ROSARIO
Audaz robo a una conocida sandwichería en pleno centro rosarino
Lunes 05 de
Agosto 2019
El hecho sucedió esta mañana en Entre Ríos y San Lorenzo, cuando un ladrón armado a punta de pistola ingresó al local, esperó al dueño y se llevó una importante suma de dinero en efectivo.
Un ladrón de unos 25 años años ingresó hoy por la mañana a la sandwichería Monreal, de Entre Ríos y San Lorenzo, y por medio de un ardid logró llevarse la recaudación del fin de semana. Si bien no precisaron la cifra robada, de acuerdo a versiones extraoficiales se estima que la misma rondaría los 90 mil pesos.
El solitario ladrón llegó esta mañana a las 8.30 hasta la tradicional sandwichería, tocó a la puerta y preguntó por el encargado, a quien llamó por su nombre; y le dijo a la persona que estaba realizando la limpieza que “traía un paquete”.
Al abrir la puerta, la empleada se encontró con un hombre con casco de moto y bufanda, que le apuntó con una pistola 9 milímetros. Se sentó en un costado de la cocina y esperó pacientemente a uno de los dueños, que estaba desayunando en un bar próximo al local.
Cuando el dueño regresó, se encontró con el hombre armado y con el casco puesto que lo estaba esperando. “¡No me mires¡!” le dijo. Le apoyó el arma en la cabeza y lo obligó a abrir la caja fuerte y le indicó los fajos de dinero y se alzó con el total de la recaudación. Tras lograr su cometido, el delincuente los dejó encerrados en el baño y huyó con el dinero.
El negocio esta en esa esquina desde hace 60 años y es la primera vez que les roban de esta manera en las últimas décadas.
Los propietarios del lugar radicaron la denuncia en la seccional 2ª.
El solitario ladrón llegó esta mañana a las 8.30 hasta la tradicional sandwichería, tocó a la puerta y preguntó por el encargado, a quien llamó por su nombre; y le dijo a la persona que estaba realizando la limpieza que “traía un paquete”.
Al abrir la puerta, la empleada se encontró con un hombre con casco de moto y bufanda, que le apuntó con una pistola 9 milímetros. Se sentó en un costado de la cocina y esperó pacientemente a uno de los dueños, que estaba desayunando en un bar próximo al local.
Cuando el dueño regresó, se encontró con el hombre armado y con el casco puesto que lo estaba esperando. “¡No me mires¡!” le dijo. Le apoyó el arma en la cabeza y lo obligó a abrir la caja fuerte y le indicó los fajos de dinero y se alzó con el total de la recaudación. Tras lograr su cometido, el delincuente los dejó encerrados en el baño y huyó con el dinero.
El negocio esta en esa esquina desde hace 60 años y es la primera vez que les roban de esta manera en las últimas décadas.
Los propietarios del lugar radicaron la denuncia en la seccional 2ª.
Con información de
La Capital
