Bullying: la chica de Villa Oculta agredida por sus compañeras no guarda rencor y sigue adelante
A poco más de un mes que un grupo de chicas de la escuela la agredieran provocando lesiones cortantes en su rostro, brazo izquierdo y omóplato, Leyla Molinas da el ejemplo con su bondad y fortaleza. La pequeña de solo 12 años, que vive con su familia en una humilde casilla en barrio Villa Oculta, sigue con sus estudios y no guarda rencor a su agresora
"Hoy Leyla está muy bien gracias a los médicos y a la familia. Ella sigue con sus actividades, no las perdió ni las va a perder" contó su mamá, María Angélica Martínez, mientras esperaba que la joven termine su jornada de gimnasia en el Club Unión de Santa Fe, institución con la cual su escuela, Padre Catena, hoy tiene convenio.
Aprovechando todos los espacios y oportunidades, Leyla busca superarse y alienta a su familia día a día a "seguir adelante". "Ella tiene sus labores. Va a la escuela, a clases de computación, tiene un pequeño programa de radio en Villa del Parque que la invitaron a participar con algo de información local y entretenimiento. Estamos superándonos, como ella dice; con sus 12 años me dice a mí que tenemos que seguir adelante", contó con emoción la mamá.
Leyla se recuperó de la brutal agresión que le propinó una compañera de la escuela con una trincheta por "come libros", por ser aplicada y estudiosa. Fue atendida en el Hospital Doctor Orlando Alassia de Santa Fe, donde le realizaron 20 puntos de sutura en el pómulo y curaciones en otras heridas.
"Ahora sí está tranquila, la chica que la agredió no va más a la escuela y mi hija volvió a su vida normal", confirmó Martínez y agregó que a pesar de todo su hija "también piensa en su compañera y dice «mami, qué va a pasar con esa chica cuando sea más grande»; y le digo que no sé. Ella no está rencorosa con esa chica. Mi hija no es mala", manifestó.
Hoy la familia de Leyla vive en un humilde rancho en el oeste de la ciudad, pero no pierden las ganas de progresar. "Nosotros la acompañamos a sus actividades y la apoyamos porque quiere seguir estudiando, a pesar que va recién en sexto grado. Y por eso queremos darle a nuestras hijas lo mejor. Desde Los Sin Techo nos dieron unas chapas, ahora nos faltan los materiales", comentó.