La Cámara de Comercio de EEUU advirtió que desacoplarse de China le costaría al país USD 500 mil millones
Jueves 18 de
Febrero 2021
Las empresas de Estados Unidos perderían cientos de miles de millones de dólares si redujeran la inversión en China o si los países aumentaran los aranceles, dijo la Cámara de Comercio de Estados Unidos en un informe en el que da cuenta del precio de una separación total de las economías más grandes del mundo.
El producto interno bruto de EEUU perdería hasta USD 500.000 millones si las compañías de ese país disminuyen la inversión extranjera directa en China a la mitad, según indicó el grupo empresarial con sede en Washington en un estudio.
Asimismo, indicó que cobrar un arancel de 25% en todo el comercio bidireccional disminuiría el PBI de EEUU en USD 190.000 millones anuales para 2025.
Cabe recordar que el flamante presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anticipó una relación bilateral con China marcada por una “extrema competencia”, pero no un conflicto comercial, como el que mantuvo su antecesor Donald Trump.
Pese a proponer un enfoque más conciliador con la única potencia capaz de disputar su hegemonía mundial en un futuro cercano, Biden fue lapidario con su par chino, Xi Jinping, al explicar por qué aún no habló con él desde que asumió: “No tiene, y no lo digo como una crítica, sino que es una realidad, un solo hueso democrático en su cuerpo”.
Cobrar un arancel de 25% en todo el comercio bidireccional disminuiría el PBI de EEUU en USD 190.000 millones anuales para 2025
No obstante, el mandatario prometió regirse por el derecho internacional y no iniciar una nueva escalada con China: “No lo voy a hacer de la forma en que (Donald) Trump lo hizo. Vamos a centrarnos en las reglas internacionales”.
Durante todo su Gobierno, Trump eligió a China como su principal rival internacional. En ese sentido, inició una guerra comercial basada en una escalada arancelaria que tuvo en vilo al mundo entero, impuso una larga serie de sanciones políticas en base a denuncias por violaciones a los derechos humanos contra minorías y persecución política a opositores, y acusó, detuvo y hasta deportó a ciudadanos chinos por espionaje.
Perder el acceso al mercado de semiconductores de China generaría una pérdida de producción de entre USD 54.000 millones y USD 124.000 millones y pondría en riesgo 100.000 empleos en EEUU.
Durante la campaña y tras asumir, Biden prometió abandonar la retórica beligerante y bajar la tensión con China. Dejó en claro que aunque hay temas en los que pueden cooperar, como en la lucha contra el cambio climático, hay otra agenda que se mantiene, como ciertos reclamos comerciales y denuncias de violaciones a los derechos humanos y políticos.
En tanto, la Cámara de Comercio de EEUU dijo que el país debería trabajar con los aliados para confrontar a China en su modelo económico estatal y las preocupaciones de seguridad nacional en lugar de actuar de manera unilateral, y sin socavar la productividad y la innovación.
Un “enfoque equilibrado y racional” de las relaciones comerciales con China es beneficioso tanto para EEUU como para la comunidad empresarial estadounidense, dijo la cámara.
El informe de la cámara también estudió el posible impacto de un desacoplamiento sobre cuatro industrias. En ese marco, indicó que perder el acceso al mercado de semiconductores de China generaría una pérdida de producción de entre USD 54.000 millones y USD 124.000 millones y pondría en riesgo 100.000 empleos en EEUU.
En tanto, la imposición de aranceles podría generar pérdidas de hasta USD 38.000 millones y cerca de 100.000 empleos en la industria química.
Asimismo, indicó que cobrar un arancel de 25% en todo el comercio bidireccional disminuiría el PBI de EEUU en USD 190.000 millones anuales para 2025.
Cabe recordar que el flamante presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anticipó una relación bilateral con China marcada por una “extrema competencia”, pero no un conflicto comercial, como el que mantuvo su antecesor Donald Trump.
Pese a proponer un enfoque más conciliador con la única potencia capaz de disputar su hegemonía mundial en un futuro cercano, Biden fue lapidario con su par chino, Xi Jinping, al explicar por qué aún no habló con él desde que asumió: “No tiene, y no lo digo como una crítica, sino que es una realidad, un solo hueso democrático en su cuerpo”.
Cobrar un arancel de 25% en todo el comercio bidireccional disminuiría el PBI de EEUU en USD 190.000 millones anuales para 2025
No obstante, el mandatario prometió regirse por el derecho internacional y no iniciar una nueva escalada con China: “No lo voy a hacer de la forma en que (Donald) Trump lo hizo. Vamos a centrarnos en las reglas internacionales”.
Durante todo su Gobierno, Trump eligió a China como su principal rival internacional. En ese sentido, inició una guerra comercial basada en una escalada arancelaria que tuvo en vilo al mundo entero, impuso una larga serie de sanciones políticas en base a denuncias por violaciones a los derechos humanos contra minorías y persecución política a opositores, y acusó, detuvo y hasta deportó a ciudadanos chinos por espionaje.
Perder el acceso al mercado de semiconductores de China generaría una pérdida de producción de entre USD 54.000 millones y USD 124.000 millones y pondría en riesgo 100.000 empleos en EEUU.
Durante la campaña y tras asumir, Biden prometió abandonar la retórica beligerante y bajar la tensión con China. Dejó en claro que aunque hay temas en los que pueden cooperar, como en la lucha contra el cambio climático, hay otra agenda que se mantiene, como ciertos reclamos comerciales y denuncias de violaciones a los derechos humanos y políticos.
En tanto, la Cámara de Comercio de EEUU dijo que el país debería trabajar con los aliados para confrontar a China en su modelo económico estatal y las preocupaciones de seguridad nacional en lugar de actuar de manera unilateral, y sin socavar la productividad y la innovación.
Un “enfoque equilibrado y racional” de las relaciones comerciales con China es beneficioso tanto para EEUU como para la comunidad empresarial estadounidense, dijo la cámara.
El informe de la cámara también estudió el posible impacto de un desacoplamiento sobre cuatro industrias. En ese marco, indicó que perder el acceso al mercado de semiconductores de China generaría una pérdida de producción de entre USD 54.000 millones y USD 124.000 millones y pondría en riesgo 100.000 empleos en EEUU.
En tanto, la imposición de aranceles podría generar pérdidas de hasta USD 38.000 millones y cerca de 100.000 empleos en la industria química.
Con información de
Infobae