapuche.
“Hoy se analizan los riesgos potenciales, no hay indicios de que en Córdoba exista actividad relacionada” con el grupo de Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), fue la respuesta de Brunas. De todos modos, afirmó que “se ha hecho un monitoreo preventivo”.
La división trabaja actualmente en identificar a las agrupaciones anarquistas que “se hacen llamar Black Bloc”, de la que ya hay indicios de una célula por el allanamiento de material vinculado a esta táctica de protesta.
“Lo está trabajando la Dirección General de Investigaciones Criminales a los fines de identificar esas personas y de que no se acreciente esa clase de grupos en la provincia”, dijo Brunas.
“Este tipo de agrupaciones tienen una táctica que utilizan en las manifestaciones: entran todos encapuchados, vestidos de negro, hacen algún tipo de desmán y desaparecen de la marcha con el fin de no ser detectados”, detalló el subcomisario.
Perfiles peligrosos
Este año, meses después de su creación, la DIA sumó una psiquiatra encargada del “área de perfilación” y capacitó a su personal en la materia para obtener información a través de entrevistas socioambientales, redes sociales e interacciones informáticas.
La DIA elabora los perfiles a requerimiento de la Justicia. Muchas veces se comienza en las redes sociales, sitio que también es identificado como un lugar de “captación” de voluntades de actividades terroristas, según los especialistas de esa división.
“Perfilación es entender y ver los riesgos que puede representar una persona a través de manifestaciones que haya hecho públicas, en redes sociales, por conductas que los mismos vecinos manifiestan”, describió el subcomisario Brunas.
“Es un trabajo complementario; las redes sociales ayudan, pero no son determinantes. Con los aportes de los que van investigando (en la calle o en el terreno), voy elaborando un perfil”, dijo la experta del área. También el área de informática aporta datos sobre visitas y contactos. “Con esto se cierra un círculo y se saca un patrón de lo que es la persona en sí”, contó el jefe policial.
Críticas a la nueva división
Las tareas de Inteligencia no son novedad para los organismos de derechos humanos y partidos de izquierda, que denunciaron el accionar de las fuerzas de seguridad en varias oportunidades.
“Repudiamos todo accionar que tenga que ver con inteligencia sobre las fuerzas sociales y políticas porque entendemos que los conflictos sociales y políticos se resuelven desde otro lugar; hay protocolos internacionales de actuación”, expresó Emiliano Salguero, de la Mesa de Trabajo por los Derechos Humanos. Desde esa organización denunciaron amenazas de policías durante los allanamientos a partidos políticos de agosto y a un supuesto infiltrado durante una marcha por la aparición de Santiago Maldonado, apenas un día después.
En coincidencia, la legisladora del PTS-FIT, Laura Vilches, repudió las tareas de Inteligencia y dijo que detrás de ellas hay un “mensaje de amedrentamiento”.
“El pico fue durante las movilizaciones por Santiago Maldonado; inclusive unos días después salió esta supuesta hipótesis de que había células anarquistas en Córdoba”, dijo Vilches y agregó: "esta fue una mentira que largaron a rodar en el marco de la estigmatización de los que luchamos en general y al enemigo interno que están construyendo en la medida de la política de Cambiemos que es el pueblo mapuche".
La legisladora recordó que desde su banca en la Unicameral se hicieron pedidos de informe para que el Gobierno provincial indicara detalles del funcionamiento de la DIA, pero no fueron contestados.
Con información de
lavoz
